El Real Madrid derrite al Panathinaikos
Los de Laso rinden al cuadro griego con un parcial de 16-2 en los primeros cinco minutos y otro de 26-10 en los nueve ¨²ltimos. Langford y Calathes no pueden contener a siete jugadores madridistas en dobles d¨ªgitos de valoraci¨®n
El Real Madrid derriti¨® al Panathinaikos en un partido ciclot¨ªmico y se apunt¨® con contundencia su 11? victoria en 13 jornadas de la Euroliga. Con un parcial de 16-2 en los primeros cinco minutos y otro de 26-10 en los nueve ¨²ltimos, los de Laso rindieron a un rival inconstante sostenido a tramos por las r¨¢fagas de Langford y Calathes (20 y 17 puntos respectivamente). Pero la rueda madridista sum¨® m¨¢s efectivos (con siete jugadores en dobles d¨ªgitos de valoraci¨®n) y el abrumador dominio de Ay¨®n, Tavares y Thompkins en la pintura sentenci¨® la contienda. Los blancos perdieron el segundo y tercer cuarto, pero golpearon con fuerza en el primero y el ¨²ltimo. La estad¨ªstica de rebotes (44-24) y asistencias (22-8) fue igual de contundente que el marcador final (89-68).
Se med¨ªa el Madrid a un rival emblem¨¢tico en su trayectoria reciente, el que marc¨® el punto de inflexi¨®n hacia la conquista de la D¨¦cima en Belgrado. La derrota por incomparecencia de los blancos en el primer partido de la eliminatoria de cuartos de la temporada pasada ante el Panathinaikos en el OAKA (95-67), el 17 de abril, fue el acicate definitivo hacia la gloria. ¡°Gracias a aquel partido ganamos la Euroliga¡±, reconoci¨® Rudy hace unos d¨ªas. ¡°Sacamos la garra de los momentos dif¨ªciles y con el impulso de remontar esa eliminatoria logramos el t¨ªtulo¡±, cont¨® el alero internacional. Desde aquella tunda en Atenas y hasta la primera derrota de este curso ante el Andorra en la Liga Endesa a primeros de noviembre, los de Laso solo cayeron una vez ante el Baskonia en la final liguera y ganaron tres t¨ªtulos. Sin el mismo valor estrat¨¦gico, otra victoria ante los griegos reforz¨® la candidatura madridista en la presente Euroliga para seguir la estela del Fenerbah?e de Obradovic, ante el que se miden la semana que viene en Estambul.
Llegaban los de Laso con ganas de corregir el horripilante encuentro liguero ante el Breog¨¢n del pasado domingo y entraron en el partido con la intensidad de los d¨ªas grandes. Con Deck y Ay¨®n reforzando el prop¨®sito de enmienda (ocupando las plazas de Taylor y Tavares en el habitual quinteto inicial) y una sobresaliente voracidad defensiva, el campe¨®n ense?¨® los colmillos con un parcial de 16-2 en poco m¨¢s de cinco minutos. A pesar de que Pascual llam¨® a los suyos a cap¨ªtulo para repasar el plan en mitad del chaparr¨®n, Causeur se salt¨® todos los radares de la defensa verde (con ocho puntos en ese tramo) y Ay¨®n camp¨® a sus anchas en la pintura (con cinco rebotes y cuatro puntos m¨¢s) para abrumar al Panathinaikos con una contundente puesta en escena. Apenas Lojeski puso sangre a un conjunto hipotenso, con cuatro jugadores en negativo al t¨¦rmino de los primeros 10 minutos (23-10, m. 10).
Al final de ese primer cuarto, la contabilidad reboteadora, la estad¨ªstica del hambre, reflejaba un elocuente 15-6 que fue creciendo con el paso de los minutos y con la aparici¨®n de Tavares y Thompkins. Para entonces, el Panathinaikos caminaba grogui por el Palacio y anotaba a menos de un punto por minuto, circunstancia que aprovech¨® el Madrid para coger carrerilla y descoser el marcador (32-12, m. 13). Todos los p¨ªvots del conjunto griego perd¨ªan el baile ante Tavares y el 0 de 6 en triples era un lastre para los verdes, que no encontraban soluciones para el rearme ni por dentro ni por fuera.
Sin embargo, Pappas y Langford rompieron la sequ¨ªa desde el 6,75 con tres aciertos casi consecutivos, el ambiente se crisp¨® con varias decisiones arbitrales que alteraron a la parroquia madridista y una doble t¨¦cnica a Papagiannis y Ay¨®n, y, en un santiam¨¦n, la renta local qued¨® reducida a casi la mitad (40-29, m. 19). Con m¨¢s esp¨ªritu canchero que juego, los griegos armaron un parcial de 5-13 en los seis minutos anteriores al descanso con 10 puntazos de Langford (12 en total en los ocho minutos que disput¨® del segundo cuarto). El arrebato del escolta estadounidense evit¨® el desenlace anticipado de la contienda y transform¨® la diferencia de desmoralizante a abarcable para los verdes (43-31, m. 20). Pero el Madrid conoc¨ªa el camino y lo retom¨® con la fugaz incorporaci¨®n a la causa de Llull y Randoph.
Con sendos triples del base y el p¨ªvot, y otra r¨¢faga de seis puntos de Causeur, los blancos volvieron a llenar la hucha (57-39, m. 24), mientras Deck se encargaba de ponerle los grilletes a Langford. Pero el plan madridista languideci¨® de nuevo. La influencia de Calathes creci¨® ante un fatigado Llull, Papagiannis gan¨® puntos en la pintura y Langford retom¨® la faena. El Panathinaikos, que nunca hab¨ªa llegado a aparecer ni a irse del todo, estaba all¨ª (59-53, m. 29). Los verdes se volvieron a apuntar el cuarto (20-24), sin embargo, ante la desesperaci¨®n de Pascual, dos canastas forzad¨ªsimas de Llull y Campazzo aliviaron la contabilidad madridista en plena embestida griega (63-55, m. 30).
La recta de meta se inici¨® con los primeros puntos de Carroll, con un triple y una antideportiva de Calathes y con Campazzo y Ay¨®n consolidando la mejor conexi¨®n del Madrid en el partido. El base argentino cambi¨® la marcha al partido y el p¨ªvot mexicano sigui¨® sacando lustre a su hoja de servicios mientras Calathes se echaba a su equipo a las espaldas. El tim¨®n griego, que al descanso sumaba 6 puntos y una asistencia, multiplic¨® por tres sus prestaciones, pero los buenos minutos de la pareja Thompkins-Tavares y la suma de Rudy sellaron la escapada definitiva del Madrid hacia el triunfo. La sacudida de los blancos alcanz¨® un parcial de 23-3 entre el minuto 31 y el 38, del 63-58 al 86-61. Suficiente demostraci¨®n de fuerza como para agarrar la 11? victoria en 13 jornada de Euroliga, cuatro m¨¢s que el curso anterior a estas alturas.
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