Los dolores de cabeza de la tricefalia del Movistar en el Tour
No hay d¨ªa en el que los supuestos celos entre Valverde, Landa y Nairo no se conviertan en tema candente en el pelot¨®n
Se cumplen 200 d¨ªas y algunos m¨¢s de 2018 y no ha habido minuto en el exiguo planeta cicl¨ªstico espa?ol en el que alguien no haya explicado a alguien la imposibilidad de que triunfe el experimento del Movistar, un equipo con tres l¨ªderes. Alejandro Valverde, Mikel Landa y Nairo Quintana est¨¢n tan acostumbrados a las preguntas que, como si fueran ya pol¨ªticos con gabinetes de comunicaci¨®n, tiran de argumentario soso cuando les llegan. Es su ibuprofeno para el dolor de cabeza que les ataca a los de la llamada tricefalia. Lo que no dice mucho ni de su sinceridad comunicativa ni de quienes no se cansan de preguntarles lo mismo.
Despu¨¦s del rato de melancol¨ªa bretona, la brisa y las gaitas celtas, a Valverde le llegan las preguntas inevitables, en esta ocasi¨®n emitidas en italiano. Y el murciano responde como siempre. ¡°Nuestra alineaci¨®n es la de siempre¡±, repite. ¡°Nairo y Landa, delante, y yo valgo para todo. Para estar en la general y para intentar ganar etapas¡±. La pregunta se repite con otro enunciado y ¨¦l, a ¨¦l le van a pillar, responde con la misma idea. ¡°S¨ª, Nairo est¨¢ un poco m¨¢s atr¨¢s en la general por su aver¨ªa del primer d¨ªa, pero eso no cambia nada. Queda mucha monta?a, y con toda la monta?a que queda, Nairo sigue siendo el favorito por delante, y Landa. Y yo tambi¨¦n estoy¡±.
Como detalle para observadores, el director del equipo, Jos¨¦ Luis Arrieta, ha dispuesto las bicis de repuesto en las bacas de los coches de tal manera que quede claro que Nairo es el n¨²mero uno, como tambi¨¦n refleja su dorsal. Su Canyon est¨¢ en la primera fila sobre la puerta trasera derecha, por la que sale el mec¨¢nico y la tiene m¨¢s a mano. La de Landa est¨¢ sobre la puerta del copiloto, y la de Valverde sobre la del conductor.
Pero el truco no convence. Y preocupa a todos que el experimento de competir con tres l¨ªderes en un equipo de ocho no permita un trabajo muy sensato. Muchos recuerdan que mientras a Ur¨¢n, por ejemplo, le esper¨® medio equipo cuando la ca¨ªda de La Baule y no perdi¨® ni un segundo, a Nairo tardaron bastantes minutos en acompa?arle los suyos. ¡°Pero las circunstancias son totalmente diferentes¡±, explica Arrieta. ¡°Con Ur¨¢n se hab¨ªan quedado cortado m¨¢s del equipo. Nairo rompi¨® ¨¦l solo, el que le deb¨ªa dejar su bici se hab¨ªa quedado cortado en una ca¨ªda anterior y los compa?eros, que iban lanzados, no pod¨ªan dar marcha atr¨¢s para socorrerle antes. Y la bici de repuesto lleg¨® cuando pudo llegar en aquel caos¡±.
En el abanico que les dej¨® a Landa y Nairo cortados a 20s siete kil¨®metros, s¨ª que reconoce el equipo que pudo influir el menor n¨²mero de gregarios. Pero todo est¨¢ medido. ¡°Es un riesgo que sab¨ªamos que ¨ªbamos a correr los primeros nueve d¨ªas¡±, dice el jefe del equipo, Eusebio Unzu¨¦, que tampoco se sale de su argumentario. ¡°Pero si lo salvamos y salvamos, sobre todo, la etapa de Roubaix, tendremos la mayor ventaja la segunda parte del Tour¡±.
Y para confirmar que en eso piensan sus tres l¨ªderes, Nairo resumi¨® as¨ª la jornada: ¡°Es dif¨ªcil, pero seguimos librando d¨ªas dif¨ªciles como hoy¡±.
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