Neymar est¨¢ de oferta

¡ªBuen d¨ªa, ?tiene la camiseta de Neymar?

¡ªEspere un segundo, por favor.

La megatienda del FC Barcelona en el Camp Nou es todo un espect¨¢culo multirracial, pero sobre todo de marketing. A orillas del supertransitado museo azulgrana ¡ªtiene cerca de 2,5 millones de visitas al a?o, el m¨¢s popular de Catalu?a¡ª, el moderno establecimiento del Bar?a, que cuenta hasta con una gran pantalla por la que desfilan im¨¢genes de los jugadores de Ernesto Valverde, es una extensi¨®n tur¨ªstica de la capital catalana. Aparecen franceses que preguntan por souvenirs de Umtiti, adolescentes que se sacan fotos con el maniqu¨ª de Piqu¨¦ y, por supuesto, todos quieren la camiseta de Messi. Sin embargo, cuando se pregunta por Neymar, el ruidoso museo se queda en silencio.

El dependiente consulta por su walkie talkie si quedan camisetas de Neymar. La escena transcurre ayer. ¡°No hay, pero si la quiere se le puede hacer. El precio es el mismo que el del resto¡±, resuelve. Parece tan inc¨®modo preguntar hoy por la camiseta del brasile?o como hace cuatro a?os era hacerlo sobre el precio de su fichaje, cuando de un d¨ªa para el otro pas¨® de costar 57 millones de euros a 86,2 y luego a m¨¢s de 100. ¡°Est¨¢n muy cabreados con el tema de Neymar, ni siquiera lo llaman por su nombre, le dicen: ¡®el que se fue¡¯. Retiraron de la tienda todas sus camisetas y mu?ecos. Y eso que despu¨¦s de Messi era el que m¨¢s vend¨ªa. A nosotros nos advirtieron de que no pod¨ªamos hablar con periodistas sobre el tema¡±, cuenta otro dependiente. ¡°No podemos decir nada¡±, concluye una de las responsables de la tienda. En cuanto se resolvi¨® su fichaje por el PSG, el Bar?a intent¨® borrar la huella de Neymar. Su imagen desapareci¨® r¨¢pidamente de la fachada del Camp Nou y sus productos volaron de las tiendas.

Presente en la ciudad

¡°Es algo normal¡±, explican desde Nike, la empresa que viste al Bar?a; ¡°cuando un jugador interrumpe su relaci¨®n con un club, autom¨¢ticamente se retiran sus productos de las tiendas oficiales¡±. Mientras hay una Barcelona que esconde a Neymar, hay otra que lo expone. No por fetichismo, simplemente por las obligaciones del comercio. En Ciutat Vella, bandera tur¨ªstica de Barcelona, no hay manera de olvidarse del 11: sus zamarras y mu?ecos aparecen por doquier. ¡°Ayer unos italianos me compraron cinco camisetas de ¨¦l¡±, explica un vendedor de Las Ramblas. Eso s¨ª, los productos de Neymar est¨¢n de oferta. Y no porque hayan llegado las rebajas. ¡°La camiseta de Neymar cuesta 30 euros¡±, dice el due?o de una tienda en el barrio G¨®tico. ¡°Bueno, 20¡±, rebaja. Y cuando se lo piensa mejor, remata: ¡°15 euros. Es el precio de coste¡±. Sin embargo, cuando se le pregunta por la de Lionel Messi, replica: ¡°Nooo, la de Messi, 50¡±.

¡°Cuando comenzaron los rumores de su traspaso par¨® la producci¨®n. Con el poco stock que nos queda, hemos realizado alguna promoci¨®n. Y con los mu?ecos que no est¨¢n vestidos con la camiseta del Bar?a, estamos negociando con el PSG¡±, explica Roger Riba, de Toodles Dolls, empresa que fabrica a los mini Neymar. ¡°Los que vivimos del merchandising del Bar?a tenemos la suerte de que el principal sustento es Messi. Nuestro stock de mu?ecos es 85% Messi, 8% Neymar y el 7% restante se divide entre Su¨¢rez, Piqu¨¦ e Iniesta. Si el que se iba era Leo, otro gallo cantar¨ªa¡±, se suma Joan L¨®pez, comercial en Distribuciones Lobat, encargada de distribuir los productos del Bar?a.

Los regates de Neymar no solo despistaron a los directivos del Barcelona. Panini, la empresa que comercializa los cromos de la Liga, utiliz¨® imagen en la portada de su nuevo ¨¢lbum de cromos, que se comercializar¨¢ desde el pr¨®ximo domingo. ¡°Fue una situaci¨®n que sorprendi¨® hasta al mismo Barcelona. Esto es fruto de las circunstancias y de los tiempos con los que tenemos que trabajar, que nos obliga a entregar la portada a finales de junio. Entonces era imposible predecir que Neymar se pod¨ªa marchar¡±, sostiene Juan Pedro Mart¨ªnez, director editorial de Panini. La empresa edit¨® 2,5 millones de ejemplares, que se distribuir¨¢n por toda Espa?a con la cara de Neymar e Isco. ¡°Buscamos una acci¨®n bonita entre dos jugadores distintos, porque a Messi y a Cristiano los ten¨ªamos muy trabajados¡±, a?ade .

Para no aburrir con Cristiano y Messi, los editores de Panini quer¨ªan apostar los dos futbolistas que supuestamente eran el futuro de La Liga: Bale y Neymar. Pero como en la empresa no estaban muy seguros de que el gal¨¦s continuara su carrera en el Bernab¨¦u, decidieron reemplazarlo por Isco. Ocurri¨®, finalmente, que el que dej¨® Espa?a fue el brasile?o. ¡°Llevo 16 a?os en la empresa, nunca nos hab¨ªa pasado algo igual. Neymar hab¨ªa renovado en 2016 y le hab¨ªan subido su cl¨¢usula. Parec¨ªa imposible que se pudiera marchar. Pero en el f¨²tbol lo imposible es posible¡±, completa el director de Panini.

Los cromos de Neymar con la camiseta del Bar?a recorrer¨¢n Espa?a, mientras sus goles se gritar¨¢n en el Parque de los Pr¨ªncipes. Son los caprichos del f¨²tbol (o del euro). Hay, sin embargo, un cari?o genuino para el brasile?o que no entiende de traiciones ni de dinero. En el parque de la Ciudadela, un ni?o de cuatro a?os, que responde al nombre de Ivo, se pasea con el 11 azulgrana tatuado en la espalda. ¡°A ¨¦l le gusta Neymar. Y se quiere poner su camiseta¡±, explica su padre.

Seg¨²n Mario Benedetti, el olvido est¨¢ lleno de memoria. Barcelona no puede olvidar a Neymar, al menos hasta que se termine su stock.