Y con el n¨²mero 10, el padre de Neymar
Lo ¨²nico en relaci¨®n con el jugador brasile?o que no ha sido falso ha sido su maravilloso f¨²tbol
Apunta la siempre certera prensa deportiva que Neymar Da Silva s¨¦nior, a partir de ahora el padre de Neymar, est¨¢ a punto de recibir 26 millones de euros del FC Barcelona en concepto de prima por la renovaci¨®n que firm¨® el futbolista el pasado verano y que le ataba (qu¨¦ cosas) al club azulgrana hasta el 30 de junio de 2021. De ser veraz la informaci¨®n, podr¨ªa ocurrir que el progenitor del jugador del Bar?a (a esta hora sigue siendo jugador del Bar?a, si en unos minutos no lo es no culpen a quien esto firma) abandonara las oficinas del Camp Nou con tama?a millonada, se subiera a un avi¨®n privado y acudiera sol¨ªcito a las dependencias del Par¨ªs Saint Germain, de las que saldr¨ªa con otro pastizal en el bolsillo en concepto de prima por el fichaje de su hijo. En otras palabras, que estar¨ªamos ante el sorprendente caso de un club que pagar¨ªa 26 millones destinados a mantener en n¨®mina a uno de sus trabajadores hasta 2021 solo unas horas antes de que este trabajador mande a fre¨ªr pu?etas a ese club. Parad¨®jico, cuanto menos.
Recapitulemos. Fuentes de toda solvencia, que las hay, aseguran que el extraordinario padre de Neymar y el propio Neymar han firmado un contrato mareante con el PSG, club que est¨¢ dispuesto a pagar al Bar?a la cl¨¢usula de rescisi¨®n del futbolista, cifrada en 222 millones de euros. Si esto sucede, poco podr¨¢ hacer el club catal¨¢n, como bien se ha apresurado a manifestar su presidente, que sorprendentemente sigue si¨¦ndolo, Josep Maria Bartomeu: ¡°Al final, son los jugadores los que deciden si se quieren ir¡±. Ah¨ª queda eso. Tantos a?os de dedicaci¨®n y estudio sobre la materia futbol¨ªstica para acabar descubriendo que si un jugador se quiere ir, se va. Lo que quer¨ªa advertir Bartomeu con tan sabias palabras es que el Bar?a se niega a negociar cualquier tipo de traspaso con el PSG, que es una forma como otra cualquiera de intentar, am¨¦n de taparse las verg¨¹enzas al haber ido siempre, desde el minuto uno de la historia, a remolque del club parisino, quedar bien ante el socio cul¨¦. Pero sucede que el socio cul¨¦ ya fue enga?ado y estafado una vez, motivo por el cual el Bar?a es hoy convicto de la justicia.
Se ir¨¢ al PSG el jugador brasile?o y en el Camp Nou quedar¨¢ el mismo tufo a falsedad que acompa?¨® su llegada en 2013. Porque lo ¨²nico en relaci¨®n con Neymar que no ha sido falso ha sido su maravilloso f¨²tbol. Se nos dijo aquel a?o que el precio de su fichaje ascend¨ªa a 57,1 millones de euros. Poco despu¨¦s, la denuncia de un socio elev¨® la cifra al menos hasta los 70. Pero Sandro Rosell, por entonces presidente y hoy presidiario, lo neg¨®: ¡°Son 57,1 millones, y punto¡±. D¨ªas despu¨¦s, su sucesor Bartomeu cifr¨® el montante en 86,2, sin punto alguno. Le hubi¨¦ramos cre¨ªdo, pues a los presidentes siempre hay que creerles, si no fuera porque en enero de 2015 el juez Pablo Ruz puj¨® m¨¢s alto y elev¨® la suma a 96,37, lo que no impidi¨® que una se?ora llamada Susana Monje, a la saz¨®n vicepresidenta econ¨®mica del club, tomara a la poblaci¨®n futbol¨ªstica en general, y a la azulgrana en particular, por idiota y sentenciara que el verdadero precio eran 19,3 millones de euros, que es lo que cuestan las botas de Neymar.
Visto el panorama, m¨¢s le vale al Bar?a que el PSG pague los bienhadados 222 millones y se eviten as¨ª elucubraciones acerca de comisiones, primas, corretajes y dem¨¢s. Porque lo que no podr¨¢ evitar el club azulgrana, seg¨²n todos los indicios, es que el dorsal n¨²mero 10 del PSG lo lleve la pr¨®xima temporada Neymar. O en su defecto, su padre.
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