El sospechoso Sun Yang triunfa en 400 libre y la joven Titmus destrona a Ledecky
Investigado por otro esc¨¢ndalo de dopaje, el chino gana su cuarto oro consecutivo en la distancia. La australiana acaba con siete a?os de hegemon¨ªa de la estadounidense
Expedientado por doparse con trimetazidina en 2014, sancionado con una multa de 650 euros y rehabilitado, el problem¨¢tico Sun Yang nunca interrumpi¨® su andadura al l¨ªmite. En su vida privada como en su quehacer profesional, quem¨® los a?os y los campeonatos entre escandaleras. Se present¨® en el Mundial de nataci¨®n de Gwangju envuelto en su habitual parafernalia de aclamaci¨®n propagand¨ªstica oficial china hasta que el Daily Telegraph, en su edici¨®n australiana, revel¨® que le hab¨ªan vuelto a investigar por negarse a someterse a un control sangu¨ªneo en septiembre de 2018. A punto de comenzar la competici¨®n, se desat¨® la tormenta.
Seg¨²n parece, Sun no solo se resisti¨® entre amenazas a los analistas enviados por la WADA, la asociaci¨®n mundial contra el dopaje, sino que luego rompi¨® a martillazos el frasco con la muestra de sangre que le hab¨ªan extra¨ªdo. Result¨® asombroso que la FINA, la federaci¨®n internacional, le permitiera competir sin cerrar el caso. No solo compiti¨®. Se tir¨® a la final de 400 libre, celebr¨® su triunfo lanzando pu?etazos al aire y mostrando cuatro dedos a las c¨¢maras, se?al de su cuarto t¨ªtulo consecutivo mundial en la distancia. Luego se colg¨® la medalla en pleno revuelo. En las gradas, una delegaci¨®n de funcionarios chinos bland¨ªa una pancarta gigante aclam¨¢ndole con una leyenda en ingl¨¦s y un juego de palabras: Sun Rises, sale el sol. Los nadadores han comenzado a manifestarse contra lo que consideran un atropello. Mack Horton, el australiano, que fue plata, se neg¨® a subirse al mismo podio que Sun, que solo pudo darle la mano al medallista de bronce, el italiano Gabriele Detti.
La primera jornada de finales y semifinales del Mundial result¨® turbulenta. En la final masculina del 400 se impuso el tramposo Sun replicando el podio de 400 de los Mundiales de 2017, solo que con marcas m¨¢s lentas: Sun 3m 42,44s, Horton 3m 43,17s y Detti 3m 43,23s. En la final femenina, aflor¨® la nueva generaci¨®n para cerrar el ciclo de la vieja. El duelo que libraron Katie Ledecky y Ariarne Titmus alumbra a una nueva estrella. Se impuso Titmus sac¨¢ndole casi dos segundos en el ¨²ltimo largo y acab¨® con la hegemon¨ªa m¨¢s prolongada en la historia de la nataci¨®n femenina.
A sus 22 a?os, Ledecky hab¨ªa dominado las pruebas de 400, 800 y 1.500 libre sin soluci¨®n de continuidad desde 2013. Sin perder jam¨¢s. El reguero de r¨¦cords mundiales establecidos parec¨ªa inasequible. La estadounidense, que cada d¨ªa desarrolla m¨¢s su musculatura, ostenta el r¨¦cord mundial desde que hizo 3m 56,46s en los Juegos de Rio. Lleg¨® a Corea del Sur con el mejor tiempo de la temporada (3m 59,28s). Solo la amenazaba Titmus, que convalid¨® las pruebas de selecci¨®n australianas en junio con 3m 59,35s. Solo tres nadadoras a lo largo de la historia han bajado de cuatro minutos: Ledecky, Federica Pellegrini y Titmus.
Titmus sali¨® como un torpedo. Al mismo ritmo de Ledecky en Rio. Controlando la prueba en el primer largo y cediendo el primer puesto a su rival en el segundo y el tercero. Alarmada ante la amenaza, Ledecky, que est¨¢ acostumbrada a abrir una gran distancia y nadar sola, bati¨® piernas antes de lo previsto. El aumento del ritmo de patada es un turbo que emplea solo en los ¨²ltimos 100, pero el perfil de la australiana le oblig¨® a cambiar la t¨¢ctica. Titmus es famosa por la velocidad que es capaz de desarrollar, impropia de una fondista. Ledecky logr¨® abrir brecha en el pen¨²ltimo largo: toc¨® la pared en 3m 28,63s, seguida de su perseguidora a 3m 29,25s. No era suficiente.
Ledecky comprendi¨® que su final ser¨ªa tr¨¢gico desde el viraje. Cuando Titmus la sobrepas¨® al cabo de 20 metros de furor, dio la impresi¨®n de dejarse arrastrar por el reflujo. Titmus hizo el ¨²ltimo largo en 29,51s. Ledecky se rindi¨® en 31,34s.
Titmus, de 18 a?os, conquist¨® el oro en 3m 58,76s. Ledecky se qued¨® en 3m 59,97s. Juntas compusieron una obra grandiosa. Ledecky la concluy¨® agarrada al muro. Fundida. Escondiendo la cara, la mirada tapada con las gafas espejadas, el ba?ador negro de riguroso luto, dio la impresi¨®n de ser testigo del funeral de sus mejores d¨ªas.
Peaty baja de 57 segundos en 100 braza
En sinton¨ªa con los precedentes de v¨¦rtigo, Adam Peaty cerr¨® la sesi¨®n de carreras individuales con el primer r¨¦cord mundial de los campeonatos. El ingl¨¦s de 24 a?os hizo la segunda semifinal de 100 braza en 56,88s, convirti¨¦ndose en el primer hombre en nadar por denajo de 58s y 57s y batiendo por s¨¦ptima vez el mejor tiempo de una distancia que gobierna en solitario. Para los libros de historia quedar¨¢ el r¨¦cord que caduc¨®, el que estableci¨® el a?o pasado en Glasgow: 57,10s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.