Aspas F¨²tbol Club
El delantero del Celta, un caso de futbolista-hincha en extinci¨®n, ha alcanzado la plenitud rumbo a los 32 a?os, pese a no debutar con la ¨¦lite hasta los 25
Su hijo, que va a cumplir tres a?os, le pregunt¨® por qu¨¦ lloraba cuando se iba del campo el pasado s¨¢bado. ¡°Ten¨ªa una pupa¡±, le explic¨® Iago Aspas. Los h¨¦roes tambi¨¦n se conmueven. Tres meses despu¨¦s de lesionarse en el Camp Nou, de pilotar con dos goles la remontada del Celta (3-2 al Villarreal) y rescatarle de una racha en la que hab¨ªa sumado cinco puntos de 39 posibles, el mejor futbolista celeste, el ¨²nico que mira a los ojos a Messi como m¨¢s determinante para su equipo, se derrumb¨®. Todos le esperaban y no fall¨®. Pero el Celta sigue en puesto de descenso, a un punto del Villarreal, afronta este mi¨¦rcoles una nueva final en Huesca y la cuesti¨®n es inevitable: ?Jugar¨ªa Iago Aspas en Segunda Divisi¨®n si el Celta desciende?
Aspas es un futbolista de maduraci¨®n tard¨ªa. O quiz¨¢s es que quienes deb¨ªan no retiraron la fruta del ¨¢rbol cuando ya estaba preparada para degustarse. Cuando debut¨® en Primera Divisi¨®n, con el Celta en 2012, ya hab¨ªa cumplido los 25 a?os y meses antes no ten¨ªa estatus de titular en su equipo. El conjunto gallego hab¨ªa fichado en su posici¨®n a Bamogo, Okkas, Quincy Owusu-Abeyie, Papadopoulos, Cellerino o Arthuro. Ahora va camino de los 32, tiene un contrato que le vincula al equipo las tres pr¨®ximas temporadas y no se plantea un futuro lejos de Vigo. ¡°Me siento un emigrante¡±, dijo cuando la ambici¨®n y su crecimiento deportivo le llev¨® a salir primero a Liverpool (2013-14) y despu¨¦s a Sevilla (2014-15).
Un eventual descenso le obligar¨ªa de nuevo a tomar las maletas. Le duplicar¨ªan, como poco, el sueldo, eso s¨ª. El Celta destina este a?o a salarios y amortizaciones de fichajes poco m¨¢s de 50 millones de euros. Una ca¨ªda dejar¨ªa ese tope salarial marcado por LaLiga aproximadamente en la mitad y como es habitual el club se ha blindado con bastantes contratos que contemplan esa rebaja en los emolumentos de los futbolistas. En ese caso el sueldo de Aspas se reducir¨ªa a unos 1,5 millones brutos, m¨¢s o menos la mitad de lo que percibe en Primera. Ahora mismo en Segunda son contados los futbolistas que pasan del mill¨®n de euros. Aspas rechaz¨® no hace mucho una oferta china de ocho y el pasado verano el Real Madrid pens¨® en ¨¦l para cerrar la plantilla. ¡°No llegaron a hablar conmigo, pero hubo inter¨¦s porque buscaban un nueve. Al final ficharon a Mariano¡±, explic¨® el pasado mes de noviembre.
Aspas no se quiere ir del Celta. Pero un gallego lo mismo te dice una cosa que la contraria. ¡°No me veo fuera del Celta. Estoy muy a gusto aqu¨ª, pero nunca se sabe lo que pude deparar el futuro¡±, afirma. Acaba de estrenar una vivienda en su pueblo, Moa?a, siempre con los suyos, ha formado una familia con dos peque?os, se despierta cada d¨ªa con las incomparables vistas de la r¨ªa de Vigo y se considera bien pagado. Acaricia la posibilidad de reengancharse tras la retirada como director deportivo porque tiene mirada para el f¨²tbol y le sobran ojos para ver decenas de partidos: este domingo, en la resaca de una de sus tardes m¨¢s victoriosas, se vio cuatro por televisi¨®n. En Vigo vuela ya la idea, como en su d¨ªa con Mostovoi, de que hay que levantarle un monumento. Le quieren y no solo en casa. Cuando encendi¨® el tel¨¦fono m¨®vil tras el partido ante el Villarreal, que termin¨® entre l¨¢grimas, se encontr¨® con mensajes de compa?eros de un sinf¨ªn de equipos de la liga: Rodrigo, Bartra, ??igo Mart¨ªnez, Filipe, Morata... ¡°Hasta Iborra, al que acababa de ganar, me escribi¨® felicit¨¢ndome. Todos se alegran de que haya vuelto y me enorgullece tener compa?eros as¨ª¡±, explica Aspas.
Las dos ¨²ltimas temporadas fue el futbolista espa?ol que m¨¢s goles marc¨® en Liga (19 y 22, respectivamente), un tiempo en el que solo le superaron Messi, Su¨¢rez y Cristiano. En el presente ejercicio, con los dos tantos del pasado s¨¢bado al Villarreal, lleva 12 y ha marcado con la zurda, la diestra, la cabeza, de libre directo y de penalti. En el pichichi nacional ya est¨¢ a un gol de Jaime Mata y Ra¨²l de Tom¨¢s despu¨¦s de perderse 10 partidos y jugar entre medias, renqueante y sin recuperar, unos minutos en Getafe. ¡°Apuramos y jugu¨¦ con molestias¡±, recuerda.
La situaci¨®n del Celta y Aspas esboza una curiosa paradoja: el descenso ser¨ªa un varapalo econ¨®mico para la entidad, pese a que ha limpiado su deuda y no tiene n¨²meros rojos, y al tiempo servir¨ªa para que el futbolista, en otro destino, duplicase como poco sus ingresos. Pero tambi¨¦n toda esta historia deja una ense?anza, la del futbolista-hincha que juega por el escudo y por su gente. Para propios y extra?os, Aspas es el futbolista que todos quisieron ser. Nada puede ser comparable a hacer lo que ¨¦l hace para el equipo que lleva en el coraz¨®n. ¡°Todos me preguntaban cu¨¢ndo volv¨ªa y yo quer¨ªa echar una mano al equipo, con toda la adrenalina, tanto tiempo parado, la emoci¨®n..., la situaci¨®n me desbord¨® y salieron las l¨¢grimas¡±. Su ¨²nica renuncia el pasado s¨¢bado en Bala¨ªdos consisti¨® en no entrar en detalles ante la duda que le plante¨® su hijo. ¡°Es muy peque?o, todav¨ªa no entiende lo que es el celtismo¡±. No tardar¨¢ en comprenderlo.
Una media goleadora que se dispara
Desde que debut¨® con el Celta en Segunda en la temporada 2007-2008, Iago Aspas acumula 147 goles en 355 partidos disputados como profesional entre los clubes y la selecci¨®n. Pero por encima de los datos en bruto, lo m¨¢s llamativo de la trayectoria de Aspas es su evoluci¨®n hasta convertirse en una referencia del f¨²tbol espa?ol. Una progresi¨®n que le ha llevado a convertirse en internacional.
En su primera campa?a en la ¨¦lite, la 2012-2013, el de Moa?a marc¨® 12 goles en 37 partidos (0,32 por partido), unas cifras que le valieron para ser fichado por el Liverpool. Tras una campa?a decepcionante con los reds, con los que solo anot¨® un gol en 15 partidos, Aspas recal¨® en el Sevilla, donde a pesar de no contar mucho para Unai Emery vio puerta en 10 ocasiones (0,4 por encuentro). La temporada siguiente el delantero volvi¨® a Vigo, donde ha mejorado progresivamente su media a?o tras a?o, pasando de los 0,45 goles por partido que registr¨® entonces a los 0,62 que ostenta esta campa?a.
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