Espa?a, semifinalista del Mundial

Montenegro salv¨® a Espa?a. Una victoria de las balc¨¢nicas sobre Suecia (26-23) clasific¨® a la selecci¨®n para las semifinales del Mundial, las terceras de su historia. Noruega ser¨¢ su rival. El equipo de Carlos Viver hab¨ªa sido derrotado ampliamente por Rusia a primera hora de la tarde de Jap¨®n (26-36). Con este resultado, todo quedaba pendiente del partido de las n¨®rdicas, que necesitaban vencer. Sin embargo, cayeron contra Montenegro, que se jugaba entrar en el preol¨ªmpico.

En su encuentro, las Guerreras no pudieron decir ni p¨ªo ante una rival, entrenada por el canario Ambros Mart¨ªn, que le superaron en todos los apartados. Las malas sensaciones que dej¨® el ag¨®nico duelo contra Jap¨®n se confirmaron este mi¨¦rcoles. Un equipo desbordado e impotente no le hizo ni cosquillas al coloso que tuvo enfrente. Los goles Frolova (nueve sin fallo) y el muro de la portera Sedoykina (13 intervenciones por apenas cinco de las guardametas espa?olas) resultaron un tormento para Espa?a. Por suerte, cuatro horas despu¨¦s, ya en plena noche nipona, apareci¨® salvadora Montenegro.

La selecci¨®n tard¨® tres minutos en confirmar que deb¨ªa escalar un Himalaya para llegar por su cuenta a semifinales, sin ayudas de terceros. Despu¨¦s del esperanzador 2-0 de inicio, el equipo de Ambros Mart¨ªn replic¨® con un parcial de 0-5 en un pesta?eo y marc¨® territorio en el partido. Desde ese momento tan inicial, el dominio de las rusas fue incontestable y solo las acciones de Shandy Barbosa (cinco tantos en la primera parte), muchas veces en acciones individuales, aliviaron algo a Espa?a. La defensa era inabordable para el conjunto de Carlos Viver. Sin producci¨®n desde los extremos y cerrados todos los caminos a la pivote Ainhoa Hern¨¢ndez, decisiva contra Suecia y Jap¨®n pero contrarrestada esta vez (tres dianas en total), Espa?a rebotaba una y otra vez contra el muro.

Se escap¨® su rival por seis goles (6-12) en el minuto 18. Por el marcador y las sensaciones, el choque amenaz¨® entonces un derrumbe r¨¢pido. Resoplaba Viver desde la banda, pero las espa?olas encontraron una v¨ªa de escape con un parcial de 3-0 que pudo ser mayor si Barbosa no falla una vaselina forzada en un contragolpe. La reacci¨®n no sirvi¨® para cambiar la tendencia del encuentro, solo para mitigar la inferioridad. En el lado contrario de la pista, las rusas superaron casi siempre una defensa porosa que no daba abasto y lograron un 62% de acierto en sus ataques en el primer acto. Vyakhireva (tres dianas hasta ese momento) se uni¨® a?Frolova en su labor de castigo a la porter¨ªa que primero defendi¨® Zobqi y luego Silvia Navarro. Viver mov¨ªa el cesto, cambiaba piezas; sin embargo, el problema era estructural.?

En la reanudaci¨®n, a Espa?a le cay¨® la gran tormenta, su sentencia. Un parcial de 3-9, liderado por una impoluta Frolova, zanj¨® el duelo. Que Nerea Pena, una de las armas ofensivas de la selecci¨®n, anotara su primer tanto, y desde los siete metros, en el minuto 39 ilustra bien las dificultades en ataque. Tampoco Rusia, que ya era l¨ªder del grupo antes de empezar, iba a permitir ninguna concesi¨®n. Una especie de amago de reacci¨®n de Espa?a (22-29) llev¨® a Ambros Mart¨ªn a pedir tiempo muerto para evitar deslices. A la desesperada, Carlos Viver orden¨® jugar sin portera, en un siete contra seis, pero el remedio fue peor que la enfermedad porque los constantes fallos (18 p¨¦rdidas totales) fueron castigados por Rusia con goles de lado a lado de la cancha. Fue la primera derrota de Espa?a en este campeonato y casi cuesta unas semifinales.?