La Federaci¨®n Internacional de Nataci¨®n descalifica a Rapsys, el m¨¢s r¨¢pido, y da el oro a Yang en 200 libre

La final de los 200 metros libre del campeonato del mundo de nataci¨®n, celebrada en la ciudad de Gwangju este martes, registr¨® tres hechos irrefutables. Primero, que al sonido de la bocina que declara el inicio de la prueba todos los nadadores estaban de pie en sus poyetes. Ninguno salt¨® al agua antes de tiempo. Segundo, que al cabo de recorrer la distancia, el primero en tocar la placa fue el lituano Danas Rapsys con un tiempo de 1m 44,69s seguido del chino Sun Yang (1m 44,93s),?c¨¦lebre sujeto de una investigaci¨®n por incumplir reiteradamente con la normativa antidopaje en un proceso impulsado por la Asociaci¨®n Mundial Antidopaje (AMA) ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAD) despu¨¦s de que la federaci¨®n internacional de nataci¨®n (FINA) le diera la raz¨®n al investigado. Tercero, que los jueces descalificaron a Rapsys permitiendo que Sun Yang ganara de rebote su segundo oro mundial consecutivo en 200.

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La prueba discurri¨® sin incidentes. Rapsys sali¨® entre los ¨²ltimos. Solo se coloc¨® entre los tres primeros al pasar por la pared de los 100 metros. Sun Yang lideraba la final en el parcial de los 150 pero Rapsys volte¨® con m¨¢s fuerza y se puso en cabeza en el largo decisivo. El lituano conserv¨® la ventaja hasta tocar la placa. Se gir¨® y al verse en lo alto del marcador con 1,44s, un segundo por debajo de su mejor marca, expres¨® toda su perplejidad con una expresi¨®n anglosajona: ¡°What the fuck¡±.

La sorpresa de Rapsys se multiplic¨® instantes despu¨¦s, cuando la megafon¨ªa de la piscina declar¨® que hab¨ªa sido descalificado. A falta de una explicaci¨®n oficial de la FINA, solo se puede constatar que Rapsys hizo un ligero movimiento en el poyete tras la se?al de alerta, "on your marks", circunstancia de dudosa legalidad cuyo efecto sobre el resultado de la prueba fue irrelevante. El reglamento de competici¨®n de la FINA establece en su art¨ªculo SW 4 que el funcionario "iniciador" debe dar la salida cuando todos los nadadores est¨¢n quietos sobre el poyete. La prescripci¨®n, m¨¢s que para el nadador, es para quien ordena la salida. Las im¨¢genes de TV no permiten determinar que el lituano se mueva en el momento de la salida, ni su tiempo de reacci¨®n result¨® en una entrada m¨¢s r¨¢pida en el agua, indicio de un aprovechamiento il¨ªcito del empuje.

Rapsys abandon¨® la piscina conturbado mientras el vencedor por la v¨ªa judicial lo celebraba subi¨¦ndose a horcajadas en la corchera, ufano, y golpeando el agua como si quisiera vengarse del hidr¨®geno en medio de un clamor que son¨® como uno de los alaridos de espanto que emiten los adolescentes en el cine durante las pel¨ªculas de terror. Solo la delegaci¨®n de China ovacionaba a su h¨¦roe, verdadero ¨ªdolo de masas en su pa¨ªs, mientras la multitud protestaba contra la decisi¨®n desde las gradas. Sun Yang permaneci¨® solo en la piscina durante unos instantes, saboreando la gloria. Siempre fue un muchacho proclive a meterse en l¨ªos, pero en este Mundial, a sus 27 a?os, supera sus propios est¨¢ndares.

La ceremonia de premiaci¨®n se inici¨® bajo los pitos del p¨²blico, indignado ante la actitud retadora del campe¨®n. Al parecer molesto con la flema del brit¨¢nico Duncan Scott, que fue bronce, el chino comenz¨® a gritarle cosas al o¨ªdo mientras bland¨ªa el pu?o amenazador. Una vez que sonaron los himnos, Sun Yang llam¨® a los otros premiados para que se hicieran una foto con ¨¦l, pero Scott permaneci¨® en el extremo opuesto del podio mirando hacia otro lado. La exhibici¨®n de repudio enfureci¨® a Sun Yang, que comenz¨® a increpar al ingl¨¦s: "?Eres un perdedor y yo soy un ganador!".

La FINA lanz¨® advertencias a Yang y a Scott por encontrar su conducta igualmente reprobable. Scott no abandon¨® su posici¨®n en la BBC: "Si ¨¦l no puede respetar nuestro deporte, ?por qu¨¦ debemos respetarlo a ¨¦l? Ojal¨¢ esto se reproduzca en todas las ceremonias en las que participe".

El incidente soliviant¨® a representantes de todos los equipos, que en privado confiesan estar hartos de Sun Yang. Campeona mundial de 100 braza este martes, la tremenda Lilly King sali¨® de la piscina con el martillo entre los dientes. "Es triste", dijo, "porque vemos que la FINA hace m¨¢s por reprender a Horton de lo que han hecho por reprender a Sun Yang. ?Pensad en eso! Es bastante loco¡±.

¡°Tramposo¡±

El mundial de Sun Yang habr¨ªa transcurrido sin sobresaltos de no ser porque el s¨¢bado pasado el The Daily Telegraph public¨® que en septiembre de 2018 se hab¨ªa resistido con violencia a pasar un control antidopaje rompiendo a martillazos el frasco con la sangre que le acababan de extraer. Tras abrirle un expediente, la FINA le dio la raz¨®n bajo el argumento de que el control no hab¨ªa cumplido con todos los formalismos reglamentarios, a lo que la AMA replic¨® llevando el caso al TAD. Las protestas de distintos representantes de los equipos que compiten en Gwangju ante la evidencia anormal de que el chino participara de las carreras incluso estando investigado, culminaron en la ceremonia de premiaci¨®n de los 400 metros libre. All¨ª el australiano Mack Horton, que fue plata, se neg¨® a subirse al podio y dar la mano al chino, que fue oro.

El desencuentro tuvo precedente. Durante los Juegos de 2016, Horton calific¨® a Sun Yang de "drug cheat" (tramposo por drogas). Nadie en la piscina olvida que en 2014 Sun Yang fue condenado por dar positivo por consumo de trimetazidina, un estimulante.

El lunes la FINA se apresur¨® a amonestar a Horton en un comunicado. ¡°La FINA respeta el principio de libertad de expresi¨®n¡±, dijo la nota, ¡°pero debe conducirse en el contexto adecuado (¡­). Los atletas y su entorno son conscientes de que deben respetar las regulaciones de la FINA y no usar la organizaci¨®n para realizar declaraciones o gestos personales. La cuesti¨®n por la que presumiblemente Mack Horton protest¨® est¨¢ en estos momentos sujeta a una investigaci¨®n por el TAD y no es apropiado que la FINA prejuzgue la vista¡±.