Ganna se exhibe de nuevo y Almeida refuerza su rosa

¡°?Un p¨¢jaro? ?Un avi¨®n? No, es solo Indurain¡±.

El 14 de julio de 1992, el New York Times titul¨® as¨ª su cr¨®nica de la contrarreloj de Luxemburgo del Tour, y viendo ?volar? A Filippo Ganna sobre las colinas dulces del prosecco m¨¢s de 28 a?os m¨¢s tarde entran ganas de robarle la cr¨®nica al venerable periodista Samuel Abt, quien precisaba que los ¨²ltimos minutos en los que hab¨ªa estado oculto a la vista Indurain los hab¨ªa pasado en una cabina telef¨®nica poni¨¦ndose el maillot que le convertir¨ªa en superciclista, y dedic¨¢rsela al joven italiano, campe¨®n del mundo de contrarreloj, un grandote que pedalea con clase y gracia, con t¨¦cnica perfecta de pistard para quien el pi?¨®n fijo es lo m¨¢s natural, y solo asusta por la velocidad con la que asciende, casi siempre sentado, un muro de un kil¨®metro, y deja con la boca abierta su pedaleo suave, su elevada frecuencia (m¨¢s de 100 pedaladas por minuto, siempre), la inmovilidad de su busto, la facilidad aparente, ganada en la escuela del sufrimiento, con la que se sobrepone al dolor de piernas, a la subida acelerada del ¨¢cido l¨¢ctico en sus m¨²sculos. Como un deportivo de lujo de motor ronroneante, as¨ª es el combo gatuno que combina Ganna con su Pinarello de titanio y hermosa, fabricada ah¨ª al lado de su vuelo, en Treviso. Y tambi¨¦n Indurain volaba en Pinarello, de Treviso, y en su Espada bati¨® un r¨¦cord de la hora rindiendo a 550 vatios. Y nadie puede llevar la contraria a todos los que afirman que ser¨¢ Ganna, precisamente, el pr¨®ximo plusmarquista de la hora. Es la tercera victoria de etapa del gigante italiano, dos contrarrelojes y la monta?a de Calabria una tarde oscura y de lluvia.

Es, quiz¨¢s, un sacrilegio comparar con Indurain en su gloria camino de su segundo Tour y dejando al segundo a tres minutos con Ganna, 24 a?os, 1,95m, 83 kilos, y toda la carrera ciclista por delante, pero es inevitable, porque no es dif¨ªcil dar con otra referencia para el ciclista del futuro, que ya es Top Ganna para la Italia que le adora y que sufre viendo s sus viejos, a Nibali, a Pozzovivo, resistiendo sin brillo, dejando el Giro siempre para el d¨ªa siguiente.

Comparar tanto a Ganna, novato en las pruebas de tres semanas, con Indurain, adem¨¢s de por sacrilegio podr¨ªa ser tambi¨¦n tomado por una falta de respeto a Joao Almeida, que no es Top Ganna sino Fast and Furious, las pelis que le pierden y le gu¨ªan, y con ese esp¨ªritu, el de la b¨²squeda cotidiana de todos los l¨ªmites corre, a los 22 a?os, su primer Giro, su primera carrera de m¨¢s de nueve d¨ªas, y llega al d¨ªa 14? vestido de rosa, como viste desde el cuarto, y florece en el Ca' del Poggio, el muro que descorazona y machaca a todos, y aunque despu¨¦s baja un poco el r¨¦gimen de su motor, acelera al final, y no gana la etapa (llega a minuto y medio de Ganna, que roza los 48 por hora en un recorrido dur¨ªsimo de casi tres cuartos de hora), pero, como se sospechaba, es el mejor de todos los que piensan en ganar el Giro, y creen en sus posibilidades. Saca 17s a Kelderman (y el holand¨¦s es el ¨²nico que en la general se mantiene a menos de un minuto del portugu¨¦s de Caldas da Rainha), 1m 6s a Majka, 1m 23s a Nibali y Pello Bilbao, que se mantiene tercero en la general, pero ya a 2m 11s de Almeida. Y Fuglsang ya est¨¢ a m¨¢s de 4m en la general.

Pello Bilbao: ¡°Podemos estar contentos¡±

Pello Bilbao, de Gernika, 22?, a 2m 53s de Ganna, reconoce que quiz¨¢s no fue su mejor d¨ªa contrarreloj pero que estaba satisfecho. ¡°Podemos estar contentos¡±, dice el l¨ªder del Bahr¨¦in. ¡°Hemos hecho un buen trabajo, he regulado el esfuerzo como hab¨ªa planeado y mantengo la tercera posici¨®n. Es una buena posici¨®n para seguir peleando, para ver qui¨¦n es el m¨¢s regular en la dura semana que viene¡±.

La dura ¨²ltima semana comienza este domingo con la subida a Piancavallo (14 kil¨®metros al 8%), ya en el Friuli, donde termina la 15? etapa despu¨¦s de tres segundas previos. All¨ª, en 1998, Marco Pantani empez¨® a doblegar a Z¨¹lle y a ganar su Giro, y all¨ª, en 2017, cuando Dumoulin pudo con Nairo, Pello Bilbao particip¨® en la gran fuga que culmin¨® con la victoria de su amigo Mikel Landa.

Clasificaciones del Giro de Italia.