Brasil, de espaldas a Am¨¦rica

¡°?Qu¨¦ partido hay hoy?¡±, cuestiona Marcio, un camarero del barrio de Cidade Jardins de Belo Horizonte, vecino del hotel donde se concentra la selecci¨®n argentina. ¡°?Uruguay-Ecuador!¡±, resopla, ¡°no s¨¦ si lo vamos a poner en la televisi¨®n¡±. Ni en los bares ni en los estadios la Copa Am¨¦rica engancha a la afici¨®n brasile?a. El duelo entre la selecci¨®n del Maestro Tab¨¢rez y la ecuatoriana registr¨® la segunda peor afluencia de p¨²blico en lo que va del torneo sudamericano: 13.611 espectadores; la primera fue Venezuela-Per¨², con 11.107. Sin embargo, si se tiene en cuenta el porcentaje de asistentes respecto de la capacidad del estadio, el encuentro entre Uruguay y Ecuador lidera la tabla, con un 23%. ¡°Se puede escuchar a los jugadores, parece un entrenamiento¡±, lament¨® un periodista uruguayo en la tribuna de prensa del Mineirao.

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¡°Uno quiere que la gente venga y vea a los mejores futbolistas del mundo¡±, subray¨® Alejandro Dom¨ªnguez, presidente de la Confederaci¨®n Sudamericana de F¨²tbol (Conmebol). La Copa Am¨¦rica no engancha en Brasil. En el duelo inaugural entre la Canarinha y Bolivia registr¨® un total de 47.260 espectadores en el Morumbi, un estadio con 67.428 asientos (70% de afluencia). El debut de Argentina en Bah¨ªa ante Colombia, 35.572 (69%); mientras que el encuentro entre Paraguay-Catar sum¨® 19.196 (26%); y el Jap¨®n-Chile, 23.253 (34%).?

Hist¨®ricamente, la Copa Am¨¦rica nunca ha cautivado a la afici¨®n brasile?a. La Canarinha suma ocho Copas, frente a las 15 de Uruguay y las 14 de Argentina. La ¨²ltima vez que se disput¨® el m¨¢ximo torneo continental en Brasil, en 1989, la media de asistencia fue de 33.000 espectadores, frente a los 24.167 que promedian los seis partidos disputados hasta ahora. Ocurri¨®, sin embargo, que en la Copa Am¨¦rica de 1989 en la primera ronda la entrada media fue de 16.000. Eso s¨ª, la final entre Brasil y Uruguay marc¨® un total de 132.743. Lejos, en cualquier caso, de los 199.854 de espectadores que dice la leyenda que vieron en Maracanazo en 1950. Cifras irrepetibles. Hoy, el Maracan¨¢ tiene capacidad para 87.101 personas.

¡°Hay partidos que tienen muy buena venta y hay partidos que, lamentablemente, tienen menos. El balance, hasta ahora, es muy positivo y creo que va a ir mejorando¡±, insiste Dom¨ªnguez. La ¨²ltima Copa Am¨¦rica en Estados Unidos en 2016 tuvo una media de espectadores de 46.373 por los 25.223 espectadores por partido de Chile 2015. No fue una mala cifra la Chile, si se tiene en cuenta que la mayor¨ªa de los estadios tienen una capacidad de entre 15.000 y 30.000 asientos, con la ¨²nica excepci¨®n del Estadio Nacional de Santiago: 50.000. En Brasil, por ejemplo, el estadio m¨¢s peque?o, el Arena Corinthians, puede albergar a 47.000 personas.

La crisis econ¨®mica en Brasil no ayuda. En 2019, el promedio de entradas vendidas en la Libertadores fue de 34.281, por los 19.405 del Brasileirao y los 16.711 de la Copa Sudamericana (hom¨®loga de la Europa League). El precio promedio de las entradas fue de 43 reales (9,5 euros) para la Libertadores, por los 34 (7,5) y 26 (5,7) para el Brasileirao y la Sudamericana respectivamente. En la Copa Am¨¦rica, la entrada m¨¢s barata cuesta 120 reales (26). ¡°Soy del pueblo, siempre voy a predicar por el pueblo, para que est¨¦ en los estadios. Pero se sale de nuestras manos, no controlamos los precios de las entradas, en todo caso elevadas¡±, se quej¨® Dani Alves.

Mientras tanto, el presidente de la Conmebol, Dom¨ªnguez, insiste: ¡°Tenemos la oportunidad de recuperar el liderazgo mundial en el f¨²tbol¡±. Primero deber¨¢ enganchar a la gente. Los estadios lucen esquel¨¦ticos en la Copa Am¨¦rica 2019.