As¨ª logr¨® el Lleida eliminar a la Real: ¡°Va de creer la cosa¡±
El t¨¦cnico del equipo catal¨¢n plane¨® la eliminatoria como partidos de 45 minutos y se propuso ganar al menos uno. Pas¨® a octavos
Antes del partido, como hace siempre, en el hotel o en el mismo estadio, Gerard Albadalejo (Barcelona, 33 a?os) pronunci¨® su discurso. Emotivo, como acostumbra. ¡°Suelo utilizar siempre los mismos recursos, hablo del f¨²tbol y de la vida, porque somos gente humilde, trabajadora, que tiene que trabajar muchas horas para conseguir sus objetivos¡±, explica el joven t¨¦cnico un d¨ªa despu¨¦s al diario EL PA?S. El mi¨¦rcoles por la noche, en Anoeta, el Lleida Esportiu logr¨® mucho m¨¢s de lo que cabr¨ªa esperar de ¨¦l. Porque remont¨® un marcador adverso tras los dos goles encajados en el primer tiempo y el 0-1 del partido de la ida.
El entrenador tiene mucho que ver en el resultado final. Por c¨®mo plante¨® la eliminatoria y por c¨®mo se lo transmiti¨® a sus jugadores. Albadalejo hizo ver a los futbolistas que no jugaban 180 minutos, sino cuatro partidos de 45 minutos cada uno: ¡°Ya lo hab¨ªa hecho antes, cuando me jugaba la promoci¨®n de ascenso a la Segunda Catalana. Se trata de proponer peque?os objetivos. Si te planteas jugar contra la Real, est¨¢ claro que el Lleida no tiene nada que hacer, pero si vas superando partidos de 45 minutos la confianza va en aumento hasta que te crees que tienes opciones. En el descanso les dije que no pod¨ªamos irnos de Anoeta sin ganar una de esas partes. Si lo hac¨ªamos por un gol, caer¨ªamos con dignidad, si ¨¦ramos capaces de marcar dos, estar¨ªamos muy cerca de hacer el tercero¡±, explica. Y su guion se cumpli¨®.
As¨ª se le escuchaba gritar desde el vestuario en el descanso: ¡°No dejamos nunca de creer. Va de creer la cosa. Les podemos ganar. Ya les empatamos una parte y solo perdimos una. No par¨¦is de correr, ?eh? Estamos aqu¨ª para ser grandes¡±, les interpelaba. Y su arenga termin¨® con una pregunta: ?Qu¨¦ vamos a hacer? ¡°Ganar, ganar y ganar. Visca el Lleida¡±, respondieron, a voz en grito. Y ganaron. Y eliminaron a la Real para pasar a octavos de la Copa del Rey.
?? Ho venien cantant al bus i efectivament ha estat una gran nit.
— Lleida Esportiu (@Lleida_Esportiu) November 30, 2017
Estem a vuitens de #copa !! ??????
Classificaci¨® dedicada a tothom que estimem aquests colors ?? pic.twitter.com/rJfGJkVKGw
Despu¨¦s de aquel meneo en la media parte en el estadio guipuzcoano, los jugadores del Lleida salieron a por todas. ¡°Lejos de sentirnos temerosos pensamos que no ten¨ªamos nada que perder, decidimos bajar el bal¨®n y hacer buen f¨²tbol. En el primer tiempo hab¨ªamos fallado una ocasi¨®n muy clara; en el segundo, metimos la primera que tuvimos. Nos lo cre¨ªmos. Y empezamos a notar que la Real no estaba c¨®moda¡±, explica el portero, Diego Rivas, que hab¨ªa jugado tambi¨¦n a motivar a sus aficionados en las horas previas.
¡°Se ha quedado un buen d¨ªa para revivir las Fantas¨ªas de Atotxa de Ander Izagirre¡±, puso en su cuenta de Twitter. Hac¨ªa referencia a un art¨ªculo publicado en el ¨²ltimo n¨²mero de la Revista Panenka en el que el autor evocaba un partido de los a?os 90. La profec¨ªa de Rivas se cumpli¨®. ¡°Es bonito suponer que puede pasar algo as¨ª y que ocurra. Lo le¨ª hace una semana y lo guard¨¦. Lo puse para que todo el mundo creyera que ten¨ªamos opciones¡±, dice ahora.
A pesar de encajar dos goles en el primer tiempo, Albadalejo siempre crey¨® en la remontada. Y ten¨ªa todas las posibilidades en su cabeza. Y todos los cambios pertinentes. Si el partido se le escapaba dar¨ªa minutos a los menos habituales; si lograba el tercer gol ¡°ten¨ªa que entrar Andriu, que va muy bien de cabeza¡±, confesaba; ser¨ªa un seguro de vida para los ¨²ltimos minutos del encuentro. Por eso, se recorri¨® la banda cuando el joven Bojan la coloc¨® de cabeza (m. 87) e hizo enloquecer a sus compa?eros. El entrenador no estaba celebrando el gol de la victoria ¨Cel primero de un chico de la casa, de solo 17 a?os, y en quien el club tiene mucha confianza¨C, solo quer¨ªa que Andriu, que estaba calentando, se diera prisa en volver para salir al campo.
La gesta del Lleida Esportiu se celebr¨® en el mismo estadio y en el autob¨²s de vuelta a casa, al son de Mi gran noche, de Raphael. Y se acabaron las fiestas por el momento. Que el fin de semana espera el Elche en la Liga. ¡°Y no podemos desviarnos de nuestro objetivo principal¡±, asume Rivas. Cuando lleg¨® a San Sebasti¨¢n, el Lleida llevaba cinco partidos sin marcar un gol, seis sin ganar un partido. ¡°Esta victoria reforzar¨¢ nuestra moral y nos fortalecer¨¢ tambi¨¦n de cara al entorno, que se pone nervioso si no se gana¡±, lamenta el t¨¦cnico. ¡°No est¨¢bamos haciendo malos partidos, pero nos penalizaba mucho cualquier peque?o error. Este deporte te castiga mucho. Hab¨ªa cierto pesimismo¡±, reconoce el meta. Y cierra: ¡°Lo de Anoeta nos demuestra que hasta cuando se tuercen las cosas tienes que seguir creyendo. Esperemos que la mala racha acabe aqu¨ª¡±.
Ahora algunos quieren que el sorteo les regale a uno de los grandes de la Liga espa?ola. La mejor manera de llenar el Camp d¡¯Esports de Lleida. Y de hacer caja. Y qui¨¦n sabe si de repetir algunos de los momentos m¨¢s emocionantes de su historia, como cuando en la temporada 1992-1993 un equipo dirigido por Man¨¦ le gan¨® (0-1) al Barcelona de Cruyff en el Camp Nou o provoc¨® la destituci¨®n de Benito Floro tras una sonora victoria frente al Madrid en su estadio (2-1) y una bronca del t¨¦cnico a sus jugadores que fue aireada por las televisiones. ¡°Dios, ?no os da verg¨¹enza?¡±, les gritaba Floro en el descanso entre otras lindezas.
En Anoeta los gestos, que se sepa, fueron m¨¢s amables. La sorpresa fue igualmente may¨²scula.
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