El Betis se acostumbra a ganar
Un penalti tras la consulta con el VAR y un golazo de Sidnei acaban con un combativo Rayo
El Betis se est¨¢ acostumbrando a ganar. Esta vez no fue necesaria su mejor versi¨®n. Los de Seti¨¦n no se ayudaron de una gran actuaci¨®n colectiva para sumar su cuarto triunfo consecutivo en el Benito Villamar¨ªn (dos en Liga, uno en Copa y otro en la Liga Europa) ante un combativo Rayo. Sin embargo, cada vez m¨¢s elementos se suman al buen momento b¨¦tico. El f¨²tbol de William Carvalho, las paradas de Pau y la irrupci¨®n goleadora de Sidnei son el mejor ejemplo de esta nueva dimensi¨®n andaluza, que le ha permitido escalar hasta la zona noble de LaLiga, llegando a los 22 puntos. El Rayo fue muy intenso hasta que se desfond¨®. Incluso goz¨® de alguna ocasi¨®n bien resuelta por Pau. Sin embargo, un absurdo penalti de Amat sobre Loren, despu¨¦s de una consulta con el VAR del colegiado Mart¨ªnez Munuera, lo conden¨®. Lo Celso anot¨® y el partido se le escap¨® a los madrile?os, incapaces de reaccionar desde el momento en el que el Betis se puso por delante. Entonces, con espacios, los de Seti¨¦n lo hicieron muy f¨¢cil.
El Rayo, en definitiva, no jug¨® mal, pero ni con esa versi¨®n tan aceptable puede optar a ganarle a un Betis con mucho m¨¢s recursos. Sin caer en la excelencia, los verdiblancos amarraron un triunfo importante, con un golazo de Sidnei para el recuerdo. La conducci¨®n del central fue imponente, as¨ª como su regate en el ¨¢rea a G¨¢lvez y la definici¨®n. Sidnei es un defensa perfecto para la forma de jugar de Seti¨¦n. Saca bien el bal¨®n y es muy r¨¢pido. Ideal para este Betis al alza.
El Rayo jug¨® ante el Betis 30 minutos llenos de intensidad. El conjunto madrile?o no solo presion¨® con inteligencia a su rival, sino que tambi¨¦n le sac¨® un fruto perfecto a su planteamiento, con jugadores r¨¢pidos en busca de la carrera para sorprender a un Betis al que le costaba un mundo hilvanar el juego. La mejor demostraci¨®n de lo que quer¨ªa M¨ªchel lleg¨® en el minuto 24. Trejo tapon¨® a Lo Celso en la salida de bal¨®n del Betis y le meti¨® el bal¨®n r¨¢pido al espacio a ese rayo que es el ex cadista ?lvaro Garc¨ªa. Pau, en su l¨ªnea, hizo un parad¨®n para salvar a su equipo. La jugada fue lo ¨²nico destacable de un partido que hasta ese momento hab¨ªa sido jugado de forma muy lenta por el Betis, al que no le sienta bien jugar con dos delanteros, y de manera inteligente por el Rayo.
Ocurri¨®, sin embargo, que el gran ejercicio de solidaridad llevado a cabo por los jugadores del Rayo acabar¨ªa pasando factura. Poco a poco, a medida que Canales y Lo Celso se fueron entonando, el Betis le meti¨® velocidad y profundidad a su juego. El partido para los andaluces estaba en las bandas, las zonas menos desprotegidas en el planteamiento del Rayo, que acumul¨® muchos jugadores por dentro. Los ¨²ltimos 10 minutos del Betis en la primera mitad fueron excelentes. Lo Celso y Canales combinaron bien en banda con Junior y Barrag¨¢n, con lo que se gener¨® superioridad para que el Rayos se sintiera agobiado. Fue a bal¨®n parado como el Betis goz¨® de sus mejores ocasiones. La primera de Sidnei, cuyo remate tras la falta sacada por Canales no entr¨® de milagro. La segunda, menos clara, fue tambi¨¦n de cabeza y en esta ocasi¨®n para William Carvalho a la salida de un saque de esquina.
El Rayo todav¨ªa tuvo una ocasi¨®n de Embarba antes de que su castillo fuera asaltado. Una ingenuidad de Amat en el despeje, golpeando a Loren, lo conden¨®. Mart¨ªnez Munuera consult¨® el VAR y vio el golpeo del defensa al delantero. Penalti que Lo Celso ejecut¨® a la perfecci¨®n para acabar con el partido. El Rayo perdi¨® toda su energ¨ªa, superado por un rival que encaden¨® sus mejores minutos. El escenario perfecto para que futbolistas como Sidnei rompieran con el guion establecido. El zaguero anot¨® un golazo y el Betis asent¨® su buen triunfo. Ni m¨¢s menos que el cuarto consecutivo, que dispara las aspiraciones de los verdiblancos. El Rayo no pudo lograr su segunda victoria consecutiva. Le queda un mundo por delante en su pelea por escapar del descenso.
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