La Real sue?a ante otro Madrid de pesadilla
Los donostiarras aspiran a Europa tras ganar a un Real marcado por la expulsi¨®n de Vallejo
A rebufo de la apote¨®sica cumbre de su equipo femenino en la Copa, la Real alarg¨® la velada festiva en San Sebasti¨¢n. Y no de cualquier forma, sino con una victoria contundente ante un Madrid vacacional que no est¨¢ para jabatadas. A estas alturas de un curso de chasco en chasco, envidar en Anoeta con un jugador menos desde antes del descanso resultaba ut¨®pico. El equipo de Zidane se sostuvo a hombros de Brahim hasta que la expulsi¨®n de Vallejo le dej¨® en tanga. Lo aprovech¨® la Real, lozana y con Europa a la vista. Una victoria en Cornell¨¢ ante el Espanyol, rival directo, y una derrota del Athletic en el S¨¢nchez Pizju¨¢n, dar¨ªa a los donostiarras una plaza en la Liga Europa. El Real ya ni si quiera puede consolarse con un subcampeonato.
Arranc¨® el Madrid con br¨ªo, con emboscadas cercanas a la porter¨ªa de Rulli. Un engorro para la Real, proclive a articular el juego sin maltratar a la pelota. En ese Madrid pujante emergi¨® sobre todos Brahim, autor de un gol que le define: regate, estampida y punter¨ªa. Sac¨® la cadena a Zald¨²a, quebr¨® a Llorente, al que luego hizo derrapar antes de superar a Rulli con disparo cl¨ªnico.
Zidane: ¡°Est¨¢ muy claro lo que he hecho con Bale¡±
La controvertida figura de Gareth Bale, fuera de la convocatoria por segundo partido consecutivo, qued¨® muy tocada en Anoeta. Consultado al respecto al t¨¦rmino del encuentro, la respuesta de Zinedine Zidane fue elocuente. ¡°Est¨¢ muy claro lo que he hecho este fin de semana. La pr¨®xima tenemos otro partido [frente al Betis en Chamart¨ªn] y veremos el pr¨®ximo a?o¡±. El t¨¦cnico franc¨¦s puntualiz¨® que el gal¨¦s est¨¢ bien f¨ªsicamente.
El virtuosismo de Brahim sacudi¨® el duelo de forma inopinada. Se solt¨® la Real, se dej¨® ir el Madrid. Con Willian Jos¨¦ en la diana, revoltoso entre Vallejo y Nacho, Merino y los descarados Mu?oz y Barrenetxea sirvieron de lanzadera blanquiazul. Un tanto bien anulado a Oyarz¨¢bal ¡ªla evidencia de su fuera de juego no mereci¨® un estudio de cuatro minutos del ¨¢rbitro de VAR¡ª anticip¨® la crecida local. Una estupenda asistencia de espaldas de Willian Jos¨¦ permiti¨® a Merino sellar el empate.
El Madrid, ya disperso, solo encontr¨® cierto remedio de nuevo en Brahim, cuyo hilo con Benzema no aprovech¨® Isco ante Rulli. De inmediato lleg¨® la jugada que marc¨® el duelo. Vallejo hizo de Courtois en un disparo de Willian Jos¨¦. Penalti de libro; roja de manual. Pero Willian Jos¨¦ le entreg¨® el remate a Courtois, que no requiri¨® ni un paso para bloquear el penalti. Sin Ramos y Varane por Anoeta, Casemiro pas¨® a ejercer de central el resto de la tarde.
Al Madrid solo le quedaba un acto de resistencia, pero algunos se vencieron muy r¨¢pido. Caso de Marcelo, momificado en un remate de cabeza lejano de Zald¨²a que pill¨® resbal¨¢ndose a Courtois. El portero belga tampoco estuvo firme en el 3-1. Tras un remate de Oyarz¨¢bal al poste derecho de la meta visitante, Barrenetxea barri¨® el rechace, rumbo a la red ante las manos blandas del meta madridista. A sus 17 a?os y 136 d¨ªas, este habilidoso canterano que viaja en bici p¨²blica tras los partidos se convirti¨® en el jugador m¨¢s joven de la historia en cantar un bingo ante el Madrid, seg¨²n el estad¨ªstico M¨ªster Chip. El vivero de Zubieta no est¨¢ seco. Tambi¨¦n lo corrobor¨® Mu?oz, un lateral izquierdo con correa para el ataque y la defensa, nada que ver con el espumoso Theo cedido por el Real. Con Anoeta de confetis y serpentinas, pese a los caracoleos finales de Vinicius, la Real, con ellos triunfantes sobre el campo y ellas radiantes en la tribuna cerr¨® un fin de semana de glorias. El Madrid, por su parte, baj¨® el tel¨®n a su en¨¦simo petardazo de una temporada en la que va de espanto en espanto hacia ninguna parte. Lo mejor para el Real Madrid es que solo le queda una pena m¨¢s antes de que haga saltar la banca en el mercado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.