Triunfo de fe del Sevilla

El Sevilla se llev¨®, y alcanza ya los 30 puntos, un sufrido triunfo frente a un combativo Legan¨¦s. Un gol del central Diego Carlos satisfizo el hambre competitivo de los aficionados del club andaluz, satisfechos por c¨®mo pelea su equipo aunque tuviera que pasarlo realmente mal para sacar el pleito adelante. El Legan¨¦s vendi¨® muy cara su derrota, peleando hasta el final por el empate, con el Sevilla metido atr¨¢s dando balonazos ante la incapacidad de sus centrocampistas para tener el bal¨®n y cerrar el encuentro. Si el Legan¨¦s pelea as¨ª siempre, comprar¨¢ muchas papeletas para salvarse. En honor a la verdad, el empate no hubiera sido del todo injusto. El gol del poderoso Diego Carlos lleg¨® cuando mejor estaba el Legan¨¦s. Un inicio de segundo tiempo poderoso, con un ?scar magistral. Fue Vaclik, con un parad¨®n, el que sostuvo a este Sevilla con menos f¨²tbol que en anteriores ocasiones, pero con un coraz¨®n enorme.

Un Sevilla donde Lopetegui actu¨® de forma eficiente con sus decisiones. Primero dando entrada a Gudelj para sostener un centro del campo que se le iba. Luego, con Gil para ganar salida en velocidad. Finalmente, con Sergi G¨®mez por De Jong para aguantar el chaparr¨®n de un Legan¨¦s que envi¨® un n¨²mero importante de balones al ¨¢rea en busca de sus torres. Fue, en definitiva, un triunfo de fe y convicci¨®n del Sevilla, con menos juego que en anteriores ocasiones ante lo bien que plante¨® el partido en defensa el Legan¨¦s. En encuentros tan duros, la afici¨®n andaluza encontr¨® nuevos h¨¦roes, caso del central Diego Carlos.

Partido de los de verdad en Nervi¨®n. Puede que los n¨²meros certifiquen que el Legan¨¦s es el colista. Sus sensaciones son muy distintas. Se trata de un equipo competitivo, ordenado y trabajado, quiz¨¢s con un perfil demasiado conservador, pero con las ideas claras. Adem¨¢s, el viejo zorro Aguirre le plante¨® un partido muy inc¨®modo a un Sevilla hu¨¦rfano de dos de sus referentes, Fernando y Ocampos. Lopetegui resolvi¨® llenando su once de centrocampistas, con V¨¢zquez de extremo por la derecha y Jord¨¢n de ancla. El Legan¨¦s, con mucho oficio, se sobrepuso a la desgraciada lesi¨®n de Siovas a los 20 segundos. No le import¨® ser sometido a un asedio impresionante de un Sevilla de mucho toque y menos desborde que en anteriores ocasiones. Aun as¨ª, las mejores y ¨²nicas ocasiones fueron de los locales en una primera mitad donde su dominio fue casi hegem¨®nico. De Jong, un enigma ante el gol, tuvo dos ocasiones clar¨ªsimas y todav¨ªa Recio salv¨® un bal¨®n bajo palos enviado por V¨¢zquez.

Lo que no se esperaba el Sevilla fue el aluvi¨®n de juego del Legan¨¦s en el inicio de la segunda mitad. ?scar tom¨® el mando de las operaciones con su visi¨®n de juego y velocidad. La grada percibi¨® el peligro. Primero protest¨® y luego anim¨®, sobre todo despu¨¦s de la decisiva intervenci¨®n de Vaclik ante el propio ?scar. El partido, bravo, duro e intenso, requiri¨® un gol de los de antes, protagonizado por los centrales del Sevilla en un bal¨®n al ¨¢rea de Navas. Diego Carlos remach¨® en el ¨¢rea peque?a despu¨¦s de una el¨¢stica intervenci¨®n de Kound¨¦. Los de Lopetegui hab¨ªan hecho lo m¨¢s dif¨ªcil, pero no dejaron de sufrir. Con Banega falto de chispa, al Sevilla le falt¨® pausa y juego para cerrar el encuentro. Solo a trav¨¦s de Kound¨¦ puso en aprietos a Cu¨¦llar. El resto consisti¨® en remangarse, pegar unos cuantos voleones y defenderse con todo ante el r¨²stico pero efectivo m¨¦todo del Legan¨¦s, que colg¨® un mont¨®n de balones en el ¨¢rea andaluza. En uno de ellos, Carrillo estuvo a punto de empatar. De forma ag¨®nica, con muchos futbolistas sufriendo calambres, perdiendo tiempo y con V¨¢zquez de delantero centro, el Sevilla se hizo con un triunfo de oro que le asienta en la tercera plaza de esta Liga tan pareja. Esta vez no hubo f¨²tbol. S¨ª mucha fe. El Legan¨¦s fue un hueso muy duro de roer, de los que deja una digesti¨®n de lo m¨¢s complicada.