Ferrari se arrastra

Ferrari se arrastra por la pista literalmente como qued¨® claro el fin de semana pasado en el Red Bull Ring. En otras circunstancias, el equipo italiano habr¨ªa brindado para celebrar la segunda posici¨®n que le llovi¨® de la nada a Charles Leclerc. Sebastian Vettel, que finaliz¨® el d¨¦cimo, las pas¨® canutas para mantenerse dentro de los l¨ªmites del asfalto e incluso tuvo un encontronazo con Carlos Sainz que le encar¨® hacia el tendido. ¡°Estoy contento de haber hecho un solo trompo porque perd¨ª el tren trasero varias veces¡±, dijo el alem¨¢n.

Las caras de la tropa de Maranello al terminar la primera carrera del a?o denotaban cierta angustia por la constataci¨®n que el cron¨®metro hizo de la realidad: el nuevo Ferrari es m¨¢s lento que el de la temporada pasada. La p¨¦rdida es dram¨¢tica seg¨²n reconocen los propios ingenieros de la ¡®Scuderia¡¯ porque se da en las rectas y tambi¨¦n en las curvas, un indicativo de la flojera del SF1000 a todos los niveles, tanto en lo relativo al motor como en la parte del chasis. Grosso modo, el retraso respecto de Mercedes es de alrededor de un segundo, o sea, una eternidad. ¡°Perdemos unas siete d¨¦cimas en recta y unas tres d¨¦cimas en las curvas. En parte porque hemos perdido potencia de propulsor, pero tambi¨¦n porque nuestro coche presenta un problema a nivel aerodin¨¢mico que tratamos de resolver¡±, afirmaba tras la carrera de este domingo Mattia Binotto, directos de los b¨®lidos rojos. Traducido: la ¨²nica forma de mantener el veh¨ªculo pegado al suelo es a base de aumentar sus niveles de carga aerodin¨¢mica, pero en este caso eso le frena en las rectas.

Probablemente, la mejor coyuntura para analizar el rendimiento real de un monoplaza haya que buscarlo en la sesi¨®n cronometrada de ensayos del s¨¢bado. Y los n¨²meros del prototipo que este a?o conducen Leclerc y Vettel fueron decepcionantes en Austria. En la misma cita del a?o pasado, el monegasco alcanz¨® los 325,7 kil¨®metros por hora en la vuelta de la Q3 que le llev¨® hasta la ¡®pole position¡¯. Esta vez no pas¨® de los 312,4 km/h, cosa que le dej¨® muy lejos de los dos Mercedes, los que ofrecieron una mayor velocidad punta (322,5 km/h de Hamilton y 321,6 km/h de Bottas, el ganador). En un trazado como el de Spielberg, presidido por tres rectas, una de ellas en subida, y en el que solo hay 10 curvas, que Leclerc fuera capaz de maquillar esa falta de contundencia y se las apa?ara para terminar el segundo es poco menos que un milagro.

Hace solo unos d¨ªas, Ferrari aseguraba que no ser¨ªa hasta la tercera prueba del calendario, dentro de dos semanas, en Hungr¨ªa, donde introducir¨ªa el primer gran paquete de mejoras. Sin embargo, el bochorno vivido en Austria podr¨ªa acelerar la llegada de esa actualizaci¨®n, o al menos de parte de ella. El quid de la cuesti¨®n es adivinar si esos problemas de correlaci¨®n de datos que hay entre la informaci¨®n que ofrece el t¨²nel de viento y la que despu¨¦s se obtiene en pista, se han podido corregir en las pr¨®ximas semanas. La falta de m¨²sculo de la unidad de potencia es incluso m¨¢s dif¨ªcil de resolver, b¨¢sicamente porque parece que su origen hay que buscarlo en los distintos matices que la Federaci¨®n Internacional del Autom¨®vil (FIA) a?adi¨® al reglamento t¨¦cnico.

Y en estas que el domingo que viene la parrilla de salida volver¨¢ a formase en el Red Bull Ring para afrontar el Gran Premio de Estiria. Bien har¨¢n las mentes pensantes de Maranello en sacarse algo de la chistera porque la carambola que hizo que Ferrari se encontrara en el podio gracias a la habilidad de Leclerc dif¨ªcilmente se repetir¨¢.