El Krasnodar corta la racha de victorias de un Sevilla gris

El Sevilla vio ayer interrumpida ante el Krasnodar su racha de cinco victorias consecutivas, al remontar el conjunto ruso el gol inicial de Nolito. No fue un partido f¨¢cil. El t¨¦cnico sevillista, Pablo Mach¨ªn, dio a sus hombres la orden de esperar al equipo ruso en campo propio. El Krasnodar, que ven¨ªa tambi¨¦n de ganar sus ¨²ltimos seis partidos y puede coliderar la liga rusa si este fin de semana derrota al Zenit, agradeci¨® el respiro haciendo con el Sevilla lo que el Sevilla suele hacer con sus rivales: se estir¨® y apret¨® la salida de bal¨®n.

El resultado fue que durante la primera parte los hispalenses no fueron capaces de hacer circular la pelota, con ?ver Banega perdido entre los centrocampistas rusos. El Krasnodar goz¨® ya de un par de largueros. El primero, en un remate de cabeza de Mamaev a la salida de un c¨®rner; y el segundo, tras una buena jugada que acab¨® con Kabor¨¦ disparando a colocar con el interior desde la frontal del ¨¢rea. Fueron dos avisos.

El Sevilla convirti¨® la ¨²nica ocasi¨®n clara que tuvo. Un c¨®rner botado al filo del descanso por Banega encontr¨® a Nolito solo en el punto de penalti gracias al sistema de pantallas dispuesto por Mach¨ªn. El bal¨®n entr¨® tras tocar en el pie de Mamaev y los rusos, que hab¨ªan jugado de t¨² a t¨² al Sevilla, se fueron al descanso perdiendo sin saber muy bien por qu¨¦.

El arranque del segundo periodo se pareci¨® mucho al del primero. Mach¨ªn, que si no es una versi¨®n actualizada de Joaqu¨ªn Caparr¨®s, se le parece bastante, sigui¨® dando la iniciativa al Krasnodar, que tuvo otras dos: Claesson mand¨® fuera una volea a bocajarro y un mano a mano con el portero. Dio la impresi¨®n de no creerse lo solo que estaba ante el Vaclik.

Musayev, el t¨¦cnico ruso, lejos de resignarse, redobl¨® la apuesta: retir¨® el m¨²sculo de Kabor¨¦ para dar entrada al menudo Mauricio Pereyra. Su valent¨ªa tuvo premio: el Krasnodar gan¨® m¨¢s fluidez en campo sevilista y empat¨® el partido con un tanto del propio Pereyra. El gol fue una se?al que indicaba lo que le faltaba al partido.

Mach¨ªn as¨ª lo entendi¨® al dar entrada a Franco V¨¢zquez, que se asoci¨® con Banega y Roque Mesa, dos islas hasta entonces, para dar al Sevilla m¨¢s fases de dominio en las cercan¨ªas del ¨¢rea rusa. Pero el Krasnodar encontr¨® el segundo igual que el Sevilla hall¨® el primero: a bal¨®n parado, casi al final, sin saber muy bien c¨®mo. El rechace de Vaclik a un misil de Ram¨ªrez termin¨® en las inmediaciones de Okriashvili, que resolvi¨® con una chilena e hizo uno de los goles de la jornada.

A¨²n qued¨® tiempo para una ocasi¨®n m¨¢s, pero Ben Yedder la mand¨® fuera. El Sevilla, que de ganar hubiese logrado su victoria n¨²mero 100 en Europa, busc¨® la iniciativa demasiado tarde, y ese registro tendr¨¢ que esperar.