Zizou vuelve y acepta un Everest

Santiago Solari cedi¨® su sitio a Zidane como futbolista y ahora lo hace como entrenador, las dos veces en el Real Madrid. Uno, el argentino, fue un jugador apreciado por esfuerzo, profesionalidad y buen tacto. Nunca meti¨® en problemas al club, elegante caracter¨ªstica en una entidad que suele ser una caja de bombas. Zidane es otra cosa: lleg¨® como aspirante a mito y se confirm¨® como un jugador legendario. Como t¨¦cnico repiti¨® la jugada. Le design¨® Florentino P¨¦rez para apagar el fuego que signific¨® la destituci¨®n de Rafa Ben¨ªtez en enero de 2015. El presidente tir¨® del prestigio de Zidane para protegerse y ganar tiempo. No imaginaba que Zidane desbordar¨ªa todas las expectativas: tres temporadas, una Liga y tres Copas de Europa. Ahora no vuelve como recurso. Zidane regresa cargado de cr¨¦dito y autoridad.

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Zidane: ¡°Vuelvo porque el presidente me llam¨® y no pod¨ªa decir que no¡±

Sergio Ramos: ¡°Ha sido desastroso y los jugadores somos los m¨¢ximos responsables¡±

Hace nueve meses, d¨ªas despu¨¦s de ganar la tercera final consecutiva en la Liga de Campeones, Zidane rechaz¨® la continuidad que le ofrec¨ªa Florentino P¨¦rez. En un episodio sorprendente ¡ªrara vez alguien le dice no a Florentino¡ª, Zidane se despidi¨® del Real Madrid, con un efecto demoledor para el presidente. Comenz¨® una b¨²squeda exhaustiva de entrenadores que desemboc¨® en la contrataci¨®n del seleccionador Julen Lopetegui, tres d¨ªas antes de comenzar el Mundial, con hirvientes consecuencias para el equipo.

Zidane sali¨® del Real Madrid como un astuto estratega. Con la temporada en la mano, no es f¨¢cil interpretar su decisi¨®n. En octubre fue destituido Lopetegui. ¡°Existe una gran desproporci¨®n entre la calidad de la plantilla del Real Madrid, que cuenta con ocho jugadores nominados al pr¨®ximo Bal¨®n de Oro, algo sin precedentes en la historia del club, y los resultados obtenidos hasta la fecha¡±, destacaba en el inclemente comunicado de despido. Cuatro meses y medio despu¨¦s, el cese se abate sobre Solari.

Zidane nunca descifr¨® los motivos del abandono, pero se intu¨ªan. El equipo se hab¨ªa descapitalizado en el ¨²ltimo a?o. La nueva pol¨ªtica de Florentino P¨¦rez ¡ªfichajes de jugadores muy j¨®venes, sin trayectoria acreditada en grandes equipos¡ª sonaba a fracaso, aireado a su manera por el t¨¦cnico franc¨¦s. Con el Madrid eliminado por el Legan¨¦s en los cuartos de final de la Copa y a una distancia kilom¨¦trica del Bar?a en la Liga, Zidane tom¨® una decisi¨®n radical: prescindir de todos los nuevos ¡ªTheo, Marcos Llorente, Vallejo, Mayoral y Ceballos¡ª y atacar la recta final de la temporada y las tres ¨²ltimas eliminatorias de la Copa de Europa con el escuadr¨®n de veteranos.

Hab¨ªa un reproche impl¨ªcito de Zidane a la pol¨ªtica deportiva del club, multiplicado por los sucesos que enturbiaron la victoria en Kiev. Cristiano amenaz¨® con irse y Bale, empachado de satisfacci¨®n despu¨¦s de marcar dos goles al Liverpool, exigi¨® la titularidad que Zidane le hab¨ªa negado por segunda vez consecutiva en una final. ¡°O ¨¦l, o yo¡±, insinuaban las palabras de Bale. Se qued¨® el gal¨¦s y se march¨® Zidane. Identific¨® la monta?a de problemas que se le ven¨ªan encima.

Ahora vuelve, y no se puede decir que en una situaci¨®n mejor. Cristiano se fue, Bale ha sido un mal sue?o y los ¨²nicos j¨®venes que han funcionado son los animados por Santiago Solari: Vinicius y Reguil¨®n. En las condiciones actuales, el Madrid invita mucho m¨¢s a la preocupaci¨®n que al optimismo, pero Zidane ha aceptado el desaf¨ªo. Veremos si su astucia est¨¢ a la altura de su fama. Significar¨¢ que ha visto se?ales atractivas donde casi todo el mundo observa desorganizaci¨®n y falta de criterio. Claro que esta vez Zidane no aparece como un mito sin bagaje. Regresa con un prestigio clamoroso y un poder ilimitado. Y eso sugiere tres agarres esenciales: mando total, dinero abundante y fichajes a la carta.