Los espa?oles del 800m muestran su jerarqu¨ªa en las series

Los agon¨ªas hablan de Pierre-Ambroise Bosse, el campe¨®n del mundo y su nombre largo, que parece sacado de las Relaciones peligrosas y dice pensar una t¨¢ctica para ganar un 800m es como sentarse a pensar c¨®mo seducir a una chica, pero los atletas, que huyen de los agobios, prefieren disfrutar con el recuerdo de sus series. Son los 800m, la prueba de medio fondo en la que los espa?oles se sienten m¨¢s fuerte. Participan tres, Sa¨²l Ord¨®?ez, ?lvaro de Arriba y Daniel And¨²jar, por orden de entrada en escena, y los tres se clasificaron para las semifinales (hoy, a partir de las 19.32). Son los cracks del 94, nacidos hace 24 a?os en abril, mayo y junio.

Alguno, incluso, luce jerarqu¨ªa, como Ord¨®?ez, que estrena su nueva condici¨®n de figura p¨²blica dominando, casi pastoreando, una jaur¨ªa. Unos investigadores en zoolog¨ªa de Cornell, justo la universidad de Bruno Hortelano, han descubierto que cuanto m¨¢s peque?o es un perro m¨¢s alza la pata para orinar m¨¢s alto en esquinas, ¨¢rboles y farolas. Tratan de enga?ar a los otros perros del barrio marcando su territorio con su aroma elevado, y a Ord¨®?ez le acogotan hasta los ¨²ltimos metros. ¡°Jop¨¦, no me han dejado respirar ni un metro¡±, dice el berciano de Salentinos muchos minutos despu¨¦s de ganar su serie (1m 47,95s) con una bolsa de emergencias de avi¨®n en la mano, donativo de una voluntaria que se ha asustado vi¨¦ndole tan mareado, como siempre acaba sus 800m, al plusmarquista nacional (1m 43,65s), mejormarquista europeo del a?o y medallista de bronce en el Mundial de pista cubierta, que todo eso es. ¡°No he podido aflojar nada, siempre que miraba ve¨ªa a cinco rode¨¢ndome y peg¨¢ndose entre ellos¡±. Al pupilo de Uriel Reguero y sus sienes bien rapadas, aerodin¨¢mica cabeza que brilla al mediod¨ªa al reflejarse en ella el sol blanco de Berl¨ªn, la notoriedad adquirida le gusta, y explicar a los dem¨¢s que nos le enga?an con sus trucos para hacerse pasar por m¨¢s altos. ¡°Pierdo la ventaja de ir de tapado, como antes¡±, dice Ord¨®?ez, aries. ¡°Pero adquiero un plus de motivaci¨®n¡±.

La segunda es una serie veloc¨ªsima y ?lvaro de Arriba, g¨¦minis, se aparta a un lado en el momento de la pelea. No quiere saber nada de un tropez¨®n o un codazo que le arruinen. ¡°Ya me hab¨ªa avisado Sa¨²l, que la gente estaba muy nerviosa. Y era verdad. C¨®mo estaban para lo pronto que es por la ma?ana y el calor que hace¡±, dice el salmantino, campe¨®n de Espa?a, que termina segundo (1m 46,48s) despu¨¦s de correr los ¨²ltimos 200m por la calle tres, bien lejos de la reyerta. ¡°Menos mal que estoy muy bien¡±.

Conocedor de lo que hac¨ªa falta para pasar por tiempos, bajar de 1m 46s, el alicantino Daniel And¨²jar, tauro, acelera y ataca largo, a falta de 250 metros, hasta donde llegue. La decisi¨®n t¨¢ctica logra su objetivo con precisi¨®n milim¨¦trica. Termina cuarto (1m 46,99s) y pasa por tiempos. ¡°Cada carrera es un mundo¡±, proclama cuando se le pregunta por las semifinales. Pasar¨¢n tres por puestos de cada una de las series y dos por tiempos. Y tampoco es el momento de hablar de Bosse o del polaco Kszczot, campe¨®n de Europa, o de otros rivales. Hasta el s¨¢bado, cuando la final, no toca. ¡°Lo que hemos visto en series no tiene nada que ver con lo que veamos despu¨¦s¡±, explica De Arriba.

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