Papu G¨®mez: ¡°Con una gambeta se abre un mundo¡±

Alejandro Papu G¨®mez (Buenos Aires, 1988) se cri¨® en Independiente, se hizo profesional en el Arsenal de Sarand¨ª y desapareci¨® futbol¨ªsticamente en el Metalist de J¨¢rkov, en la guerra civil de Ucrania. Reapareci¨® en B¨¦rgamo, en el Atalanta, que lo fich¨® en 2014 por cuatro millones de euros. Se convirti¨® en un mito local y hoy es su capit¨¢n. Parece solo un futbolista cuando recibe a su visita aposentado en un despacho del centro deportivo de Zingonia, entre cajas de material, pizarras y botellas. Pero es el cham¨¢n que todo lo ve.

Pregunta. El Atalanta es el equipo m¨¢s goleador de la Serie A con 63 goles a favor, 17 m¨¢s que la Juve. ?C¨®mo lo explica?

Respuesta. Tenemos una forma at¨ªpica de jugar en Italia, especialmente trat¨¢ndose de un equipo provincial como nosotros, pero nos da resultados desde hace a?os. Nos ha llevado a la Europa League despu¨¦s de 30 a?os, a una final de Copa Italia, a clasificarnos para Champions por primera vez, y a estar siempre en la pelea con los grandes.

P. Gasperini dice que en Italia existe una obsesi¨®n por la simetr¨ªa en la ocupaci¨®n regular del campo, y que eso es bueno para el orden defensivo pero malo para atacar. ?C¨®mo alienta el atrevimiento?

R. Quiere incluso que los defensores arriesguen un pase interno, que filtren l¨ªneas. Y, claro, a nosotros en ataque nos da toda la libertad. Pero eso va en m¨ª: yo s¨¦ que tengo que arriesgar. La gambeta es lo m¨ªo. Y yo s¨¦ que haci¨¦ndolo rompemos l¨ªneas. Si yo me saco un tipo de encima se abre un mundo. Y m¨¢s en Italia, donde los partidos son muy t¨¢cticos, todos basculan, con dos l¨ªneas de cuatro, con ocho tipos defendiendo. Si no rompes eso puedes estar tocando toda una vida, pero no romper¨¢s ning¨²n esquema.

P. ?Entonces cu¨¢l es el esquema del Atalanta?

El Valencia quer¨ªa al Atalanta y el Atalanta al Valencia. Seguramente nos han subestimado. Pero, claro, si nos hubiera tocado el Liverpool habr¨ªamos necesitado algo milagroso para pasar

R. La idea es jugar con l¨ªnea de cinco defensas pero los esquemas son mentirosos. Podemos decir que jugamos con l¨ªnea de tres zagueros centrales pero al fin y al cabo terminamos jugando con dos, mano a mano atr¨¢s. Porque el central que sale con la pelota siempre termina atacando para buscar una superioridad num¨¦rica. En fase defensiva podemos decir que defendemos con cinco, pero si un lateral-volante sale alto el otro cubre y realmente quedan cuatro.

P. Y atr¨¢s se quedan uno contra uno con los atacantes rivales¡­ Situaciones impensables en el f¨²tbol italiano tradicional.

R. Nosotros sabemos que arriesgamos el contragolpe del rival. Pero eso nos da m¨¢s beneficios que problemas. Por eso marcamos tantos goles. Preferimos arriesgar de esa manera y no estar todos metidos atr¨¢s, no ver la pelota jam¨¢s, esperar una situaci¨®n de contragolpe¡­ Puedes defender con diez atr¨¢s. Pero sin capacidad de contraste, sin morder ni presionar, el d¨ªa que te agarra un equipo con cuatro jugadores de calidad te entran por todos lados. Es nuestro planteamiento contra la Juventus: si empiezas a morderlos, si no los dejas girar, si los obligas a jugar de espaldas, el que es fen¨®meno termina por ser un jugador m¨¢s normal. Porque empieza a errar, porque tiene la marca siempre encima. Nosotros jugamos mejor cuando nos esperan encerrados atr¨¢s. ?Es normal! Si cada vez que la agarro me dejas mirar, y mirar, y mirar, y mi marcador me espera ah¨ª y nunca me viene a sacar la pelota, yo la meto donde quiero. Cualquier jugador con una buena t¨¦cnica la mete donde quiere.

P. ?Por qu¨¦, teniendo jugadores altos como Ilicic o Zapata, omiten el pase largo y prefieren elaborar?

R.Gasperini en el Genoa hizo lo mismo y le fue muy bien. ?l mam¨® del f¨²tbol del Ajax, del Bar?a de Guardiola. Cree mucho en su m¨¦todo y en la l¨ªnea de tres: 3-4-3, 3-4-1-2¡­Fuimos mutando. Hoy yo juego de enganche detr¨¢s de los dos puntas, tir¨¢ndome un poquito m¨¢s atr¨¢s para darle salida al equipo; pero tambi¨¦n aparezco como atacante, o como falso nueve. Depende del rival. Si nos juegan con l¨ªnea de tres, nosotros jugamos con tres delanteros, tres contra tres en ataque.

P. ?Ese caos que tratan de generar arriba es una forma de protecci¨®n atr¨¢s?

R. Los rivales se ven tan desacomodados que la pelota nos vuelve a nosotros. El Inter ten¨ªa solo una jugada: sale de atr¨¢s, juega de defensor central a lateral volante, y de lateral volante de primera a los delanteros, Lukaku y Lautaro. Uno va a aguantar y el otro le juega atr¨¢s. Y ah¨ª el equipo sale. Nosotros les jug¨¢bamos con nuestros dos centrales mano a mano con Lukaku y Lautaro. Y les recuper¨¢bamos pelota y los atac¨¢bamos. Preferimos arriesgar de esa manera sabiendo que les crear¨ªamos diez situaciones de gol. Y que tal vez har¨ªamos dos o tres. Con un poco de suerte gan¨¢bamos. De tanto ir te sale un penalti, un tiro libre desde fuera del ¨¢rea, un rebote, un gol. Al fin y al cabo¡­ Hemos hecho m¨¢s de 150 goles en un a?o y medio. No es casualidad. Tiramos una media de 15 veces al arco por partido.

P. Los regateadores naturales como usted, aqu¨ª en Europa suelen ser aventureros individualistas. ?Su tarea es m¨¢s unir que romper?

Si me tiro atr¨¢s agarro la pelota solo porque el cinco no viene a buscarme, porque deja todo un hueco a su espalda. Y si viene, espectacular, le dejo toda la zona a los delanteros

R. La palabra que me viene a la mente es italiana: convolgere. ?Envolver! Cuando envuelves a todo el equipo, cuando haces participar a todos... Yo s¨¦ que soy importante por mi forma de jugar como lo es Ilicic, que tal vez te dribla a uno y entonces se abre todo; pero yo s¨¦ que aqu¨ª tambi¨¦n son muy importantes los laterales-volantes, que uno tira el centro y el otro llega al gol en la misma jugada. Igual que los dos mediocentros, uno para llegar al remate y el otro para buscar el equilibrio. Incluso los centrales llegan al gol. Toloi, el defensor central derecho, tiene cuatro asistencias. Porque llega con pelota dominada cerca del ¨¢rea rival y busca el pase interior.

P. ?C¨®mo fue su paso de extremo gambeteador a organizador general del juego del equipo?

R. Fue un crecimiento. Yo nac¨ª como enganche en las inferiores de Arsenal. Pero en el f¨²tbol argentino cada vez se jugaba menos con enganche y por mi f¨ªsico pas¨¦ a ser una segunda punta detr¨¢s del t¨ªpico nueve grandote, Calder¨®n, Facundo Sava, Mauro ?bolo¡­ Era un 4-4-1-1 en el que yo me mov¨ªa por todo el frente de ataque. Hasta que en San Lorenzo el Cholo [Simeone] me tir¨® a la banda y me dijo: ¡°Vos vas a ir a Europa y por tu f¨ªsico no te van a poner detr¨¢s de la punta, te van a poner como externo¡±. Luego en el Catania ¨¦l me puso de extremo en el 4-3-3. Y ah¨ª hac¨ªa toda la banda porque cuando defend¨ªamos era 4-5-1. ?Qu¨¦ pas¨®? Que vine aqu¨ª, segu¨ª en el 4-3-3 y Gasperini me volvi¨® a poner de extremo por izquierda, solo que en vez de pegarme a la l¨ªnea me movi¨® adentro. ¡°T¨² tienes que jugar entre el central y el lateral del equipo contrario, para que nuestro lateral-volante te pase y el central contrario no sepa qu¨¦ hacer, si ir a cubrir afuera o marcarte a ti¡±. Entonces yo bailaba ah¨ª. Y en el primer campeonato, el 16/17, hice 16 goles con un delantero de ¨¢rea por delante. Acostumbrado a no pasar de diez, eso fue una locura. ?Qu¨¦ sucedi¨®? Que Bryan Cristante, el enganche que pon¨ªa Gasperini, se fue a la Roma y ah¨ª qued¨® un hueco. No hab¨ªa en la plantilla nadie que lo pudiera hacer y Gasperini me dijo: ¡°Yo te veo ah¨ª, probemos¡±. Los primeros partidos me cost¨® porque en lugar de alejarme de la marca me quedaba entre los centrales y los volantes y no hab¨ªa mucho espacio para recibir. Era muy dif¨ªcil. ?Y qu¨¦ hice? Me tir¨¦ atr¨¢s. Me fui a la l¨ªnea de nuestros dos volantes. Agarro la pelota en el medio y ah¨ª siempre estoy de frente para empezar a jugar.

P. Pero si retrocede en lugar de romper una l¨ªnea, cada vez que recibe la pelota tiene que romper dos. ?Por qu¨¦ cree que desde el mediocampo es m¨¢s f¨¢cil desequilibrar?

R. Porque juego y me meto. Combinando. Para los mediocentros es dif¨ªcil agarrarme porque yo vengo de atr¨¢s, de frente, y me pierden. Entonces aparezco como delantero. Porque si me tiro atr¨¢s el cinco no viene a buscarme porque deja todo un hueco a su espalda. Y si viene, espectacular, le dejo toda la zona a los delanteros. Si no me viene a buscar la agarro solo. Cuando tienes los dos delanteros que te juegan entre el central y el lateral contrarios, entonces si est¨¢n largos ah¨ª, y se suman tus laterales-volantes, si juego para adelante y me meto es dif¨ªcil que me agarren. Un poco me lo ense?¨® Gasperini, y otro poco lo fui descubriendo en el momento.

P. Iniesta y Xavi lo hac¨ªan. ?Usted los miraba?

R. ?Sabe lo que yo miro? D¨®nde est¨¢ el ¨¢rbitro. ?Qui¨¦n es el mejor posicionado en todo el campo? ?El ¨¢rbitro! Siempre est¨¢ solo. Alejado de todo el quilombo. Casi siempre libre. Por eso yo suelo mirarlo, y me tiro donde est¨¢ el ¨¢rbitro. Haciendo cosas como esa fui perfeccionando mi nueva funci¨®n.

P. ?Ilicic es su mayor c¨®mplice?

R. Ilicic hace lo mismo que yo hac¨ªa por izquierda, pero por derecha. Tiene una calidad incre¨ªble. ?l naci¨® como extremo en un 4-3-3 solo que con mucho m¨¢s gol que yo. Y con una agilidad y una rapidez incre¨ªble para su estatura. Tiene un control de pelota excelente y con esas piernas largas se saca los tipos con facilidad. Es muy fino. Muy lindo de ver.

P. ?C¨®mo ve este duelo con el Valencia?

?Sabe lo que yo miro para encontrar espacios? D¨®nde est¨¢ el ¨¢rbitro. ?Qui¨¦n es el mejor posicionado en todo el campo? ?El ¨¢rbitro! Siempre est¨¢ solo. Alejado de todo el quilombo. Casi siempre libre

R. El Valencia quer¨ªa al Atalanta y el Atalanta al Valencia. Seguramente nos han subestimado. Hoy en d¨ªa, con toda la informaci¨®n que hay, dif¨ªcilmente puedes sorprender a un equipo. Pero, claro, antes que un PSG o un Liverpool, seguramente prefer¨ªamos este cruce. Sin duda es un rival al que podemos jugar a la par. Est¨¢ en un 50%. Si nos hubiera tocado el Liverpool habr¨ªamos necesitado algo milagroso, extraordinario, para poder pasar.

P. ?C¨®mo es posible que un jugador como usted haya desaparecido del r¨¢dar de los grandes clubes?

R. En 2013 yo hab¨ªa hecho tres a?os muy buenos en Catania. Me hab¨ªa mostrado en el f¨²tbol italiano y todav¨ªa era bastante joven, 25-26 a?os. Me quer¨ªa el Inter y tambi¨¦n el Atl¨¦tico del Cholo pero no estaban tan bien econ¨®micamente como ahora y no pod¨ªa pagar la cifra que ped¨ªa el Catania. Ofrec¨ªan seis y el Catania quer¨ªa 10. Al final, el Atl¨¦tico trajo a Villa por cuatro. Ahora est¨¢ de moda eso de no presentarse a la pretemporada, pelearse con el presidente o decir algo contra el club para que te vendan para poder salir. Yo en el Catania me considero muy querido. Nunca habr¨ªa podido hacer eso. Nosotros entramos en Europa League despu¨¦s de hacer el r¨¦cord hist¨®rico del club en Serie A, y yo sent¨ªa que mi ciclo se hab¨ªa cumplido. Entonces lleg¨® una oferta del Metalist, de J¨¢rkov: estaba jugando Champions, le peleaba el campeonato al Shaktar, hab¨ªa muchos argentinos, econ¨®micamente me serv¨ªa porque iba a ganar tres veces m¨¢s... Y dije: ¡°bueno, si no puedo ir al Atl¨¦tico, si no surgi¨® nada en Italia, al menos voy a jugar competiciones europeas y voy a ganar m¨¢s dinero¡±. No tuve esa cuota de suerte ni tampoco de maldad m¨ªa, de decir: ¡°Si no me vendes no entreno, o me hago el lesionado hasta que no me vendas al Inter¡±. No lo hice antes y no lo hice ahora en el Atalanta, en donde tambi¨¦n he tenido muchas ofertas. As¨ª me fui al Metalist donde tuve un a?o terror¨ªfico. Solo me sirvi¨® econ¨®micamente. Empez¨® la guerra en Ucrania en diciembre y yo me fui en septiembre. Pero tuve que volver a empezar, volver a hacer mi nombre en Italia en el Atalanta, que no era en ese momento el club que es hoy.

P. ?Siente que construy¨® algo de la nada?

R. Es lo que me da m¨¢s orgullo. Yo podr¨¦ decir: "No jugu¨¦ en un grande, pero pude, gracias a otra gente, construir aqu¨ª en el Atalanta el club grande que yo deseaba". Pude jugar Champions en el Atalanta, que quiz¨¢s tenga m¨¢s valor que hacerlo en un grande. Yo lo valoro much¨ªsimo porque es m¨¢s dif¨ªcil.

P. Di St¨¦fano en el Madrid, Kempes en el Valencia, Maradona en el N¨¢poles, Ag¨¹ero en el City¡­ ?Qu¨¦ tienen los argentinos que les lleva a fundar grandes dinast¨ªas en lugares extra?os?

R. En cuatro de las cinco Ligas m¨¢s importantes de Europa los m¨¢ximos goleadores extranjeros son argentinos: el Kun en Inglaterra, Batistuta en Italia, Messi en Espa?a, Delio Onnis en Francia¡­ Un poco por el car¨¢cter, por el carisma, y un poco porque estamos acostumbrados a tanto quilombo futbol¨ªstico y social en Argentina, que cuando venimos a la tranquilidad europea nos traemos toda esa presi¨®n que recogemos como experiencia y la ponemos al servicio del equipo, de la ciudad. Elevamos un poco el nivel del club y de los compa?eros con esa desesperaci¨®n por no perder nunca. Transmitimos esa pasi¨®n, esa locura. Llegan jugadores que a lo mejor no son fen¨®menos pero con esa dosis de personalidad, eso de pedir siempre la pelota sin esconderse, eso de perder y irte a tu casa enojado, tal vez eso en Europa¡­ nosotros lo mamamos muy de chicos. Esa locura te da una coraza. Que en las situaciones de presi¨®n o dificultad te ayuda a crecer.

Yo podr¨¦ decir: ¡°No jugu¨¦ en un grande, pero pude construir el club grande que yo deseaba. Pude jugar Champions en el Atalanta, que quiz¨¢s tenga m¨¢s valor que hacerlo en un grande

P. ?El paso por J¨¢rkov le mejor¨® futbol¨ªsticamente en algo?

R. ?C¨®mo es el destino y los c¨ªrculos de la vida! El ¨²ltimo partido que nos da la clasificaci¨®n para estos octavos de Champions fue en J¨¢rkov. En el estadio donde jugaba yo. Ve¨ªa que los diarios hablaban de que Papu G¨®mez volv¨ªa a J¨¢rkov a la ciudad donde sufri¨® tanto. Yo dec¨ªa: ¡°Qu¨¦ presi¨®n, todos est¨¢n esperando que el Papu la rompa donde vivi¨® mal, donde sufri¨®, donde se escap¨® de la guerra¡±. Yo dec¨ªa: ¡°Algo bueno tiene que salir de todo esto. ?No puede ser casualidad que hayamos perdido los tres primeros partidos del Grupo y despu¨¦s le empatemos al City, le ganemos al Dinamo y nos juguemos la clasificaci¨®n en el lugar donde fuiste a jugar la Champions, nos pudiste jugarla por culpa del club, y despu¨¦s de seis a?os nos juguemos la clasificaci¨®n ah¨ª en Champions con el Atalanta!¡±. Gracias a Dios hicimos un partido incre¨ªble. Seguramente el paso por Metalist me dio algo m¨¢s. Porque de verdad sufr¨ª mucho. No pod¨ªamos ba?arnos porque el agua estaba contaminada, mi mujer estaba en depresi¨®n total y se le ca¨ªa el pelo, no pod¨ªamos cocinar ni lavarnos los dientes por el agua, la guerra, un mundo desconocido¡­ Quiz¨¢s mentalmente me complet¨® como jugador. Quiz¨¢ el sufrimiento me dio m¨¢s car¨¢cter. Con los a?os vas ocupando un rol entre tus compa?eros. Ellos se apoyan mucho en m¨ª y yo trato en cualquier situaci¨®n darles una mano. Cuando el equipo est¨¢ en dificultades trato de hacerles ver: ¡°Dame la pelota a mi, no te preocupes; perdiste varias pelotas, basta, lib¨¦rate, d¨¢mela a mi que yo me encargo. Que los dem¨¢s jueguen tranquilos¡±. Prefiero errar cinco pases y que la gente se enoje conmigo a que se la agarren con otro. Porque a m¨ª no me va a afectar.

P. El Atalanta es el equipo con el presupuesto m¨¢s bajo de los octavos de final de la Champions. ?Cu¨¢l es la clave de su gesti¨®n?

R. Que nunca vendi¨® a sus mejores jugadores y rentabiliz¨® muy bien la venta de muchos j¨®venes. En los ¨²ltimos cuatro a?os el Atalanta vendi¨® por 200 millones de euros. El fichaje m¨¢s caro fue Zapata por 25 millones. Son todas compras muy calculadas, muy focalizadas en los que necesitaba. Nunca compraron por comprar y valorizaron mucho los j¨®venes, pero esto depende del t¨¦cnico. Hay t¨¦cnicos que les gusta poner j¨®venes y otros que no. El Atalanta tiene la suerte de tener a Gasperini, que tiene un ojo muy bueno para los j¨®venes. En los ¨²ltimos a?os el club vendi¨® cada temporada un joven con 30 partidos en Serie A por 20-25 millones. Ahora vendi¨® a Kulusevski por 44 millones a la Juventus y aqu¨ª jug¨® solamente 20 partidos. En este mercado de enero el Atalanta vendi¨® por 60 millones a tres jugadores que no suman 20 partidos en el primer equipo. Kulusevski estaba cedido al Parma y lo han traspasado a la Juve; Roger Ib¨¢?ez fue vendido a la Roma; y Musa Barrow al Bolonia. Ninguno de los tres era titular. La estructura no se toc¨®. El club tiene una organizaci¨®n muy buena. Con un sector juvenil que es el mejor de Italia desde hace d¨¦cadas: de aqu¨ª salieron Vieri, Montolivo, Inzaghi, Donadoni... Hay una tradici¨®n. Solo mi primero y mi segundo a?o jugamos con varios italianos en el primer equipo. Despu¨¦s los fueron vendiendo: Caldara a la Juve, Conti al Milan, Gagliardini al Inter, Cristante a la Roma¡­ Todo eso fue invertido en fichajes. Ahora somos 16-17 jugadores. A Gasperini no le gusta tener un plantel muy grande.

P. ?C¨®mo son los due?os?

R. Los Percassi son una familia con sentido de pertenencia. De B¨¦rgamo. Aman al club. Antonio y su hijo, los directivos, han sido jugadores. Viven en la ciudad. Son millonarios pero s¨²per humildes. Vienen a ver todos los d¨ªas el entrenamiento. Est¨¢n metidos en el club. Est¨¢n presentes. No como esos clubes que compraron los estadounidenses o los chinos y no se sabe qui¨¦n los maneja. Aqu¨ª los ves todos los d¨ªas en el centro deportivo.