Espanyol - Barcelona: el derbi de Piqu¨¦
La intervenci¨®n del central del Bar?a, que ha merecido una r¨¦plica publicitaria del Espanyol, capitaliza un partido declarado de alto riesgo en Cornell¨¤
Un derbi siempre ha sido algo m¨¢s que el relato de un partido; tres consecutivos suponen ya una novela, y no solo ciudadana, como es el caso del Espanyol-Bar?a, sobre todo si en el contencioso interviene un personaje de pel¨ªcula de nombre Piqu¨¦. El central azulgrana, culer de cuna, futbolista internacional extraordinario, aspirante a presidente del Barcelona, periodista amable, conductor desafiante, catal¨¢n comprometido con el proc¨¦s, empresario eficiente, compa?ero de Shakira y padre de dos hijos, decidi¨® denominar al Espanyol, como se ha conocido siempre al equipo blanquiazul, ¡°Espanyol de Cornell¨¤¡±, as¨ª, con coletilla, rintint¨ªn y un tono que da para muchas interpretaciones: ?es clasista? ?habla con desprecio? ?es una cuesti¨®n de localizaci¨®n? Habr¨¢ que esperar a que vuelva a hablar Piqu¨¦.
Ofendido, el Espanyol ha respondido cada d¨ªa y de diferente manera, la ¨²ltima con una p¨¢gina de publicidad en la prensa en la que se lee ¡°RCD Espanyol de Barcelona, de Cornell¨¤, del Prat, de Sant Adri¨¤, de Sarri¨¤, del Poblenou, de Pedralbes, de L¡¯Hospitalet, de la Bonanova, de La Verneda, de dalt, de baix, dels forts, dels febles, dels rics, dels humils. RCD Espanyol vostre. RCD Espanyol de tot aquell qui somia¡±. Y firma con su eslogan de Maravellosa Minoria. El club ya denunci¨® a Piqu¨¦ y sorprendentemente tambi¨¦n a Busquets, y el Comit¨¦ de Competici¨®n abri¨® un expediente a ambos jugadores, decisiones que provocaron estupor en el Barcelona.
Los hechos difieren de las apariencias porque representantes de ambas directivas tienen previsto almorzar antes del partido, despu¨¦s de que los dos entrenadores, Valverde y S¨¢nchez Flores, ya se fotografiaran ayer en el RCDE Stadium, y hablaran de forma respetuosa en sus comparecencias, m¨¢s el azulgrana por su pasado como jugador y entrenador vinculado al Espanyol. El partido ha sido declarado de alto riesgo, se anuncia la presencia de unos 150 antidisturbios y se procurar¨¢ que no entren al estadio radicales barcelonistas despu¨¦s de que algunos hinchas blanquiazules sortearan la seguridad del Camp Nou en la vuelta de la Copa, eliminatoria que dej¨® secuelas deportivas y afectivas, propias de la rivalidad y de dos marcadores opuestos y ajustados: 1-0 en la ida y 2-0 en la vuelta. El Bar?a se clasific¨® despu¨¦s de perder su condici¨®n de invicto en casa del Espanyol.
El reencuentro se presenta tan tenso y emocionante que invita a tomar precauciones, sobre todo con los aficionados extremistas, cada vez m¨¢s visibles en el fondo norte del Camp Nou y en alguna zona del RCDE Stadium, especialmente despectivos y groseros con la familia de Piqu¨¦. Los insultos han adquirido tal volumen y agresividad en ambos campos que hay un cierto temor a que la contienda se inflame como no ocurr¨ªa desde los tiempos de los Boixos Nois y las Brigadas Blanquiazules. Hay quien advierte incitaci¨®n a la violencia y tambi¨¦n se cuentan los que hablan de libertad de expresi¨®n; las gradas de animaci¨®n, en cualquier caso, no parecen ser precisamente uno de los mejores inventos de la Liga.
Al Bar?a le sobra de alguna manera el derbi hasta el extremo de negarlo, que es en el fondo a lo que se refiere Piqu¨¦. El desgaste es may¨²sculo para el l¨ªder y equipo hegem¨®nico de Barcelona y Catalu?a. El rival ya no es el Espanyol sino el Madrid. Y al Espanyol en cambio le conviene el derbi para afirmarse despu¨¦s de quedar en tierra de nadie en la Liga y ser eliminado de la Copa. Las dudas sobre el proyecto de Mister Chen son menores cuando se gana al Bar?a. ¡°Ser del Espanyol no es f¨¢cil. Se vive avasallado por los medios de comunicaci¨®n, en la calle. Nos hacen invisibles¡±, ha dicho S¨¢nchez Flores. ¡°Representamos un sentimiento y se tiene que notar en el campo¡±. Muy distante con el club, el t¨¦cnico se puso con orgullo la zamarra blanquiazul ante la visita del Bar?a. Reforzado por la Roca S¨¢nchez, el equipo cuenta con muchos jugadores periquitos dispuestos a reivindicarse como Gerard Moreno.
A la excitaci¨®n del Espanyol responde el Bar?a con la calma de Valverde: ¡°Se hace mucho ruido en muchas cosas y luego la gente es m¨¢s normal. No espero dureza ni agresividad sino tensi¨®n en el RCDE Stadium¡±. Al entrenador le preocupa tanto la carga de partidos de su equipo, y puede que tambi¨¦n la cita copera del jueves en Valencia, que ¡°refrescar¨¢¡± al equipo y es muy capaz de dar descanso a Piqu¨¦, protagonista de los Espanyol-Bar?a.
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