Carles Duran: ¡°Lo de Ricky y Rudy se acab¨®, pero volvemos a ilusionar¡±
El entrenador explica la transformaci¨®n del Joventut, un equipo que hace un a?o estaba a un paso del descenso y la desaparici¨®n y en el que no se cobraba
El Joventut ha pasado de la doble condena existencial de hace un a?o, abocado al descenso y a su disoluci¨®n, al ¨¦xito deportivo con su presencia en la Copa y a la viabilidad econ¨®mica gracias a un acuerdo con el Ayuntamiento y a un accionista principal. Carles Duran (Barcelona, 43 a?os), un entrenador forjado en su cantera, ha impulsado el giro del equipo al que, tras su paso por el Valencia y el Bilbao, regres¨® cuando ni siquiera cobraban sus jugadores y sus empleados. Este viernes, se mide al Baskonia (19.00, #Vamos).
Pregunta. Empez¨® muy joven. ?C¨®mo surgi¨® su afici¨®n a entrenar?
Respuesta. Por dos caminos diferentes. Mi madre es entrenadora de gimnasia r¨ªtmica. He vivido el deporte en casa desde que nac¨ª. Aprend¨ª mucho de ella. Siempre ha llevado el trabajo a casa. Y desde peque?o la segu¨ªa e iba a ver campeonatos. La r¨ªtmica es un deporte totalmente diferente, muy perfeccionista. Supongo que algo se me ha quedado. Pero mi deporte desde ni?o ha sido el baloncesto. Jugaba en el Vilassar de Mar, el club de la ciudad donde nac¨ª. Una persona vio que ten¨ªa vocaci¨®n y ya desde los 15 a?os empec¨¦ a formar parte de un equipo t¨¦cnico. Con 19 a?os, a ra¨ªz de una lesi¨®n en un dedo, me dieron m¨¢s protagonismo y decid¨ª dejar de jugar y me dediqu¨¦ a entrenar.
P. Prosper¨® y se form¨® en la cantera del Joventut y el Prat. Tras su paso por el Valencia y el Bilbao, la pasada temporada, estaba en el paro. ?D¨®nde se encontraba cuando le llam¨® el Joventut justo ahora hace un a?o para ofrecerle el puesto?
R. En Berl¨ªn, en casa de A¨ªto. Fui all¨ª para seguir form¨¢ndome y crecer como entrenador, viendo c¨®mo trabajaba el Alba Berl¨ªn. Me llamaron para preguntarme d¨®nde estaba, qu¨¦ hac¨ªa y si estar¨ªa dispuesto a escuchar una oferta.
P. La situaci¨®n del Joventut era desesperada. ?Por qu¨¦ acept¨®?
R. En lo deportivo hab¨ªan tenido mala suerte. Me encontr¨¦ con un equipo muy bien trabajado y, en lo que se refiere al baloncesto, ten¨ªa una idea muy clara. Luego, supe muchas m¨¢s cosas del tema institucional. Los jugadores no estaban cobrando y eso se sufr¨ªa. Era un gran reto. Me hac¨ªa s¨²per ilusi¨®n poder devolverle algo a un club que me lo ha dado casi todo.
P. ?Cobr¨® durante los primeros meses?
R. No, como todos los dem¨¢s. Pero no era lo m¨¢s importante. Lo m¨¢s importante era poder entrenar poder volver a sentirme entrenador y ayudar a un club que me lo hab¨ªa dado todo.
P. Corr¨ªa el riesgo de trabajar por nada.
R. Me aseguraron que la situaci¨®n se solucionar¨ªa, como as¨ª ha sido. En este aspecto Juanan (Morales, presidente del club) ha cumplido lo que me dijo. Conmigo, el Joventut se porta de diez.
P. ?C¨®mo se puede exigir a jugadores que no cobran?
R. Es verdad que son profesionales y juegan para ganar dinero, como todo el mundo en su trabajo. Pero tambi¨¦n practicamos un deporte que debe ser nuestro hobby. Les transmit¨ª que lo que no podemos controlar no est¨¢ en nuestras manos, lo que s¨ª est¨¢ en nuestras manos es entrenar, jugar, pas¨¢rnoslos bien e intentar ganar, que es lo que necesit¨¢bamos. Que nadie pudiera decir que no lo hab¨ªamos intentado o querido.
P. Ganar y, adem¨¢s, jugar bien.
R. Al principio no fue f¨¢cil, y no ganamos. Es verdad que soy un poco tozudo. Les doy un diez a todos porque creyeron en m¨ª. Y al final, cuando conseguimos la primera victoria, fue una rueda. La clave fue jugar bien al baloncesto. Impuse mi estilo, mi manera de ser. Para m¨ª la esencia es jugar bien. Si hace bien las cosas, al final acabas ganando o pasan cosas positivas. Es lo que nos pas¨®.
Ni yo ni nadie cobr¨® en los primeros meses, pero el Joventut me hab¨ªa dado mucho y quer¨ªa devolv¨¦rselo
P. C¨®mo convenci¨® a los jugadores?
R. Somos un club que tiene una historia que es de baloncesto, representamos a una ciudad y a una instituci¨®n y sobre todo somos el modelo para muchos ni?os. Cuando se habla de la Penya, se habla de j¨®venes, de buen baloncesto, de cantera, de un modo de vivir diferente a otros, que no son ni mejores ni peores, pero que tienen estructuras diferentes. He querido transmitir eso que si esto se mor¨ªa, deportivamente hablando, se perd¨ªan muchos ni?os y ni?as, y una manera de ver y hacer baloncesto. Porque al final, todo el mundo habla de la Penya y recuerda jugadores, pero sobre todo recuerda su manera de jugar: agresiva, alegre, divertida. Hay que vivir lo que es este club, saber lo que somos e involucrarse en esta gran familia. El hecho de venir a entrenarte y ver que antes hay ni?os entren¨¢ndose y a los propios ni?os que luego ven c¨®mo te entrenas¡ Es muy especial. Y muchos de esos ni?os forman ahora parte de este equipo, y siempre ha sido as¨ª. Albert Ventura entr¨® con ocho o nueve a?os y ahora es el capit¨¢n. A Rudy Fern¨¢ndez lo fuimos a buscar con 12 o 13 a?os y triunf¨® aqu¨ª. A Villacampa¡ Y como entrenador igual. Yo he visto aqu¨ª a grandes maestros. El a?o que llegu¨¦ estaba Alfred Julbe, luego Manel Comas, A¨ªto, y otros que ve¨ªa por la tele: Zeljko Obradovic, Lolo Sainz, Pedro Mart¨ªnez¡ Somos un club bastante diferencial y peculiar.
P. Le gusta proponer peque?os retos a sus jugadores.
R. S¨ª. Es una cosa m¨ªa, personal. Primero fue, a ver si ganamos un partido fuera de casa que creo que llev¨¢bamos casi dos a?os sin conseguirlo; un peque?o reto, pero conseguible. Luego, a ver si ganamos dos partidos seguidos, o ganar a un equipo que nos ha ganado en la primera vuelta. No buscaba una cosa que el jugador piense que es muy dif¨ªcil o lejana, no, cosas reales y que nos pueden pasar en tres d¨ªas.
P. Y retos individuales.
R. Retos peque?os o ilusionantes. Recuerdo que Jerome Jordan (p¨ªvot estadounidense, ahora en el Androrra) era muy importante para nosotros, pero poco a poco hab¨ªa perdido protagonismo. Necesitaba que nos que nos ayudase especialmente en un partido, ante el Zaragoza. Le ped¨ª que cogiera m¨¢s de ocho rebotes. Creo que cogi¨® 11. A veces no consigo todo lo que les planteo, pero creo que me est¨¢ saliendo bien.
P. ?Y ante la Copa?
R. Tambi¨¦n. Claro que s¨ª. Sabemos que si ganamos, seguimos; y si no, para casa. Dentro de eso hay peque?os retos que nos pueden ayudar. No puedo plantear un partido como el de la Copa ante el Baskonia a 40 minutos. Iremos generando peque?as situaciones, que si nos salen, nos generar¨¢n otras. La vida en general son muchos retos, yo hoy, en mi d¨ªa, tengo muchos retos ?no?, y creo que se puede conseguir y por suerte tengo la respuesta positiva.
P. Pero las diferencias parecen cada vez mayores, y en la Copa, cada vez hay menos sorpresas.
Las diferencias son abismales, pero por qu¨¦ no repetir lo de 2008 y ganar al Baskonia
R. Tengo claro que existe una diferencia cada vez m¨¢s abismal, sobre todo entre los equipos de la Euroliga y el Joventut. Podr¨ªamos hablar econ¨®mica, socialmente, en muchos aspectos. Pero la Copa es un partido, 40 minutos. Est¨¢ claro que, ahora mismo, el Baskonia es el favorito. Lo tiene todo, potencial, afici¨®n¡ pero en 40 minutos podemos hacer que cambien las cosas. El baloncesto es un deporte en el que pueden pasar muchas cosas. A veces¡ Recuerdo que form¨¦ parte del equipo cuando jugamos en Vitoria (la Copa en 2008). Y es verdad que la Penya estaba jugando muy bien, pero estaba el Bar?a, el Madrid, el Baskonia. Y llegamos a la final contra el Baskonia, con todo un pabell¨®n mucho m¨¢s cercano al Baskonia. Y lo conseguimos. Por qu¨¦ no repetir. No hablo de ganar el t¨ªtulo, que me queda muy lejos, pero s¨ª de ganar al Baskonia.
P. Le interesa como se trabaja a nivel mental y psicol¨®gico tambi¨¦n en otros deportes. ?Qu¨¦ es lo que le ha impresionado?
R. Dentro de mis experiencias, cuando estuve en Valencia convivimos con Pedro Mart¨ªnez con un psic¨®logo deportivo que ven¨ªa de otros deportes como el motociclismo y el tenis. Me enganch¨¦ mucho. Se llama Octavio (?lvarez). Cuando regres¨¦ aqu¨ª, encontr¨¦ una persona, Jordi Balaguer, que es entrenador, pero me ayuda no tanto en la t¨¦cnica o la t¨¢ctica sino que me da otro punto de vista. Me he fijado en Guardiola, en Valverde, en Rafa Nadal, en entrenadores de waterpolo, de gimnasia. Cada deporte y cada din¨¢mica son diferentes. Y no es lo mismo tener un grupo de seis deportistas que est¨¢n ocho horas trabajando que buscan la perfecci¨®n porque si se les cae la cinta, es un fracaso. Estoy enamorado de este tipo de conexiones y afinidades, y me est¨¢ yendo bien.
P. Utiliza v¨ªdeos, libros, m¨²sica¡
R. Todo se puede aplicar. Hay otros maestros como A¨ªto que les plantea problemas matem¨¢ticos y de Geograf¨ªa a sus jugadores. Insiste en que el jugador debe seguir form¨¢ndose. Me gusta llegar al jugador y que no solo sea todo baloncesto. El v¨ªdeo y la m¨²sica llegan bastante.
P. ?Tiene un l¨ªder la Penya? ?Debe serlo el entrenador?
R. Creo que debe haber diferentes l¨ªderes. Creo que soy uno de ellos. Pero me gusta que tambi¨¦n haya otros, dentro del vestuario, en la cancha, l¨ªderes de trabajo¡ hay muchos tipos de l¨ªder. Es cierto que p¨²blicamente destacan dos o tres jugadores y ha de seguir siendo as¨ª. Me parece bien que todos destaquen a Nico (Laprovittola) o a Marko (Todorovic) porque son destacables. Pero hay otros l¨ªderes que no se ven. Yo siempre hablo de los jugadores de la casa, de Albert Ventura que es el capit¨¢n, o de Josep Nogu¨¦s, que parece que tiene menos protagonismo pero es un jugador clave. Al final esto es un equipo lo que nos est¨¢ pasando es gracias a mucha gente y todos tienen su importancia.
P. ?No siente nostalgia de los llenos en el Ol¨ªmpico de Badalona?
R. Soy de los que estuvo all¨ª disfrutando de la Euroliga, de A¨ªto, de Rudy, de Ricky¡ pero aquello se acab¨®. No puede ser. Pero lo que estamos generando, no digo que sea ni mejor ni peor, pero es diferente, algo que tambi¨¦n est¨¢ bien. El club, en un momento, muy malo ha sobrevivido. Y el equipo a base de mucho trabajo y otra vez de una nueva generaci¨®n de j¨®venes vuelve a ilusionar. Me gustar¨ªa que la gente volviera venir a disfrutar, no pensando lo que hab¨ªamos sido sino en lo que podemos ser.
P. Pero, a la que tienen un jugador que destaca, se lo quitan.
R. Al final es el ciclo de la vida de la Penya; por desgracia, por un lado, pero, por otro, ?qu¨¦ maravilloso!, porque significa que volver¨¢ a salir otro. Si Ricky, Rudy o Pau Ribas estuvieran de por vida ser¨ªa incre¨ªble. Pero no ser¨ªa real porque no tenemos ese poder econ¨®mico para mantenerlos, pero el hecho de que se marchasen permiti¨® que salieran Alberto Abalde, o Guillem Vives, o Albert Ventura u otros que saldr¨¢n. Es la ley de vida de la Penya. Y qu¨¦ bonito que es eso. Lo que s¨ª debemos intentar que estos jugadores se vayan cuando la Penya est¨¢ arriba, no como ha pasado, por desgracia y por la situaci¨®n econ¨®mica del club, que se han ido cuando todav¨ªa no hab¨ªan acabado de explotar y todav¨ªa no hab¨ªan acabado de ayudar a que el club y el equipo fuesen competitivos.
P. Es una fe ciega.
R. Es que esto es la Penya. Es lo que he aprendido yo. S¨¦ que cuando hay lesiones tengo que mirar abajo. Y cuando se va uno, seguro que la cantera me ha fabricado otro, estoy convencido.
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