Los cuatro centuriones de Diego Costa y Griezmann

Las paradojas en el f¨²tbol pueden resultar asombrosas. Con la f¨®rmula cementera del cuatrivote formado por Sa¨²l, Gabi, Thomas y Koke, el Atl¨¦tico de Madrid le hizo cinco goles al Sevilla en el S¨¢nchez Pizju¨¢n. La versi¨®n menos creativa del centro del campo que puede armar Simeone se prob¨® por primera vez con Diego Costa como referencia ofensiva. El resultado fue una exhibici¨®n goleadora poco frecuente en la era Simeone. La tunda al Sevilla ha supuesto un golpe de autoridad que permite a los rojiblancos acudir al Camp Nou para tratar de convertir la pelea por el t¨ªtulo liguero en un estrecho mano a mano.

Entre el cuerpo t¨¦cnico del Atl¨¦tico exist¨ªa el convencimiento de que con la l¨ªnea de mediocampistas m¨¢s f¨ªsica y que m¨¢s equilibrio le puede dar, con el momento de forma por el que atraviesa Griezmann, m¨¢s la presencia de Costa como cabeza de ¨¢rea, el dise?o pod¨ªa resultar tan gran¨ªtico en defensa como contundente en ataque. Un martillo pil¨®n que al t¨¦rmino del partido Simeone describi¨® con la boca grande al hablar de ¡°un bloque¡± que tambi¨¦n supo ¡°leer el partido, ser contundente¡± y que tuvo ¡°momentos de muy buen f¨²tbol¡±. Una roca que se afil¨® y encontr¨® el gol cuando la presi¨®n fue cerca del ¨¢rea del Sevilla. A falta de una elaboraci¨®n m¨¢s consistente, da?ina y regular, el Atl¨¦tico supo dibujar el paisaje en el que mejor se encuentra para encontrar el gol. La mayor¨ªa se gest¨® en los intentos por recuperar la pelota arriba y armar el ataque con la defensa del Sevilla saliendo con la pelota o descolocada. La p¨¦rdida de Banega en el primer gol, la pujanza de Koke que gener¨® el rechace que Griezmann convirti¨® en una obra maestra en el segundo tanto, el contragolpe que origin¨® el penalti en el tercero o el robo de Griezmann que signific¨® el 0-4, tuvieron en com¨²n la secuencia del robo y el ataque r¨¢pido y directo. ¡°No es casualidad robar pelotas donde se robaron. Para que haya un error tiene que haber una presi¨®n para que esto suceda¡±, advirti¨® Simeone.

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El partido de Sevilla dej¨® para el Atl¨¦tico varios matices que le reconfortan. Hasta ahora, Diego Costa y Griezmann no hab¨ªan firmado una actuaci¨®n tan sobresaliente de manera conjunta. Empezaba a imponerse la sensaci¨®n de que cuando uno brillaba el otro no lo hac¨ªa tanto. Si el equipo incurr¨ªa en un exceso de balones largos para buscar a Costa se saltaba demasiado a Griezmann. Si optaba por jugar primero con el franc¨¦s el hispanobrasile?o interven¨ªa menos. Costa sent¨ªa que el equipo no le encontraba con frecuencia o en condiciones ventajosas. Se preocup¨® por Koke, recordando que fue su mejor lanzador en la temporada de la conquista del t¨ªtulo liguero. En el S¨¢nchez Pizju¨¢n, la conexi¨®n revivi¨® sus mejores d¨ªas. A Koke tambi¨¦n le favorece pillar a los equipos contrarios desordenados para encontrar mejor los pases al espacio para Costa e incluso para Griezmann.

El punta galo est¨¢ muy c¨®modo desde la llegada de Costa. Le ha liberado para moverse por todo el frente de ataque y elegir los momentos y los espacios en los que intervenir. De alguna manera, los problemas que tiene Simeone para encajar a ese cuarto centrocampista de corte m¨¢s creativo desaparecen con esa versi¨®n m¨¢s liberada de Griezmann. Con la salida de Carrasco y de Gait¨¢n el repaso del plantel del que dispondr¨¢ Simeone transmite esa sensaci¨®n de bloque marm¨®reo en el que ya solo el franc¨¦s. Correa y Vitolo brillan por su desequilibrio con la pelota.

El perfil del plantel se ha radicalizado para acercarse m¨¢s a una f¨®rmula en la que su entrenador se siente m¨¢s seguro e identificado. La radiograf¨ªa no ser¨¢ un molde fijo ante rivales como el Legan¨¦s o para algunos partidos de casa, pero apunta a que para los partidos de enjundia que restan de aqu¨ª al final de temporada sea la escogida si Griezmann y Costa mantiene el nivel mostrado en el Pizju¨¢n.