De luchar contra Fidel Castro a hacer negocios con David Beckham
Los hijos del fallecido l¨ªder cubanoamericano Jorge Mas Canosa se asocian con el futbolista ingl¨¦s para lanzar en la Major Soccer League el Miami Beckham United
Los Mas son una de las familias fuertes de Miami. El iniciador del linaje empresarial, Jorge Mas Canosa, fallecido en 1997, fue el l¨ªder del anticastrismo en Florida. Adem¨¢s de dedicar d¨¦cadas a conspirar contra el r¨¦gimen de La Habana y a cabildear en Washington para tratar de someterlo con sanciones, este huracanado anticomunista desarroll¨®, de manera entrelazada, una fortuna en el mundo de los negocios que han continuado con ¨¦xito sus hijos Jorge y Jos¨¦ Mas.
Pero Miami ha cambiado. Fidel Castro ha muerto. La pol¨ªtica y Cuba ya no son aqu¨ª la obsesi¨®n que fueron. En la gran metr¨®polis de Florida mandan las empresas y el dinero, y los Mas, que siguen encabezando la Fundaci¨®n Nacional Cubano-americana y reclamando la democratizaci¨®n de la isla, son sobre todo empresarios. En la compa?¨ªa que inici¨® su padre, MasTec ¨Cuna firma de construcci¨®n de infraestructuras que explota los sectores energ¨¦tico y de telecomunicaciones, que cotiza en bolsa y que el a?o pasado obtuvo 5.100 millones de d¨®lares de ingresos¨C, los hermanos son los accionistas mayoritarios con alrededor de un 20% de los t¨ªtulos. Y su ¨²ltimo reto ha sido asociarse con David Beckham en el proyecto del ingl¨¦s de lanzar en Miami un equipo de f¨²tbol de primer nivel dentro de la Major League Soccer (MLS). La liga ha anunciado este jueves que aprueba la entrada de los Mas en la franquicia. Otro socio capitalista que se incorpora al proyecto es el multimillonario japon¨¦s Masayoshi Son, con un patrimonio de 22.000 millones, seg¨²n Forbes. Entre los socios del proyecto ya estaban involucrados el boliviano Marcelo Claure, CEO de la compa?¨ªa de telecomunicaciones Sprint, y Simon Fuller, un productor de televisi¨®n brit¨¢nico que fue m¨¢nager de las Spice Girls.
Beckham y sus socios comprar¨¢n la franquicia a un precio ventajoso ¨C25 millones de d¨®lares frente a los 150 millones que cuesta hoy¨C pactado en 2007 por el futbolista con la MLS cuando fich¨® por Los ?ngeles Galaxy. El astro y sus asesores tuvieron visi¨®n de futuro. Se espera que en pocas semanas la liga oficialice la concesi¨®n de la franquicia, lo que convertir¨¢ al Miami Beckham United en el 24? equipo de la competici¨®n, que est¨¢ en plena fase de crecimiento y prev¨¦ tener 28 clubes hacia 2024. Ciudades como Cincinnati, Detroit, Nashville o Sacramento hacen fila para ser las siguientes.
El equipo del exfutbolista podr¨ªa empezar a jugar la liga en 2019 o 2020 y le dar¨¢ un club de f¨²tbol a Miami en la MLS 27 a?os despu¨¦s de la fundaci¨®n de este torneo. Miami ya cuenta con un equipo, el Miami FC, creado en 2015, del que es copropietario el exfutbolista italiano Paolo Maldini y que juega en la North American Soccer League (NASL), una suerte de segunda divisi¨®n. Pero, pese a que Miami es una ciudad muy hispana, el f¨²tbol no ha prendido todav¨ªa, al menos con el Miami FC. La apuesta de Beckham es que entre su gancho personal, la integraci¨®n de su club en la cada vez m¨¢s prestigiosa MLS y la edificaci¨®n de un estadio de relumbr¨®n, la fiebre del soccer detone en Miami. A ello deber¨ªa ayudar la raigambre de la familia Mas y su extensa red de contactos en la ciudad.
En Florida, hasta ahora, solo hay un equipo en la MLS, los Orlando City SC, incorporados en 2015 y que estas dos temporadas han tenido un gran ¨¦xito de p¨²blico. Su estrella es Kak¨¢.
Los Mas entrar¨¢n a dar m¨²sculo financiero y conocimiento de las din¨¢micas locales para la construcci¨®n de un estadio de 25.000 espectadores y con un coste de unos 300 millones de d¨®lares en el centro de Miami, a poca distancia del American Airlines, donde juegan los Miami Heat, o del estadio de los Marlins de b¨¦isbol. La incorporaci¨®n de esta familia y del japon¨¦s Son supone un alivio para Beckham y sus socios, que hab¨ªan perdido por el camino el compromiso del copropietario de los Dodgers de Los ?ngeles de b¨¦isbol, Todd Boehly, de ser su socio mayoritario. Desde que el futbolista ingl¨¦s anunci¨® en 2014 el plan del Miami Beckham United, el desarrollo del proyecto se ha ido trabando por problemas burocr¨¢ticos, de b¨²squeda de suelo para el estadio y de incertidumbre en torno al pulm¨®n financiero del grupo de Beckham para asumir su realizaci¨®n.
La alianza con Beckham, aparte de su potencial de negocio, satisface el deseo del magnate Jorge Mas Santos, muy aficionado al deporte, de internarse en ese mundo como empresario. El hijo mayor de Mas Canosa, cuyas acciones en MasTec est¨¢n valoradas en m¨¢s de 500 millones de d¨®lares, ya se interes¨® el verano pasado por comprar los Marlins de b¨¦isbol, pero los compradores fueron el empresario Ben Sherman y Derek Jeter, exestrella de los New York Yankees, por m¨¢s de mil millones.
Dar con la tecla del f¨²tbol en Miami ser¨ªa un verdadero campanazo. El soccer no deja de ganar terreno en EE UU y si al fin conecta con Miami, con su turbina de d¨®lares, su coraz¨®n hispano y su lugar capital como cruce de caminos internacional, el c¨®ctel puede ser explosivo. En 2016, la MLS rompi¨® su r¨¦cord de venta de entradas (7,4 millones de boletos, un 40% m¨¢s que en 2015), y entre los ni?os el f¨²tbol es un deporte que gana enteros: m¨¢s de tres millones juegan en equipos, un 89% m¨¢s que en 1990, y seg¨²n una encuesta de ESPN en 2014 el f¨²tbol fue el segundo deporte m¨¢s valorado por chicos de 12 a 17 a?os, despu¨¦s del f¨²tbol americano e igualado en popularidad a la Major League Baseball (MLB).
David Beckham marc¨® un salt¨® de calidad en la MLS al fichar en 2007 por Los ?ngeles Galaxy. Ahora podr¨ªa ayudar a darle m¨¢s fuste con su United tropical. Y teniendo en cuenta el fervor desatado por el balompi¨¦ que se vive en Cuba, qui¨¦n sabe si alg¨²n d¨ªa los hijos de Mas Canosa visitar¨ªan la tierra de su padre. Mejor armados que para un desembarco. Con un bal¨®n de f¨²tbol por delante.
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