Empate de conveniencia en El Sadar

Si la fe mueve monta?as, el Chimy ?vila podr¨ªa desplazar una cordillera cuando le llega un bal¨®n en campo contrario. Por el argentino pasan los ataques de un Osasuna que va hacia arriba sin miedo y que provoc¨® que Sergio, t¨¦cnico blanquivioleta, volviera a cerrar con una defensa de cinco, sistema que afianz¨® al Valladolid en el tramo final de la temporada pasada. La igualdad inicial se bas¨® en la mayor presencia rojilla ante un Pucela bien plantado pero que ca¨ªa en fuera de juego cuando rondaba a Herrera. El meta de Osasuna tard¨® media hora en intervenir para rechazar un disparo cruzado de Guardiola. Poco antes, el cancerbero visitante tap¨® una buena llegada del equipo de Arrasate.

La situaci¨®n en la tabla de ambos conjuntos, m¨¢s desahogados que lo previsto en agosto, pero sabedores de la importancia de seguir sumando para alejarse de la quema, ofreci¨® una primera parte equilibrada que no pudo completar el lesionado Oier. Olivas s¨ª pudo superar una brecha en la cabeza, aunque necesit¨® visitar el banquillo varias veces para que se la vendaran. Los locales no pudieron superar el bloque planteado por los castellanos, cuyos carrileros imped¨ªan a Osasuna dejar descubierta la espalda.

El segundo periodo comenz¨® vibrante bajo la lluvia con una mano tremenda de Herrera a un remate a la remanguill¨¦ de ?nal. El turco, h¨¢bil para recibir entre l¨ªneas, precedi¨® una clara ocasi¨®n de Guardiola que escupi¨® el larguero tras elevar el bal¨®n sobre Herrera. El Chimy ?vila no quiso ser menos y con una arrancada en la que avanz¨® gracias a su tozudez y a un genial gesto t¨¦cnico, hizo esforzarse al m¨¢ximo al tit¨¢nico Salisu para interrumpir la escaramuza desde el suelo.

El Sadar se hizo notar en el tramo final al pedir mano en un rechace que impact¨® en el rostro de Joaqu¨ªn. Los tres puntos valen mucho cuando se trata de gan¨¢rselos a un rival directo por la permanencia. La afici¨®n navarra lo sabe y empuj¨® a los suyos contra un Valladolid paciente y contundente ante un aluvi¨®n de c¨®rners. ?vila, c¨®mo no, provoc¨® el ¡°?Uy!¡± m¨¢s sonoro tras un rechace desde la esquina.

As¨ª termin¨® un partido ¡°perfecto¡± para Bilardo, pues la ausencia de errores impidi¨® goles, y no tan malo para ambos entrenadores. El caso es no dejar de puntuar para seguir en Primera.