Cristiano para resucitar a un muerto
La Serie A, en una situaci¨®n de largo estancamiento, espera recuperar su vigor deporito y comercial a trav¨¦s de la llegada de la estrella portuguesa
El verano m¨¢s melanc¨®lico de la historia del calcio italiano, la primera vez en 60 a?os que la Nazionale se qued¨® fuera de un Mundial, ha visto caer un meteorito en Tur¨ªn. El fichaje de Cristiano Ronaldo, anunciado ayer por la tarde, revoluciona desde el primer minuto la burguesa y tranquila capital piamontesa. Pero tambi¨¦n es una inyecci¨®n de adrenalina en el coraz¨®n de un paciente terminal como la Serie A. CR7 tiene 33 a?os y, probablemente, ha dado ya lo mejor de su f¨²tbol, asume la Juve y el pa¨ªs entero. Pero para un campeonato acostumbrado a ver hacer las maletas a sus estrellas ¨Clo normal este a?o hubiera sido despedir a Dybala rumbo a otro pa¨ªs-, su llegada revitaliza este espect¨¢culo: desde las gradas, a los contratos comerciales que languidec¨ªan. La Juve vuela en Bolsa y hasta ayer se mantuvieron congeladas las negociaciones de varios grandes acuerdos a la espera de c¨®mo pod¨ªa subir el precio. Todo el mundo quiere sacar tajada del gran negocio.
Todo tiende a exagerarse en Italia, especialmente en el f¨²tbol. Pero esta vez nadie recuerda un aterrizaje futbol¨ªstico de este tipo. Diego Armando Maradona ¨Cfichado por el N¨¢poles en 1984- y Ronaldo Nazario ¨Ccomprado por el Inter en 1997- son los dos ¨²nicos nombres (ambos procedentes del FC Barcelona) comparables al impacto que tendr¨¢ la llegada de Cristiano Ronaldo a la Serie A. ¡°Pero medi¨¢ticamente este lo es mucho m¨¢s, claro¡±, se?ala Paolo Brusorio, redactor jefe de Deportes de La Stampa, el peri¨®dico que fue propiedad de la familia Agnelli (la misma que posee la Juventus). ¡°Maradona fue un gran golpe, pero el campeonato italiano entonces era de los m¨¢s importantes del mundo. No es la situaci¨®n actual¡±, insiste Brusorio.
Cristiano Ronaldo, un tipo capaz de meter un gol por partido durante nueve a?os y de amargarle dos veces a la Juve el sue?o de la Champions, llega a un campeonato en la UVI desde hace tiempo. Una liga que entre 1991 y 200 fue considerada por los est¨¢ndares de la UEFA la mejor del mundo. Una competici¨®n que alumbraba la mayor¨ªa de balones de oro de ese periodo (Papin, Van Basten, Weah...) y generaba ingentes ingresos televisivos y comerciales. Pero el largo crep¨²sculo se explica a trav¨¦s de elementos extradeportivos como el modelo de negocio o la mala gesti¨®n de los clubes, a cuyas gradas asiste una media de 22.221 espectadores. Sirve para entenderlo tambi¨¦n que durante siete a?os consecutivos ¨Cy la llegada de Ronaldo solo invita a pensar en la prolongaci¨®n de esa hegemon¨ªa- gane el scudetto el mismo equipo. Pero ha sido fundamental la ausencia de un nombre rotundo que reventase los derechos televisivos al otro lado del planeta. Ronaldo es lo que buscaban.
El periodista Marco Bellinazzo autor de El fin del calcio italiano (Feltrinelli, 2018), uno de los libros m¨¢s vendidos en Italia estos d¨ªas, cree que el efecto CR7 ser¨¢ bueno. Pero puede enmascarar un problema de fondo. ¡°La Juve es el equipo menos italiano de Italia. Son los ¨²nicos que han cambiado de modelo, tienen 200 millones de diferencia en la facturaci¨®n con el segundo equipo m¨¢s rico, 500 trabajadores, un gran estadio. El efecto CR7 tiene un beneficio para toda la Serie A, pero puede ser velo que cubra muchos otros problemas estructurales como la gesti¨®n o el modelo de negocio¡±, apunta.
La Juve, propiedad de la familia Agnelli (la misma que posee Fiat y Ferrari) y el equipo m¨¢s parecido al Real Madrid en Italia, siempre ha llevado sus cuentas al mil¨ªmetro y no ha permitido los excesos salariales. La pol¨ªtica de contenci¨®n se rompe con la llegada de Ronaldo para cambiar la estrategia de expansi¨®n internacional e intentar aumentar la facturaci¨®n para acercarse a los grandes clubes mundiales. Pero primero tendr¨¢ que vender a alguna estrella. Se espera que salgan Higua¨ªn (pedir¨¢n unos 60 millones) y Alex Sandro. Y luego rentabilizar al m¨¢ximo la imagen de CR7. Michele Costabile, profesor de Marketing y Management de la Universidad Luiss y director del centro XITE, no tiene duda del retorno de la inversi¨®n. ¡°Pone a la Juve en ¨®rbita de las compa?¨ªas globales. Volver a imaginar estrategias de para sacar rendimiento de sus activos. No tiene que asustar lo que cuesta, solo si no hay ingresos globales a cambio. El desaf¨ªo es transformar un activo global, en un activo global desde el punto de vista de los ingresos¡±.
Ser¨¢ un negocio para todos. Especialmente para Cristiano, se?ala Bellinazzo. Italia aprob¨® hace un a?o una nueva norma fiscal en la que todo aquel que traslade su residencia y tenga ingresos en el extranjero (inmobiliarios, hosteleros o patrocinios) solo deber¨¢ tributar por un m¨¢ximo de 100.000 euros. Una medida que significa una rebaja fiscal enrome para el portugu¨¦s. ¡°En el caso de Cristiano se habla de unos 60 millones de euros en derechos de imagen y negocios extrafubol¨ªsticos. Una gran diferencia, ya que en lugar de pagar la mitad, deber¨¢ abonar una cifra baj¨ªsima. Y eso dinero, curiosamente, es precisamente el aumento que quer¨ªa en el Real Madrid para llegar al salario de Messi¡±, apunta. El ¨²nico problema que tendr¨¢ ahora, justamente, ser¨¢ la ausencia del jugador que mejor la ha permitido medirse y estimular su competitividad deportiva.
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