Bonaventure brilla en una tarde negra de Courtois

Philippe Clement, el entrenador del Brujas, es un hombre apasionado, incapaz de controlarse. Cada jugada de su equipo merece un comentario en forma de aspaviento, en el que el jugador que lo recibe debe decidir si se lo toma como un est¨ªmulo, o acaba por asentir y agachar la cabeza. Durante toda su visita al Santiago Bernab¨¦u insisti¨®, una y otra vez, en que las jugadas de ataque del equipo belga tuvieran el mismo desarrollo, sencillo, pr¨¢ctico y ¨²til. Bal¨®n largo al m¨¢s r¨¢pido. Despu¨¦s de verse con el partido ganado, y perdido, celebr¨® el empate como una gesta abrazado a su cuerpo t¨¦cnico. Pu?os cerrados y grito en el cielo.

Frente a Tau y Dennis Bonaventure, dos delanteros m¨¢s r¨¢pidos que h¨¢biles, el Madrid se olvid¨® de su solidez defensiva armada recientemente, para complicarse un partido que rescat¨® casi sobre la bocina. Pero, aun as¨ª, no evit¨® la penumbra. Por primera vez en su historia, los blancos han comenzado la temporada en la Liga de Campeones sin ganar ninguno de sus dos primeros partidos y contin¨²an en la ¨²ltima plaza de su grupo.

No tuvo sosiego la defensa blanca, con Ramos y Varane desbordados por la cadencia infinita de piernas de dos futbolistas configurados para ejecutar la misma acci¨®n sin r¨¦plica en el Madrid. Cualquier bal¨®n en largo romp¨ªa l¨ªneas y reventaba la muralla blanca construida en los ¨²ltimos tres partidos, como si todos sus ladrillos se hubieran agrietado. En el primer disparo que le realizaron acab¨® con la secuencia de tres partidos sin encajar un gol, la mejor racha con Zidane en el banquillo.

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Europa angustia al Madrid

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Ni siquiera la figura de Ramos impon¨ªa su jerarqu¨ªa y lograba cambiar el paso a un Brujas sincronizado, carente de miedos y con una seguridad impropia de un equipo sin espuelas en Europa. Por ese camino arrastr¨® a Nacho, que dej¨® el partido al descanso por un problema en la rodilla, y Courtois, que sigui¨® el mismo camino aquejado de molestias estomacales.

No dej¨® menos bien a Modric, protagonista del clamoroso error que dio pie al segundo gol de Dennis Bonaventure. El ariete nigeriano, de 21 a?os, logr¨® un doblete en dos acciones en las que demostr¨® una extraordinaria habilidad para complicarse la vida con todo de cara, y a¨²n as¨ª resolverlas con eficacia. Despu¨¦s de Mandzukic, con la Juventus en la Champions de 2018, ning¨²n otro jugador hab¨ªa logrado hacerle dos goles al Madrid en el Bernab¨¦u. Solo err¨® en uno de los tres disparos que realiz¨®, complet¨® tres de los seis regates que intent¨®, y se llev¨® la pelota en dos de las tres veces que salt¨® ante la defensa blanca. Bonaventure ya est¨¢ en esa lista de demonios epis¨®dicos del Madrid en el Bernab¨¦u en competici¨®n europea que, en la era moderna, inaugur¨® Dimitri Radchenko con el Spartak de Mosc¨² en 1991 y en la que aparecen tambi¨¦n Pato en 2009, Huntelaar en 2015, y Aubameyang en 2017.

La salida del campo de Bonaventure alivi¨® al Madrid, volcado al ataque y con Ramos tocando la corneta como delantero centro, su gol, y el de Casemiro de cabeza contuvieron al Brujas, pero no lograron dar la vuelta al partido. Nunca antes lo hab¨ªan logrado los blancos en competici¨®n europea con semejante diferencia al descanso. Ramos, con su gol, se convirti¨® en el tercer defensa del Madrid con m¨¢s goles en Champions (12), todav¨ªa por detr¨¢s de Helguera (15) y Roberto Carlos (16).