Marcos Llorente y Mario Hermoso como catarsis
Los exmadridistas son puestos como ejemplos por Simeone y han sido clave en el cambio del juego rojiblanco
El recorrido hasta llegar a lo que la revista argentina El Gr¨¢fico llev¨® a titular en un reportaje El arte de armar un equipo est¨¢ plagado de vericuetos que van desde la l¨®gica m¨¢s aplastante hasta las decisiones m¨¢s insospechadas de los entrenadores. Aquellas p¨¢ginas del prestigioso semanario, centradas en la Argentina campeona del mundo en M¨¦xico 86, relataban c¨®mo el seleccionador, Carlos Salvador Bilardo, termin¨® por cuadrar su once situando al diestro Olarticoechea como carrilero izquierdo y a Cuciuffo como tercer central por la derecha para pasar del 4-3-1-2 con el que inici¨® el torneo al 5-3-2 con el que acab¨® conquist¨¢ndolo. El art¨ªculo relataba otros ejemplos: el origen de La M¨¢quina de River Plate, cuando Renato Cesarini sac¨® de la banda izquierda a Pedernera para hacerle jugar de falso nueve; la gran Hungr¨ªa de los a?os 50 al retrasar Gustav Sebes al delantero centro Hidegkuti, para armar el juego junto a Bozsik; la funci¨®n similar que desempe?¨® Di St¨¦fano en River, cuando le toc¨® reemplazar a Pedernera, y luego en el Madrid.
En el camino para encontrar un equipo m¨¢s ofensivo y el nuevo dibujo, Marcos Llorente y Mario Hermoso han resultado decisivos para la catarsis. Ambos exmadridistas son expuestos como ejemplos por Simeone y el club de c¨®mo se puede pasar de futbolista residual a imprescindible. Sus casos son anacr¨®nicos, pero han marcado dos puntos de inflexi¨®n en la configuraci¨®n del l¨ªder.
La explosi¨®n de Llorente se gest¨® en el tramo final de la temporada pasada, unas semanas antes de convertirse en el h¨¦roe de Anfield. Por entonces, al mal juego del equipo se le sumaba una ca¨ªda en la intensidad sin precedentes en la era Simeone. En el club se preguntaban por qu¨¦ un jugador por el que se hab¨ªan desembolsado cerca de 40 millones de euros apenas contaba para el entrenador. Simeone no le ve¨ªa como mediocentro, posici¨®n para la que fue fichado como sustituto de Rodri. En cada decisi¨®n que el t¨¦cnico tom¨® para encontrarle una demarcaci¨®n procur¨® alejarle del eje del medio y de la iniciaci¨®n. Antes que el gol, Simeone encontr¨® en Llorente una raz¨®n f¨ªsica para darle cabida en el once: ¡°Marcos nos da una vitalidad y una energ¨ªa que el equipo no tiene y necesita¡±, justificaba el entrenador.
Gol y salida del bal¨®n
Con todo, el Cholo a¨²n no terminaba de verle como el futbolista que sostiene la confianza del equipo para presionar arriba tal y como el Atl¨¦tico hace ahora. ¡°A m¨ª me invita a presionar arriba cualquier jugador, pero el rival tambi¨¦n juega¡±, defend¨ªa el preparador argentino. Entre la presi¨®n de la dirigencia y la necesidad de buscarle acomodo en el once, Simeone opt¨® por situarle como delantero por el disparo a puerta que le hab¨ªa detectado en los entrenamientos.
¡°Se le ve¨ªa en el d¨ªa a dia que ten¨ªa esa facilidad para el gol. El segundo que le hace al Liverpool, salvando las distancias y que el suyo fue desde fuera del ¨¢rea, por c¨®mo se hizo el espacio para rematar, me record¨® al del Torpedo M¨¹ller en la final del 74 ante Alemania y Holanda¡±, comenta Germ¨¢n Burgos, exayudante de Simeone.
Adem¨¢s del gol (cinco tantos en lo que va de curso), Simeone ha reforzado as¨ª la parcela defensiva que debe asumir Trippier, ha instaurado la presi¨®n adelantada y ha encontrado profundidad por la sociedad que ha formado en ataque con el lateral ingl¨¦s.
El caso de Hermoso tambi¨¦n responde al de otra inversi¨®n elevada (25 millones de euros) que en sus primeros meses no terminaba de convencer al t¨¦cnico. Ese es al argumento que utiliz¨® este verano el club para convencerle, ante el inter¨¦s de la Real, de que su permanencia respond¨ªa a una apuesta seria de la direcci¨®n deportiva y del propio Simeone, Su estilo arriesgado en la salida de bal¨®n le penalizaba sobremanera en un equipo en el que hasta este curso los centrales ten¨ªan poco que decir en el inicio del juego. Todo lo contrario que ahora.
Hermoso es el jugador rojiblanco que m¨¢s pases da por partido (70) por delante de Koke (59). La salida de bal¨®n del equipo se inclina hacia su zona. El mi¨¦rcoles, ante la agobiante presi¨®n del Salzburgo, sus compa?eros le buscaban como escape. ¡°Se nota que ahora tiene la confianza del entrenador y de sus compa?eros para sacar el bal¨®n. Sobre todo tiene un golpe para el cambio de juego muy bueno¡±, dice Luiz Pereira, una instituci¨®n rojiblanca entre otras virtudes por sus acciones temerarias para salir con el bal¨®n jugado.
El anclaje de Hermoso como tercer central tambi¨¦n respondi¨® a la necesidad de Simeone de encontrar el equilibrio entre el mejor ataque que practica el equipo y las debilidades defensivas que luci¨® en M¨²nich (4-0). Desde entonces, Hermoso se ha convertido en indiscutible. Su arisco car¨¢cter forjado en los barrios de San Blas y de la Concepci¨®n comienza a tener aires de cacique en la caseta, donde Marcos Llorente, por amistad, es su gran valedor.
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