Jes¨²s Tortosa, bronce en el Mundial de taekwondo

No hab¨ªa quien le consolara en R¨ªo, ni unos d¨ªas despu¨¦s de que, a sus 18 a?os, perdiera el combate por el bronce. No quer¨ªa ni escuchar eso de que era su primera experiencia, de que lo que estaba previsto era Tokio 2020 y que ¨¦l hab¨ªa adelantado los plazos. ¡°Ya pero es que yo quer¨ªa una medalla, vine aqu¨ª para eso¡±, repet¨ªa ¨¦l en la Villa Ol¨ªmpica Jes¨²s Tortosa. Hoy ya tiene su medalla. No es ol¨ªmpica, pero con 19 a?os se ha colgado un bronce mundial en la categor¨ªa -58. Es la primera de la expedici¨®n espa?ola en Muju, Corea. La recibi¨® Tortosa con una sonrisa mientras se abrazaba con Marco Carreira, su entrenador.

Tortosa perdi¨® un combate muy intenso contra el ruso Mikhail Artamonov por 25-15 (que fue plata, tras perder despu¨¦s con el coreano Yun-Jo Jeong por 24-23). El madrile?o, que este mismo a?o ya le hab¨ªa ganado en la final del Campeonato de Europa junior y un a?o antes lo hab¨ªa hecho tambi¨¦n en semifinales del Europeo absoluto, esta vez no ha podido con ¨¦l.

El joven espa?ol hab¨ªa ganado el oro en 2014, en el Mundial Junior. El a?o pasado gan¨® la plata en el Europeo. Hoy suma un bronce. Buen estudiante (Econom¨ªa y Finanzas) y apasionado de guitarra, se entrena en el CAR (Centro de Alto Rendimiento) de Madrid. Los t¨¦cnicos destacan de ¨¦l su competitividad y su capacidad de vaciarse en el tatami. Absorbe como una esponja y en dos a?os ha tenido una progresi¨®n espectacular. En t¨¦cnica, madurez y tambi¨¦n en la forma de combatir: ha buscado la m¨¢xima efectividad. Menos patadas y m¨¢s buscar los puntos.

En su familia, todos son taekwondistas menos la madre. El padre, Jes¨²s, fue dos veces subcampe¨®n del mundo, tres veces campe¨®n de Europa y cuarto en los Juegos de Se¨²l. Desde 2005 hasta 2014, adem¨¢s, fue director t¨¦cnico de la federaci¨®n. La hermana mayor, Celia (21 a?os) se entrena en el CAR de Barcelona y el peque?o, Hugo (17) tambi¨¦n compite.

En Corea, donde Tortosa se ha subido este mediod¨ªa al tercer escal¨®n del podio, tuvo el joven espa?ol un punto de inflexi¨®n en verano de 2013. Un viaje de tres semanas a la cuna del taekwondo lo cambi¨® todo. All¨ª este deporte es una especie de culto. El despertador sonaba a las 7 de la ma?ana y para llegar al centro de entrenamiento hab¨ªa que andar una hora. ¡°Dorm¨ªa en el suelo porque no hab¨ªa camas. Me entrenaba dos veces al d¨ªa, tres horas cada entrenamiento. Ah¨ª pegu¨¦ el salto. Por la forma que tienen ellos de ver las cosas y de entrenarse, son muy sacrificados, respetuosos, y est¨¢n entregados al taekwondo. Me tom¨¦ el taekwondo de otra manera, con m¨¢s consciencia, sabiendo que ten¨ªa que entregarme a ¨¦l¡±, cont¨® a EL PA?S.

La selecci¨®n de taekwondo suele hacer concentraciones de un par de semanas en Corea para trabajar en situaciones de exigencias m¨¢ximas, es decir, contra rivales de muy alto nivel (los coreanos est¨¢n entre los mejores del mundo) para que nadie se acomode y no se baje el pist¨®n. Lo hicieron el a?o pasado un par de meses antes de los Juegos y lo han vuelto a hacer tambi¨¦n este a?o. El bronce de Tortosa le consolida entre los cinco primeros del r¨¢nking ol¨ªmpico de menos de 58 kilos. Los seis primeros tendr¨¢n el billete directo para Tokio 2020.