Carlsen alimenta su pique con Nakamura y lo aplasta (3-0) en la primera manga de semifinales

A Magnus Carlsen le molesta que Hikaru Nakamura pueda ser considerado un rival de su nivel en las modalidades r¨¢pidas del ajedrez. Y tambi¨¦n que le haga la competencia en las exhibiciones de ambos en las redes sociales. Su grado de motivaci¨®n para batir al estadounidense en la semifinal del torneo r¨¢pido por internet Lindores Abbey es, por tanto, alt¨ªsimo. Y muy eficaz, de momento, porque el noruego ha ganado por 3-0 el primero de los tres duelos previstos. En la otra eliminatoria, el ruso D¨¢nil D¨²bov aventaja (2,5-1,5) al chino Liren Ding. La segunda manga se disputa este viernes.

Esta vez, el campe¨®n del mundo no ha arriesgado ni innovado. Sus tres victorias han sido tres labores muy profesionales, t¨¦cnicamente impecables, m¨¢s propias del Carlsen de hace unos a?os que del actual. Primer asalto: el escandinavo sale de la apertura con el par de alfiles en una posici¨®n din¨¢mica y los convierte en victoria como si fuera una m¨¢quina. Segundo: Nakamura no rompe el centro cuando deber¨ªa, Carlsen logra clara ventaja y la transforma en el segundo punto sin concesiones a la galer¨ªa. Tercero: el estadounidense, bajo la imperiosa necesidad de ganar, arriesga mucho con negras; Carlsen encuentra la combinaci¨®n precisa para lograr una ventaja n¨ªtida, y se acab¨®.

La explicaci¨®n de por qu¨¦ Carlsen da la impresi¨®n de que se juega much¨ªsimo en este torneo r¨¢pido es tan larga como picante, y se resume en que ambos compiten no solo en el tablero sino tambi¨¦n en las redes para ganarse el mayor fervor popular posible. Carlsen posee el 16% de las acciones del grupo Play Magnus (que hace unos meses recaud¨® inversiones por valor de 12,5 millones de euros), al que pertenece el club virtual Chess24, organizador del Lindores Abbey y del circuito entero de torneos r¨¢pidos por internet que lleva el nombre del campe¨®n. Nakamura est¨¢ mucho m¨¢s ligado con el club virtual l¨ªder desde hace a?os, Chess.com.

Hace tres semanas, Carlsen no quiso jugar la Copa de Naciones, organizada por la Federaci¨®n Internacional (FIDE) con Chess.com, que public¨® una nota en la que se aseguraba que el noruego hab¨ªa pedido m¨¢s dinero que sus colegas por jugarla. Carlsen reaccion¨® anunciando que, tras haber sido tachado de ¡°taca?o¡±, pedir¨¢ tres veces m¨¢s de sus honorarios normales si Chess.com quiere contratarlo en el futuro.

Carlsen, que no jug¨® a su nivel habitual en la primera fase del Lindores Abbey -su clasificaci¨®n para cuartos de final no estuvo clara hasta la ¨²ltima ronda-, se enfad¨® cuando Nakamura utiliz¨® material audiovisual de Chess24 sin permiso en sus redes sociales. Y todo indica que tambi¨¦n le molesta el liderazgo de Nakamura en Twitch, donde tiene m¨¢s de 250.000 seguidores. De modo que el noruego se meti¨® el martes en Chess.com, retransmitiendo sus partidas en directo por Twitch, con el objetivo se convertirse en el n¨²mero uno de partidas r¨¢pidas en ese club virtual, lo que no pudo conseguir. Lo ¨²ltimo conocido es que Nakamura anuncia una gran competici¨®n de ajedrez y otros juegos en Chess.com con estrellas muy influyentes en Twitch.

En la entrevista con los comentaristas de Chess24 tras masacrar a Nakamura, el campe¨®n del mundo se mostr¨® muy diplom¨¢tico hacia su rival ¨C¡°Le deseo buena suerte¡±, se limit¨® a decir- pero marc¨® territorio con respecto a D¨²bov, a quien tal vez vea como adversario en la final porque Ding est¨¢ rindiendo por debajo de su nivel habitual. ¡°Lo veo vulnerable con las piezas negras¡±, se?al¨® el crecido campe¨®n.