El Bilbao Basket desciende

¡°Nunca esperas que esto pase as¨ª, pero a veces las cosas no dependen de uno mismo. Es la vida¡±, resumi¨® ?lex Mumbr¨² tras consumarse el descenso del Bilbao Basket. El campe¨®n del mundo y capit¨¢n de los Hombres de Negro asum¨ªa a duras penas el viaje al abismo en su antepen¨²ltimo partido como profesional. Venci¨® el Baskonia en Miribilla (74-78) y el Joventut al Fuenlabrada (95-87). Se acab¨® el dilema de la permanencia: escapan de la quema los verdinegros y el Zaragoza; bajan el Betis y el Bilbao Basket.

¡°Es un palo duro para Vizcaya, para el club, e incluso para la ACB. Sin el Bilbao se pierde a un equipo con mucha afici¨®n¡±, sentenci¨® Jaka Lakovic. El entrenador esloveno, que relev¨® a Veljko Mrsic hace dos semanas, no pudo evitar la cr¨®nica de un descenso anunciado tras 14 a?os en la ACB.

En Bilbao, la arquitectura y la m¨ªstica crecieron casi de la mano a principios de este siglo. En el a?o 2000, al tiempo que comenzaba a urbanizarse el ensanche del barrio de Miribilla se refundaba el equipo de baloncesto. Una d¨¦cada despu¨¦s, coincidiendo con la construcci¨®n del nuevo pabell¨®n, encargado para dar relevo al vetusto recinto de La Casilla, tomaba vuelo el ambicioso proyecto del Bilbao Basket. El equipo creci¨® de manera fulgurante desde su ascenso a la ACB en 2004, alcanz¨® las semifinales de la Eurocup en 2010, el subcampeonato de Liga en 2011, roz¨® la Final Four en 2012 y disput¨® su primera final continental en 2013; sin embargo, el plan ten¨ªa unos cimientos de barro. La codicia gener¨® una edificaci¨®n tan ostentosa como inestable que se vino abajo entre promesas incumplidas, impagos y huelgas. Pas¨® la bonanza y florecieron los desprop¨®sitos administrativos protagonizados por el m¨¢ximo accionista, Gorka Arrinda, y su grupo de colaboradores. La deuda rebas¨® los cinco millones de euros.

Durante 18 d¨ªas, entre el 20 de julio y el 8 de agosto de 2014, el baloncesto en Bilbao se qued¨® sin pulso; desconectado de la ACB tras quedar excluido de la competici¨®n por no restituir los cerca de 200.000 euros del fondo de garant¨ªa salarial y mantener unas deudas con la Asociaci¨®n y con la plantilla que superaban el tope permitido (el 15% de la masa salarial). El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) revoc¨® la decisi¨®n y oblig¨® a la ACB a readmitir al club. Entre la catarsis y el desquite, el equipo se levant¨®. Volvi¨® a disputar la Copa, fue cuarto en la temporada 2014-2015 y d¨¦cimo en las dos siguientes, pero nunca se solvent¨® la sostenibilidad presupuestaria.

El grupo de gestores que se hizo cargo del club en 2014 estabiliz¨® al enfermo pero no encontr¨® la viabilidad como se ha acreditado esta temporada. Ra¨²l L¨®pez se hizo cargo de la direcci¨®n deportiva, m¨¢s por la deuda, moral y econ¨®mica, contra¨ªda por el club con ¨¦l durante cinco a?os que por tener vocaci¨®n de despacho. Carles Dur¨¢n solo estuvo nueve jornadas en el banquillo y, tras seis derrotas, fue sustituido en diciembre por Mrsic, sin experiencia en la ACB. Cinco meses despu¨¦s, el croata era destituido (con un balance de cinco victorias y 16 derrotas) mientras Dur¨¢n salvaba al Joventut con un memorable sprint final. Los veteranos, Mumbr¨² (38 a?os), Salgado (37) y Hervelle (35), se quedaron muy solos para levantar la misi¨®n.

Al final lleg¨® el lobo. Despu¨¦s 14 a?os en la ACB y de permanecer varias jornadas en el alambre, este domingo se consum¨® el descenso del Bilbao Basket a la LEB. Quedan eso s¨ª, los playoffs de los despachos. ¡°La historia en la ACB dice que no todo tiene que sacarse en el plano deportivo¡±, explic¨® Diego S¨¢enz, director general del club. ¡°Intentamos agarrarnos a la ¨²ltima alternativa porque tenemos una responsabilidad con el baloncesto vizca¨ªno¡±, cerr¨®. Perdida la categor¨ªa, que Miribilla sea de ACB depender¨¢ de que el club de LEB que acompa?e al Breog¨¢n no complete los tr¨¢mites.