El Manchester United sobrevive a su estreno

Nunca se sabr¨¢ como hubiese evolucionado el partido si el Manchester United no se hubiese visto en ventaja al segundo minuto de haber comenzado la Premier. Ocurri¨® as¨ª. Marc¨®, especul¨® y, al final, sentenci¨® al Leicester, que descont¨® muy al final, sin tiempo para fabricar siquiera una opci¨®n de empate (2-1). Un sector de la grada, minoritario pero ruidoso, core¨® durante diversas fases del partido a Jose Mourinho. Bien est¨¢ lo que bien acaba, pero por ahora para el Manchester apenas termin¨® la primera jornada. Deber¨¢ jugar a otra cosa si quiere estar en la clasificaci¨®n a la altura no ya de su linaje sino tambi¨¦n de su chequera.

El t¨¦cnico luso celebr¨® con ¨¦nfasis los goles que le dieron el triunfo. El que lo abri¨® lleg¨® de penalti tras controlar el lateral visitante Amartey el bal¨®n con el brazo. Los veinte equipos de la Premier decidieron la pasada primavera no incorporar esta temporada el videoarbitraje, as¨ª que vali¨® lo que vio el ¨¢rbitro, que no pareci¨® que se equivocase. Marc¨® Pogba y sin f¨ªsico ni f¨²tbol el United se afan¨® a partir de entonces en sobrevivir. En esa l¨ªnea ya se hab¨ªa manifestado Mourinho, que ya avis¨® de que su equipo deber¨¢ comenzar la temporada como un di¨¦sel visto que bastantes de sus futbolistas estuvieron enfrascados en el Mundial casi hasta antes de ayer.

Pogba se aline¨® de inicio con apenas cuatro entrenamientos en las piernas; Rashford no mostr¨® su chispa habitual, como lastrado por el reinicio. Lukaku se qued¨® en el banquillo y Lingard en la grada. Para colmo Valencia, Dalot, Rojo, Matic y Herrera estaban de baja por lesi¨®n. Tuvo que repentizar el equipo de Mourinho, que sorpendi¨® al acoplar a Andreas Pereira, un extremo, como mediocentro. No lo tuvo f¨¢cil en ese sentido el United. Lo pas¨® mal en la primera parte porque no solo se vio dominado, que quiz¨¢s eso tampoco le importuna mucho, sino que fue incapaz de salir a la contra. Y eso ya es un problema. Se enmend¨® tras el descanso y ah¨ª empez¨® a palidecer el Leicester.

Apenas hay rescoldos del equipo que gan¨® la Premier hace poco m¨¢s de dos a?os. En el once que abri¨® este campeonato solo Schemichel y Morgan repitieron respecto a aquella alineaci¨®n base con la que hizo historia Claudio Ranieri. Vardy, tocado, esper¨® turno en el banquillo hasta apenas sobrepasada la hora de partido. Eran los minutos en los que menos brillaba su equipo, que se mostr¨® con fulgor durante bastantes tramos de la primera parte. Y con bal¨®n. Fue m¨¢s aparente que efectivo el Leicester, que sabe bien que sus caminos a la victoria no van por esa ruta. Debi¨® empatar, tuvo su momento, como cuando al filo de la media hora de juego Maddison exigi¨® a De Gea a mostrar sus credenciales, las que suele llevar siempre consigo, no las que mostr¨® en Rusia.

James Maddison abanderaba a ese Leicester jug¨®n que a base de pases encerr¨® a los due?os de Old Trafford en su ¨¢rea y les oblig¨® a sufrir, a padecer para achicar a bal¨®n parado y tambi¨¦n en el juego. A Maddison se lo rif¨® media Premier este verano. Forjado en el vivero del languideciente Coventry se mostr¨® la temporada pasada en el Norwich como un mediapunta fuerte, talentoso y con gol. Como tiene un aire guaperas alg¨²n tabloide ya le ha comparado con Beckham. Es un futbolista a seguir, pero su entrenador le retir¨® del campo para darle carrete a Vardy. Tampoco sabremos nunca que hubiese ocurrido si los junta.

Esa renuncia retrat¨® al Leicester, que hab¨ªa perdido el sitio que hab¨ªa ganado en el partido. Tom¨® otro, el de la insistencia, la rudeza y la agresividad en las disputas. Colg¨® la seda en el perchero y tom¨® su atav¨ªo m¨¢s habitual, se abri¨® tambi¨¦n, agotado como estaba en los albores de la temporada para regresar a casa tras perder la pelota. Pudo marcarle el Manchester si Schmeichel no responde con el pie ante un remate de Lukaku cuando estaban cara a cara sin intermediarios. Pero el gol lleg¨® casi de inmediato, a ocho minutos del final, y lo logr¨® Luke Shaw, lateral criticado durante las ¨²ltimas semanas por su f¨ªsico, que semeja pasado de kilos. Ni entonces pudo relajarse el United porque el Leicester insisti¨®. Anot¨® Vardy en la prolongaci¨®n con tres minutos por jugar, pero ya apenas hubo tiempo para un intento a la desesperada de los visitantes en un c¨®rner postrero que remat¨® desviado su portero.