Viudos en San Mam¨¦s de la diana de Cristiano Ronaldo
La carga ambiental en el estadio fue distinta sin la estrella portuguesa
Pedro Ferr¨¢ndiz acostumbraba a saltar a la cancha del Magari?os un par de minutos antes que su equipo, para que la Demencia se desga?itara contra ¨¦l y los decibelios descendieran, por mera cuesti¨®n f¨ªsica, a la salida de sus jugadores. Ese mismo efecto, aunque sin pretenderlo, consegu¨ªa Cristiano Ronaldo en San Mam¨¦s, que de un plumazo ha perdido la referencia cuando est¨¢ el Real Madrid enfrente. Viudos de Ronaldo.
La ausencia de Cristiano se siente en la grada de San Mam¨¦s como la del pariente querido que fallece. A veces da la sensaci¨®n de que sigue all¨ª, pero no. La afici¨®n le busca para convertirlo en blanco de las frustraciones o de la ira, pero no lo encuentra. Y no hay otro jugador vestido de blanco que se pueda comparar. ?Benzema? No. Ser¨¢ silbado si la tribuna lo considera necesario, pero el franc¨¦s no despierta odios irracionales. ?Sergio Ramos? Es un jugador duro, implacable, y cuando pega una patada recibe la correspondiente desaprobaci¨®n m¨¢s o menos sonora, pero nadie encuentra mayor problema a la presencia en el campo de un futbolista de sus caracter¨ªsticas. Recibi¨® silbidos a veces, pero sin demasiada convicci¨®n.
As¨ª que sin esa referencia del portugu¨¦s, a la gente no le qued¨® otra cosa que observar el marcaje individual que propuso el Athletic, o la presi¨®n a Toni Kroos en la primera parte, y comentar las novedades rojiblancas, que pasaron por dar la manija a un Be?at que parec¨ªa sentenciado desde la pretemporada. Unai L¨®pez, la apuesta inicial de Berizzo, se qued¨® en la grada, y el futbolista redimido respondi¨®. El Athletic movi¨® el bal¨®n con criterio, sin m¨¢s pelotazos que los necesarios para buscar la rapidez de Williams. ¡°Tengo que ser justo, y lo mismo que dije de Unai en su d¨ªa, digo ahora de Be?at. Me alegro hoy por ¨¦l, que sabe que hay que estar siempre con la guardia alta¡±, considera Eduardo Berizzo.
Regres¨® I?igo Mart¨ªnez tras su lesi¨®n, y Aduriz calent¨® banquillo, no jug¨® ni un minuto. El t¨¦cnico argentino prefiri¨® el dinamismo de Williams en el centro de la delantera. Le buscaron con insistencia sus compa?eros con balones largos; se asoci¨® con Susaeta y las llegadas para romper de De Marcos. As¨ª lleg¨® el gol rojiblanco, cuando el lateral derecho sorprendi¨® a la defensa del Real Madrid por detr¨¢s y toc¨® el bal¨®n para que Williams primero, y Muniain despu¨¦s, lo enfilaran hacia la porter¨ªa.
Funcion¨® el plan de Berizzo hasta el descanso y m¨¢s all¨¢. El par¨®n prolongado ¨Cincluido el partido suspendido ante el Rayo¨C, le ha servido para engrasar piezas que funcionaron durante muchos minutos. El Athletic p¨¢lido de los primeros partidos, a medio cocer, pareci¨® m¨¢s cocinado en un choque de m¨¢xima exigencia. No suele ser suficiente muchas veces, pero le alcanz¨® para un empate, una buena noticia para San Mam¨¦s. ¡±Nos deja la sensaci¨®n de haber jugado el partido que imaginamos¡±, apunta Berizzo. ¡°En la segunda parte, por la jerarqu¨ªa de nuestro rival no pudimos presionar como en la primera, pero la actitud de los jugadores tras el empate, sostuvo al equipo¡±, afirma el t¨¦cnico. ¡°Hoy nos asemejamos mucho al equipo que yo imagino. Si pudimos jugar as¨ª hoy, debemos hacerlo siempre¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.