Ra¨²l y Xavi vuelven a clase

Tres de la tarde. Dos futbolistas terminan de hacer deberes en la cafeter¨ªa de la Ciudad del f¨²tbol de Las Rozas, en Madrid. ¡°Son de la clase de ¨¦tica¡±, aclara Marcos Senna, uno de los 16 alumnos del curso de entrenadores que arranc¨® este lunes. ¡°?Es muy duro! Nos ponen deberes todos los d¨ªas. ?Y ex¨¢menes!¡±, a?ade su compa?ero Joan Capdevila entre risas. ¡°Es muy intenso y muy interesante. Ayer, por ejemplo, nos ense?aron a trabajar con ni?os y a afrontar una charla con los padres¡±, a?ade Capdevila, conocedor de los problemas que ha habido en algunos campos con episodios de violencia por parte de familiares de los chavales. Durante seis semanas, ambos exfutbolistas compartir¨¢n pupitre con Ra¨²l, Xavi, Xabi Alonso, V¨ªctor Vald¨¦s y Julio Baptista, entre otros. Al terminar el curso, que dura seis semanas y cuesta 3.500 euros, podr¨¢n entrenar desde las categor¨ªas juveniles hasta la Tercera Divisi¨®n.

M¨¢s informaci¨®n

Lo que va de Guardiola a Xavi

Xavi Hern¨¢ndez: ¡°El f¨²tbol se ha convertido en f¨²tbol americano¡±

Xavi Hern¨¢ndez, de 38 a?os, juega todav¨ªa en el Al-Sadd y ha estado colaborando en la organizaci¨®n de Qatar 2022, y cuenta que decidi¨® matricularse pensando en alargar lo m¨¢s posible las sensaciones de un deporte que le hizo campe¨®n del mundo en 2010. ¡°Lo m¨¢s cercano para seguir disfrutando del f¨²tbol es estar en un banquillo¡±, explica antes de entrar en clase de ¨¦tica deportiva. ¡°Estoy muy contento. Con casi todos los compa?eros del curso he vivido algo, en la selecci¨®n o en alg¨²n club. ?Es raro volver al cole? Algo s¨ª, tienes que estar atento, aplicado, hacer presentaciones. El curso es intenso¡­¡±. Para Xabi Alonso, que anunci¨® hace un a?o su retirada, este tambi¨¦n era el paso natural. ¡°Despu¨¦s de haber disfrutado mucho en el campo, esta es la siguiente fase, y la formaci¨®n es imprescindible¡±. Preguntado a qu¨¦ entrenador le gustar¨ªa parecerse, contesta, diplom¨¢tico, que ha aprendido mucho de todos los que ha tenido, ¡°cada uno con su sello propio¡±.

Capdevilla, una sonrisa andante, lo tiene m¨¢s claro: ¡°Yo quiero ser el mejor. Mejor que Guardiola, que Mourinho y que Valverde. Pero primero tengo que aprobar¡±.

Senna se r¨ªe. ¡°En mi caso el banquillo no me atrae todav¨ªa. Pero s¨ª quer¨ªa tener este t¨ªtulo, que te quita menos tiempo que otros, y formarme para abrirme una puerta en el futuro. De momento llevo dos a?os en relaciones institucionales en el Villarreal y eso me atrae m¨¢s¡±.

El curso arranca a las 9 de la ma?ana y termina a las ocho de la tarde, salvo los viernes, que tienen la tarde libre. Los jugadores han sido emparejados para realizar trabajos y presentaciones. Al madridista Ra¨²l le ha tocado con David Fuster; a Xavi con Julio Baptista; a Albert Riera con Luis Garc¨ªa¡­ Tienen asignaturas sobre gesti¨®n de clubes, tecnolog¨ªa, ¨¦tica deportiva, reglas de juego, medicina y nutrici¨®n, orientaci¨®n a futbolistas, filosof¨ªa did¨¢ctica, liderazgo, psicolog¨ªa y redes sociales, porque los entrenadores ¡ªexplica un miembro de la federaci¨®n¡ª tambi¨¦n tienen que ense?ar a sus jugadores a no meter la pata en las redes.

Tambi¨¦n hay una parte pr¨¢ctica: los alumnos entrenar¨¢n a chavales, generalmente vinculados a sus antiguos equipos, y har¨¢n casos pr¨¢cticos, en los que unos volver¨¢n a hacer de jugadores y otros de m¨ªster. Para poder matricularse, ten¨ªan que cumplir al menos uno de estos requisitos: haber estado ocho a?os jugando en Primera Divisi¨®n, haber sido cinco veces internacional con la selecci¨®n, campe¨®n de Europa, campe¨®n del mundo o en los Juegos Ol¨ªmpicos. Entre los 16 alumnos hay dos mujeres: Elisabeth Ibarra, exjugadora del Athletic, y Saray Garc¨ªa, del Madrid. En el profesorado figuran nombres como Miguel ?ngel Espa?a, entrenador de porteros; Santiago Coca, que fue maestro de Jos¨¦ Antonio Camacho y Pep Guardiola; y Antonio Escribano, catedr¨¢tico de nutrici¨®n deportiva.

Hay asignaturas para casi todo, pero al final cada vestuario es un mundo. Haber sido jugador a veces ayuda y otras no tanto. ¡°Creo que lo m¨¢s dif¨ªcil de ser entrenador es conseguir convencer a un grupo de jugadores de tu mensaje. A algunos habr¨¢ que gritarles, a otros tratarlos individualmente, pero al final son 25 cabezas y cada uno piensa de una manera distinta¡±, explica Marcos Senna.