Una segunda oportunidad para Semedo
El central portugu¨¦s, cedido por el Villarreal al Huesca, asume que la acogida en el club oscense le abre una posibilidad de rehabilitaci¨®n tras pasar cinco meses en prisi¨®n preventiva
Una luz se enciende de nuevo en el horizonte existencial de Rub¨¦n Semedo, gracias a la gesti¨®n del Villarreal para ceder al defensa portugu¨¦s al Huesca, sensible el club oscense para rehabilitar deportivamente al d¨ªscolo futbolista que ha pasado los ¨²ltimos cinco meses en prisi¨®n preventiva por un turbio asunto de violencia extrema. Para Semedo, la llegada a la entidad aragonesa resulta ¡°una oportunidad de jugar de nuevo en Primera Divisi¨®n¡±, que no piensa dejar escapar agradeciendo la ¡°confianza¡± depositada en ¨¦l. ¡°Todos nos hemos equivocado, y ahora tiene una segunda oportunidad para demostrar que es un jugador de primera l¨ªnea¡±, redund¨® en su presentaci¨®n Emilio Vega, director deportivo del Huesca, que ha pedido comprensi¨®n y respeto para Semedo.
En la vida no siempre resulta sencillo huir del pasado. Karim Benzema no tuvo la posibilidad de ser campe¨®n del mundo con Francia, cerradas las puertas de la selecci¨®n gala por un turbio asunto de chantaje a su compa?ero en el combinado bleu, Mathieu Valbuena, en la que se vio involucrado el delantero del Madrid por las amistades peligrosas que arrastra el franc¨¦s desde su infancia. Lealtad barrial que ha afectado a Benzema en su carrera deportiva. En el mundo del f¨²tbol existen muchos ejemplos de camaradas r¨¦mora que viven a costa del ¨¦xito del deportista, un s¨¦quito de acompa?antes gorrones y animadores festivos.
Cinco a?os atr¨¢s, el Sporting de Portugal, entendi¨® que por su bien, Rub¨¦n Semedo deb¨ªa alejarse de Lisboa y de su entorno nocivo. Y lo env¨ªo a Espa?a cedido al Reus, por aquel entonces en Segunda B. ¡°Era importante alejarme del ambiente en el que estaba y las malas influencias. Me encontr¨¦ una ciudad tranquila en la que me trataron bien¡±, reconoci¨® Semedo en su d¨ªa. La experiencia en la entidad tarraconense result¨® positiva, m¨¢s en el aspecto vital que en lo deportivo. Semedo regres¨® m¨¢s tranquilo y maduro al Sporting de Portugal, fue nuevamente cedido al Vitoria de Set¨²bal para retornar una temporada despu¨¦s a su club de origen y asentarse como titular y alcanzar la internacionalidad sub-21 con la selecci¨®n lusa. El salto al Villarreal, previo pago de 15 millones de euros al club lisboeta, conced¨ªan aspiraciones a Semedo para entrar en la lista de la selecci¨®n absoluta portuguesa en el Mundial de Rusia. Depend¨ªa de ¨¦l y de su esperado alto rendimiento en el club de Roig como vaticinaban desde Portugal. Semedo vio el Mundial desde la prisi¨®n valenciana de Picassent.
Las condiciones atl¨¦ticas y t¨¦cnicas le dieron a Semedo la ocasi¨®n para salir de la miseria, de dejar atr¨¢s una infancia dif¨ªcil, marcada a los cinco a?os de edad cuando su padre ingres¨® en prisi¨®n, siendo criado por su madre que tuvo que llevar el peso de la familia, educando a un hijo rebelde y a su hermana en el humilde distrito lisboeta de Amadora. En edad infantil tuvo que renunciar al f¨²tbol durante tres a?os porque en casa apenas llegaba el dinero para mantenerse. Semedo se form¨® en la calle.
El f¨²tbol y el Villarreal alejaban de nuevo a Semedo del ambiente marginal de su ni?ez y adolescencia en Lisboa. A su llegada al club amarillo, el defensa de origen caboverdiano cometi¨® el error de instalarse lejos de la tranquila Vila-real o Castell¨®n, de la pl¨¢cida Benic¨¤ssim. Semedo se domicili¨® en una urbanizaci¨®n de lujo pr¨®xima a Valencia, una ciudad abierta, cosmopolita, con gran oferta cultural y ocio nocturno. Y con Semedo viaj¨® una parte de Amadora, un s¨¦quito de oportunistas sin nada que perder que arrastraron al defensa del Villarreal a la vida cr¨¢pula incompatible con la profesi¨®n de futbolista. En el s¨®tano de su chalet instal¨® una discoteca y eran sonadas las fiestas nocturnas de Semedo y sus ac¨®litos.
Por las ma?anas, el defensor portugu¨¦s, se sub¨ªa a su veh¨ªculo de alta gama y recorr¨ªa los 60 kil¨®metros que le separaban de la ciudad deportiva del Villarreal, entrenaba como buenamente pod¨ªa, o se recuperaba de sus reiteradas dolencias musculares, terminaba sus obligaciones contractuales y a mediod¨ªa regresaba a su residencia donde sus vividores amigos le preparaban el plan festivo de la noche que en ocasiones se alargaba hasta la madrugada. En m¨¢s de una ocasi¨®n el jolgorio terminaba con peleas y amenazas. La ¨²ltima trifulca, con estafas y deudas de por medio, llev¨® a prisi¨®n a Semedo acusado de los delitos de homicidio en grado de tentativa, lesiones, detenci¨®n ilegal, amenazas, tenencia il¨ªcita de armas y robo con intimidaci¨®n. Sus amigos desaparecieron del mapa huyendo de la justicia y dejando el marr¨®n al pagano de Semedo al que el Huesca le da una oportunidad de redimirse y volver a ser futbolista.
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