Mireia pide agua
Las normas de desescalada amenazan la carrera de la mejor deportista espa?ola de la historia. ¡°No entiendo que Messi pueda entrenar y ella no¡±, dice Fred Vergnoux, su t¨¦cnico
Trat¨¢ndose de la Fase 0 de la desescalada en la lucha contra el nuevo coronavirus, todas las piscinas comparten la misma naturaleza para el Gobierno de Espa?a. Lo mismo la alberca de una comunidad donde se ba?an los hijos de los vecinos, que el monumental vaso de 50 metros del CAR de San Cugat donde sol¨ªa nadar Mireia Belmonte, la mejor deportista espa?ola de la historia. Solo en la Fase 1 el Consejo Superior de Deportes permite abrir los Centros de Alto Rendimiento, haciendo una excepci¨®n a la orden emitida el s¨¢bado por el Ministerio de Sanidad para la transici¨®n hacia ¡°la nueva normalidad¡±, cuyo Art¨ªculo 41.3 se?al¨® que en la Fase 1 se abrir¨¢n las instalaciones deportivas pero quedar¨¢n excluidas ¡°las piscinas y las zonas de agua¡±.
Este igualitarismo, esta falta de discriminaci¨®n, indign¨® al equipo de nataci¨®n espa?ol que hasta el 13 de marzo prepar¨® los Juegos de Tokio y desde entonces se confina en seco y ejercita el cuerpo a base de estiramientos, pilates, pesas y charlas con sus entrenadores v¨ªa Zoom.
El m¨¢s indignado de todos es el entrenador jefe, Fred Vergnoux, que llevaba semanas rumiando su descontento con todos los l¨ªderes pol¨ªticos de Europa Occidental, y que este martes despach¨® su malestar durante una charla online organizada por el Banco de Santander. ¡°Puedes ir a tomarte una cerveza a un bar, pero una campeona ol¨ªmpica como Mireia no puede ir a entrenar¡±, dijo Vergnoux, enumerando agravios. ¡°Me gusta mucho el f¨²tbol. Pero no puedo entender que Messi pueda entrenar y Mireia no¡±.
Doble medallista ol¨ªmpica en Londres en 2012, campeona mundial en 2013 y 2017, y campeona ol¨ªmpica en R¨ªo en 2016, la badalonesa Mireia Belmonte se dispon¨ªa con 29 a?os a portar la bandera de la delegaci¨®n nacional en la ceremonia inaugural de los Juegos de Tokio, el pr¨®ximo verano. Viv¨ªa embarcada en esa empresa cuando la pandemia de coronavirus puso un gigantesco interrogante al futuro de su carrera. Desde el 13 de marzo, cuando abandon¨® de madrugada el Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada en una furgoneta, no ha vuelto a tocar el agua de una piscina.
Messi, como Mireia, es vecino de Barcelona, sometida igual que Madrid a las restricciones propias de la Fase 0. Pero Messi, como cualquier futbolista de un club domiciliado en una regi¨®n donde todav¨ªa no se ha establecido la ¡°nueva realidad¡± de la Fase 1, puede entrenarse individualmente en las instalaciones de su club. Para que los nadadores ol¨ªmpicos puedan volver a sumergirse, deber¨¢n hacerlo en piscinas de Centros de Alto Rendimiento siempre que se declare la Fase 1. Madrid, Barcelona y Granada, sedes de los principales CAR, permanecen en Fase 0.
¡°Inexplicablemente¡±
Aturdido por la burocracia, Fernando Carpena, presidente de la federaci¨®n espa?ola de nataci¨®n, fue el primero en quejarse, el domingo pasado, en un v¨ªdeo casero: ¡°La publicaci¨®n de la orden del Ministerio de Sanidad excluye, sorprendente e inexplicablemente, la apertura de las piscinas y espacios acu¨¢ticos. Nos resulta inexplicable porque se autorizan otras actividades que implican mayor riesgo que la pr¨¢ctica de la nataci¨®n (¡). Solicitamos a las autoridades que reabra las piscinas a la mayor brevedad posible¡±.
En Italia el Gobierno autoriz¨® el regreso a los entrenamientos de deportes individuales de car¨¢cter profesional ¡ªcon especial ¨¦nfasis en la nataci¨®n¡ª una semana antes que el f¨²tbol. En Espa?a el f¨²tbol abre la marcha a pesar de que sus plantillas necesitan movilizar a muchas m¨¢s personas. Un portavoz de la federaci¨®n de nataci¨®n no se explicaba ayer el criterio seguido: ¡°Creemos que el Gobierno piensa en las piscinas de las comunidades de vecinos m¨¢s que en el alto rendimiento. Nosotros seguimos estando igual que el 13 de marzo cuando se declar¨® el estado de alarma¡±.
Tanto Carpena como Vergnoux advierten de que los entrenamientos permitir¨ªan a los nadadores mantener una distancia m¨ªnima de dos metros, y que adem¨¢s lo har¨ªan sumergidos en un poderoso desinfectante. El agua de las piscinas tiene cloro ¡ªhipoclorito de sodio o lej¨ªa¡ª y el cloro mata al virus, como advierte el informe del 5 de mayo elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas Sobre la Transmisi¨®n del SARS.Cov-2 en Playas y Piscinas.
Numerosos nadadores de primer nivel han dejado de entrenarse en todo el mundo, salvo en pa¨ªses como Suecia, Australia, Jap¨®n y algunos Estados de los Estados Unidos, como Florida. En Espa?a, seg¨²n Vergnoux, se baten todos los r¨¦cords de la restricci¨®n. ¡°Estamos en la novena semana sin piscina; es una situaci¨®n que no conocemos¡±, dijo el t¨¦cnico, que alert¨® sobre un lastre dif¨ªcil de superar para Mireia. ¡°Nunca un nadador ha estado tanto tiempo fuera. La gente que vive al lado del mar puede ir a nadar. Mireia vive en Barcelona. Lo ha intentado pero el agua est¨¢ a 17 grados y no tiene traje de neopreno¡±.
¡°Buscamos que el impacto sea el m¨ªnimo posible al volver¡±, indic¨® el t¨¦cnico franc¨¦s. ¡°A nivel de fuerza espec¨ªfica, el contacto con el agua es una locura. Para un nadador, una semana sin agua equivale lo que para un atleta ser¨ªa un mes sin entrenar. Perdemos a la semana m¨¢s de 800 kil¨®metros de nado. Lo compensamos intentando ganar flexibilidad, fuerza en el tronco, y potencia¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.