El Bar?a se libera en Valladolid
Koeman prescinde de Griezmann y Coutinho, apuesta por tres centrales y el equipo agradece la profundidad de los laterales convertidos en extremos, as¨ª como la sociedad Messi-Pedri
Abrazado a la pareja Messi-Pedri y con Coutinho y Griezmann de espectadores, el Bar?a dej¨® de ser el peor visitante de LaLiga. La situaci¨®n azulgrana es tan apurada que victorias como la alcanzada en campo de un equipo en zona de descenso como el Valladolid suenan a gloria despu¨¦s de perder en C¨¢diz y Getafe y empatar con el Alav¨¦s. No ganaban los barcelonistas en cancha ajena desde el 1 de octubre en Vigo. La victoria fue tan terap¨¦utica como c¨®moda para el equipo de Koeman. Jug¨® el Barcelona de manera seria y tranquila, sin ninguna concesi¨®n, muy bien orientado por Messi, al que se vio m¨¢s liberado que nunca, solo asociado con el omnipresente Pedri.
La excelente sinton¨ªa del d¨²o Messi-Pedri compromete a la pareja Griezmann-Coutinho despu¨¦s de que no haya habido un partido igual del Bar?a. El plan ha estado a expensas del contrario, del campo, del d¨ªa y de circunstancias como la clasificaci¨®n y el resultado de la jornada anterior, convencido como est¨¢ Koeman de que se impone la terapia de choque para levantar al equipo, apremiado por la velocidad del Atl¨¦tico y el Madrid. Ataca el Valladolid con dos delanteros y el Barcelona puso a tres centrales, invit¨® a los laterales a jugar de extremos para ensanchar la cancha y ganar profundidad y libr¨® a Messi de la sombra de Griezmann y Coutinho.
Un plan estable
Una formaci¨®n para empezar parecida al fin y al cabo a la que acab¨® el partido con el Valencia. Tampoco ha habido t¨¦cnico que con el tiempo no haya acabado por dudar de Coutinho, prescindido de Busquets y dejado a Griezmann en el banquillo, como si el Bar?a no parara de dar vueltas a una rotonda desde que prescindi¨® de Valverde. Las novedades de la temporada son los centrales Ara¨²jo y Mingueza, as¨ª como el exquisito Pedri, y la sorpresa en Zorrilla fue la presencia de Pjanic, un futbolista canchero que juega a uno o dos toques, acostumbrado a ser protagonista en la Juve, muy puesto en Valladolid.
Las sensaciones mejoraron desde el inicio en el bando azulgrana porque el equipo ten¨ªa amplitud y Messi se sent¨ªa m¨¢s c¨®modo, asociado siempre con Pedri y buscado por De Jong, muy conductor y llegador, resguardado en el doble pivote por Pjanic. Las ocasiones, sin embargo, escaseaban por la poca precisi¨®n en el pase la falta de remate del Bar?a. El ¨²nico que chutaba y templaba era Messi. Y el 10 centr¨® por fin a pedir de boca para la cabeza de Lenglet despu¨¦s de recibir, naturalmente de Pedri, a la salida de un c¨®rner forzado por el disparo de Messi: 0-1.
A favor de marcador, exigido como se hab¨ªa sentido en hasta nueve partidos anteriores que empezaron con un gol en contra, el Bar?a gobern¨® el juego, concentrado en defensa por la autoridad de Ara¨²jo, el buen repliegue colectivo y siempre afilado con Jordi Alba y Dest. El lateral derecho se ofrec¨ªa reiteradamente y Messi dominaba con autoridad el frente de ataque, decisivo tambi¨¦n en el 0-2. El 10 recibi¨® de primeras de Pjanic, se gir¨® y abri¨® para Dest, y su centro lo emboc¨® Braithwaite. No hab¨ªa noticias del Valladolid, sorprendido Sergio Gonz¨¢lez por la propuesta de Koeman.
El t¨¦cnico del equipo pucelano se corrigi¨® en el descanso cuando cambi¨® a cuatro futbolistas pr¨¢cticamente de golpe para aumentar la velocidad y agresividad de su equipo y competir mejor contra el Bar?a. A partir de la presi¨®n, el Valladolid exigi¨® defensivamente a los azulgrana, demasiado relajados, confiados por la superioridad ofensiva del d¨²o Pedri y Messi. Las roscas del 10 siempre encontraban como respuesta los dedos de Masip. Hasta que el capit¨¢n pudo enfocar al portero despu¨¦s de un excelente control y cruzar el bal¨®n a la red: 0-3. El taconazo de Pedri, siempre virtuoso en el ¨²ltimo pase, exig¨ªa una definici¨®n como la de Messi, que le sit¨²a un gol por encima de Pel¨¦.
Asegurado el triunfo, Koeman empez¨® la rueda de cambios que sirvi¨® sobre todo para dejar en evidencia a Umtiti y comprometer a Ter Stegen. El meta estuvo excelente en dos tiros de Kike P¨¦rez y Orellana y sell¨® su porter¨ªa para satisfacci¨®n de Koeman. El portero ha sido el jugador m¨¢s fiable de un equipo que no ha parado de experimentar en las distintas l¨ªneas, y muy especialmente en el ataque, siempre en busca de contentar a Messi, que cerr¨® el encuentro con un tiro al palo derecho de Masip.
Al 10, que se retir¨® con el brazo derecho dolorido, se le vio suelto y alegre con Pedri y sin Griezmann y Coutinho despu¨¦s del cambio de dibujo de Koeman. Aunque el partido result¨® demasiado sencillo para grandes conclusiones, el Bar?a se vio m¨¢s libre que nunca en Valladolid.
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