FC Maradona o c¨®mo disfrutar del paso del argentino por el Bar?a

Hay documentales que se agradecen por su valor informativo y tambi¨¦n por dar fe de sucesos que con el tiempo se olvidan, a veces incluso de forma deliberada. Hablar¨ªamos por ejemplo del paso de Maradona por el Bar?a. Ni el club ha presumido ni presume de haber tenido como futbolista al argentino ni el jugador habla de su paso por el FC Barcelona. No es que haya un acuerdo sino que ambas partes prefieren aparentemente no recordar o, si se quiere, olvidar, m¨¢s que nada porque se trata de un desencuentro que Movistar ha tenido a bien recuperar con un documental de 56 minutos coordinado por Roberto Rodr¨ªguez, ya ofrecido por #Vamos y que se puede recuperar a trav¨¦s de su programaci¨®n o en plataforma: FC Maradona.

Diego Armando Maradona jug¨® dos a?os en el Barcelona (1982-1984). No disput¨® muchos partidos y solo se gan¨® una Copa y la Copa de la Liga. A efectos de t¨ªtulos su paso fue poco productivo en una etapa dominada por la Real Sociedad y el Athletic (1980-1984). El equipo de Clemente fue su cruz por la lesi¨®n que le ocasion¨® Goikoetxea y por la final de Copa del Bernab¨¦u, saldada con un gol de Endikay una batalla campal que dej¨® en mal lugar a los futbolistas y tambi¨¦n a Maradona. Fue su ¨²ltimo partido antes de recalar en el N¨¢poles. El documental mezcla im¨¢genes de archivo, personales y alguna in¨¦dita o poco vistas, como su ingreso en el quir¨®fano cuando fue intervenido del mal¨¦olo despu¨¦s de la entrada del central del Athletic.

El relato es muy interesante porque cuenta con testimonios como el agente Josep Maria?Minguella, decisivo para su fichaje; amigos de la talla de Dyango; jugadores que le trataron muy de cerca: Marcos Alonso, Carrasco, Clos; los directivos est¨¢n representados por Joan?Gaspart; y se cuentan tambi¨¦n varios periodistas, alguno especialmente revelador en sus declaraciones: ¡°?Qu¨¦ ciudad! ?C¨®mo me pude ir de aqu¨ª?¡±, confiesa que le dijo Diego a Fabi¨¢n Ort¨ªz de camino a una gala de Don Bal¨®n. El argentino decidi¨® partir cuando supo que el presidente Josep Llu¨ªs N¨²?ez negociaba su traspaso al calcio con el presidente napolitano Corrado?Ferlaino. ¡°Si Diego se march¨® fue porque N¨²?ez era un presidente vendedor¡±, remacha Minguella.

Aunque el vestuario le adoraba por su compromiso y defensa de la plantilla, la directiva le tem¨ªa y la ciudad le miraba con recelo por su vida tribal y nocturna, protegido por un clan que levant¨® un muro humano en su casa de Pedralbes. Maradona fue un jugador de excesos, dentro y fuera de la cancha, protagonista de goles inolvidables, muy pocos como el que le marc¨® al Estrella Roja en Belgrado o el que le meti¨® a Agust¨ªn en el Bernab¨¦u despu¨¦s de partir por la mitad a Juan Jos¨¦. El reportaje expresa perfectamente la desaz¨®n vivida en el barcelonismo por lo que pudo ser y no fue, por culpa suya y de los dem¨¢s, atrapado el jugador entre la verdad y la mentira, la duda de saber si sufri¨® una hepatitis o una enfermedad ven¨¦rea disimulada por el Bar?a.

No disfrut¨® el Bar?a de Maradona, seguramente uno de los mejores solistas que ha tenido sino el mejor, ¨²nico en aquel momento, y el joven Maradona prefiri¨® en cierto modo borrar Barcelona. El documental ayuda a recuperar la memoria, a contextualizar el porqu¨¦ del desamor despu¨¦s de 700 d¨ªas de mucha intensidad y tambi¨¦n frustraci¨®n, a dejar constancia de que Maradona visti¨® la camiseta azulgrana del Bar?a. Vale mucho la pena visionar FC Maradona, el jugador al que los aficionados iban a ver c¨®mo calentaba antes de los partidos, artista por excelencia, c¨¦lebre por sus gestos t¨¦cnicos, una estrella que pas¨® por Barcelona y por la Liga, como si no jugara en el Bar?a.