Diego Carlos, la roca del Sevilla

¡°Lo que m¨¢s me gusta de Diego Carlos es que tiene muchas ganas de aprender. Se ha adaptado de maravilla a lo que queremos¡±. Las palabras de Julen Lopetegui, entrenador del Sevilla, revelan la actitud con la que el central brasile?o emprende cada d¨ªa de trabajo en el conjunto andaluz, tercer clasificado de LaLiga. El nuevo Sevilla dise?ado por Monchi en su regreso a la entidad tiene en el defensa a una de sus piezas angulares. Ante el Legan¨¦s, el pasado domingo, Diego Carlos hizo el gol del triunfo y cuaj¨® una espl¨¦ndida actuaci¨®n. Se plasm¨®, adem¨¢s, una comuni¨®n con la grada muy especial que record¨® a la del sevillismo con centrales como Javi Navarro y Pablo Alfaro. Tambi¨¦n unos a?os m¨¢s atr¨¢s con Paco Gallego, defensa internacional que jug¨® en el Sevilla y en el Barcelona.

Diego Carlos, nacido en Brasil y de 26 a?os, emigr¨® joven al f¨²tbol europeo. El defensa recal¨® en el Estoril, de la Segunda portuguesa, en 2014. Luego fue cedido al filial del Oporto. ¡°Conoc¨ªa a Diego Carlos de su etapa en el Oporto B¡±, aclar¨® Lopetegui, quien le hizo entrenar en algunas ocasiones con el primer equipo portugu¨¦s. Diego Carlos regres¨® al Estoril y en 2016 fue fichado por el Nantes, franc¨¦s. Ah¨ª se asent¨® jugando 108 partidos en tres temporadas. La liga gala es uno de los caladeros preferidos de Monchi, que ya intent¨® el fichaje de Diego Carlos para la Roma.

Cuando el director deportivo regres¨® a Sevilla con plenos poderes, no dud¨® en pagar 15 millones de euros al Nantes por el defensa. Ahora tiene una cl¨¢usula de 75 y contrato hasta 2024. Ha jugado los 15 partidos de LaLiga y dos en Europa, con un gol anotado. Es un fijo para Lopetegui y forma una pareja muy segura con Kound¨¦. ¡°De Diego Carlos me llama la atenci¨®n lo r¨¢pido que se ha adaptado a la ciudad y al car¨¢cter de nuestro club¡±, aclara Pablo Blanco, coordinador de los escalafones inferiores del Sevilla y defensa de la primera plantilla durante 13 temporadas. ¡°Es un jugador muy potente. Un central moderno porque tiene tambi¨¦n una aceptable salida del bal¨®n, con un buen golpeo. La ¨²ltima irrupci¨®n tan buena de un central en nuestro equipo fue la de Lenglet¡±, a?ade Blanco. El t¨¦cnico encuentra algunas similitudes en Diego Carlos con Pablo Alfaro y Javi Navarro, pero r¨¢pidamente le salta un nombre. ¡°Para m¨ª juega como Paco Gallego, nuestro capit¨¢n a finales de los 70. Ese salto, ese juego a¨¦reo y esa potencia en el cruce...¡±, concluye Blanco.

¡°Est¨¢ m¨¢s fuerte que el vinagre¡±, bromea Nolito cuando se le pregunta por el brasile?o. Su moldeado f¨ªsico, sin embargo, no es producto del trabajo con pesas. En una entrevista a los medios del club, el defensa indic¨® que el gimnasio solo lo visitaba para realizar ejercicios de estiramiento. ¡°Es una cuesti¨®n de gen¨¦tica¡±, aclar¨® el propio jugador.

La adaptaci¨®n de Diego Carlos ha sido muy buena al Sevilla. Es querido en el vestuario y solo temido cuando reclama las apuestas ganadas a sus compa?eros en los partidos de f¨²tbol-tenis, la aut¨¦ntica pasi¨®n de muchos de los futbolistas de la plantilla del Sevilla con la que ponen fin a los entrenamientos. Pocas cosas alteran el ¨¢nimo del brasile?o. Si acaso el recuerdo de Emiliano Sala, su amigo y compa?ero en el Nantes y fallecido en un accidente de avi¨®n el pasado mes de febrero.