El club de los poetas: Luis Garc¨ªa Montero y Fernando Valverde pasan revista al Granada
El director del Instituto Cervantes y el poeta y autor del libro 'No vuelvas a decir que es imposible' charlan sobre su club tras el nuevo ascenso
¡°Nos val¨ªa el empate. Qu¨¦ agon¨ªa¡±. Los que hablan son dos poetas rememorando una tarde de sufrimiento en las gradas de Vallecas viendo a su Granada CF jugarse la salvaci¨®n. El director del Instituto Cervantes Luis Garc¨ªa Montero (1958) y Fernando Valverde (1980) se hab¨ªan llevado de refuerzo a otros poetas, como el premio Adon¨¢is salvadore?o Jorge Gal¨¢n, que desde ese instante qued¨® prendado de esos colores. Era mayo de 2012, la ¨²ltima jornada de la primera temporada en la m¨¢xima categor¨ªa del Granada en 35 a?os. Ten¨ªan 42 puntos. El Rayo Vallecano 40. En efecto, les val¨ªa el empate, pero Ra¨²l Tamudo marc¨® rozando el descuento de la segunda parte y dio la victoria in extremis a los locales. Pasaron angustia. Sin embargo la fortuna quiso que el Atl¨¦tico de Madrid se impusiera tambi¨¦n al Villarreal CF y que fueran finalmente los castellonenses quienes descendieran. ¡°La cuenta de la vieja, andar siempre pendiente de otros resultados, eso define lo que es ser del Granada¡±, le dice Valverde a Garc¨ªa Montero¡±. ¡°El Granada siempre camina al filo entre el milagro y la tragedia, pero sin ese v¨ªnculo emocional no se entiende nuestro apego irresistible¡±, convienen ambos.
Valverde es autor del libro No vuelvas a decir que es imposible, un relato personal que repasa la historia del Granada CF y que prologa el propio Garc¨ªa Montero. ¡°Si lo piensas, al Granada le ha pasado de todo, es un club donde todo lo que sucede es tan dram¨¢tico como fascinante.¡± Ahora ambos amigos se re¨²nen en torno a una mesa para charlar de f¨²tbol, para celebrar un nuevo ascenso a LaLiga Santander del equipo del que son socios desde ni?os.
La conversaci¨®n recorre desde el ¨²ltimo ascenso que vivieron juntos hasta los hitos del pasado que entienden que han configurado el esp¨ªritu del club: ¡°En mi mente, siempre van a flotar los segundos en que Ighalo regatea en el ¨¢rea del Elche CF y consigue en el Mart¨ªnez Valero el gol del ascenso¡±, dice Valverde, y Garc¨ªa Montero le responde rememorando la defensa integrada por Aguirre Su¨¢rez, argentino, y Fern¨¢ndez, paraguayo, que tanto intimid¨® a los rivales por su contundencia y que dio al Granada su mejor clasificaci¨®n hist¨®rica en el campeonato liguero, con una sexta plaza. O las haza?as del portero canario Cipriano Antonio Gonz¨¢lez Rivero, m¨¢s conocido como ?ito, un ¡°genio loco¡± capaz de paradas imposibles y de regatear hasta el centro del campo y tratar de chutar al arco rival, a veces resultando en cat¨¢strofe.
¡°Yo estuve en el campo en aquel partido¡±, dice solemne Garc¨ªa Montero, refiri¨¦ndose al d¨ªa de 1987 en que los tres hermanos Maradona, Diego Armando incluido, vistieron la camiseta del Granada en un amistoso contra los suecos del Malm?, despu¨¦s de que los nazar¨ªes ficharan al menor de ellos, a Lalo. ¡°?No resulta acaso incre¨ªble?¡±, se pregunta Valverde. Tanto como la historia que evoca a continuaci¨®n, el triste destino del guardameta h¨²ngaro Alberty, c¨¦lebre por comer naranjas durante los partidos, quien, tras salvarse de la Segunda Guerra Mundial termin¨® falleciendo por una intoxicaci¨®n tras beber agua corriente contaminada.
Tras hacer memoria de infortunios e hitos del club, Garc¨ªa Montero comparte con Valverde la impresi¨®n que dej¨® en ¨¦l una reciente visita a la ciudad deportiva. ¡°Me invitaron para que las conociera y, viendo las instalaciones, me dije: ¡®Vamos a subir muy pronto¡¯. Tuve la sensaci¨®n entonces de que el club hab¨ªa hecho la importante tarea de saber consolidarse, eso que queda m¨¢s all¨¢ del ganar y el perder¡±.
No solo se ha cumplido su pron¨®stico sino que, como a?ade Valverde, ¡°la afici¨®n se identifica con el equipo. Ahora se ven ni?os no solo con la camiseta del Real Madrid o del FC Barcelona. Hay muchos que salen orgullosos con la del Granada¡±.
Los poetas le transmiten desde la distancia una pregunta al entrenador del Granada CF, a Diego Mart¨ªnez (Vigo, 1980). El equipo, hace un par de temporadas, lleg¨® a alinear 11 nacionalidades distintas. Durante la presente campa?a el once habitual ha estado compuesto por hasta diez espa?oles. El f¨²tbol es un lenguaje universal pero, ?es la lengua una barrera para la conformaci¨®n de un grupo que funcione? Mart¨ªnez, tras solicitar que se les haga llegar una invitaci¨®n para encontrarse el a?o pr¨®ximo en Los C¨¢rmenes, responde que el f¨²tbol es emoci¨®n, y que el buen f¨²tbol es entendimiento entre quienes lo practican, algo que va m¨¢s all¨¢ del idioma: ¡°Los buenos equipos comparten valores y maneras de convivir con la exigencia y aspirar a la excelencia¡±.
Diego Mart¨ªnez, el gallego granadino art¨ªfice del ascenso
El d¨ªa de la cabalgata de Reyes, el 5 de enero, Diego Mart¨ªnez se hallaba con su hija y se le acerc¨® un socio con solera. ¡°Enhorabuena porque, por fin, estoy disfrutando con mi nieto del juego. Esto s¨ª es mi Granada¡±, le dijo. Y Mart¨ªnez recuerda aquello como el mayor halago posible, el momento en que se dio cuenta de que estaban en la senda apropiada. ¡°Este a?o creo que hemos logrado volver a despertar un sentimiento en el p¨²blico. Lo que somos y lo que hacemos est¨¢ enraizado en la historia y los hitos pasados. En la segunda jornada, cuando el CD Lugo nos empata, la afici¨®n aplaude. Hab¨ªa quien dec¨ªa que coquetear¨ªamos con la p¨¦rdida de la categor¨ªa o, como mucho, nos mantendr¨ªamos, y hemos logrado el ascenso¡±. Resistencia, obstinaci¨®n de un equipo trabajador (¡°Nunca en mi carrera he tenido un grupo que hiciera mejores entrenamientos el d¨ªa siguiente a un partido¡±, afirma con orgullo Mart¨ªnez). Esos son los valores que el entrenador ha encontrado en lo profundo del propio club y ha utilizado para que, en ese camino en el filo al que alud¨ªa Valverde, el equipo cayera del lado del milagro. Para que pronto vuelva a competir en LaLiga Santander.
?l, que de momento es el t¨¦cnico m¨¢s joven de la pr¨®xima LaLiga Santander, basa su ¨¦xito en dos cuestiones: primero en construir equipos muy camale¨®nicos, que act¨²en distinto en diversas fases de un partido y resulten impredecibles, ¡°que se sepan poner muchos disfraces¡±, lo cual ¡°requiere de la asimilaci¨®n de una enorme riqueza t¨¢ctica¡±; y por ¨²ltimo en algo que entiende una innovaci¨®n metodol¨®gica igual de fundamental que el uso de tecnolog¨ªa o an¨¢lisis en v¨ªdeo: ¡°Empatizar exigiendo y exigir empatizando¡±, una m¨¢xima que tom¨® prestada del t¨¦cnico serbio de baloncesto ganador de nueve Euroligas ?eljko Obradovi?. ¡°Tenemos una gran ascendencia sobre los jugadores y la responsabilidad de hacer que sientan que mejoran. Yo me di cuenta de c¨®mo esto trasciende a lo que se hace en un entrenamiento sobre el c¨¦sped cuando, en rueda de prensa, o¨ª a un jugador que estuvo en mi plantilla en el Sevilla Atl¨¦tico, usar como propia una frase que les repet¨ªa mucho: ¡®Donde no llegue el acierto que llegue la insistencia¡¯, resume Mart¨ªnez.