Messi, expulsado por primera vez en su carrera con el Bar?a
El argentino ve su primera tarjeta roja en 753 encuentros como azulgrana en la pr¨®rroga de la final de la Supercopa
Lionel Messi pudo jugar su final n¨²mero 36 con el Barcelona en el mismo escenario donde Michael Johnson bati¨® el r¨¦cord del mundo de los 400 metros lisos en 1999. El peculiar estilo de correr del tejano conquist¨® al p¨²blico sevillano, que asisti¨® asombrado a la gesta. El Estadio de la Cartuja acogi¨® desde aquel Mundial de Atletismo dos finales de la Copa del Rey, una de la Copa de la UEFA y dos finales de la Copa Davis, ambas ganadas por Espa?a a Estados Unidos y Argentina. En esa plaza de tantos recuerdos, esta vez vac¨ªa, Messi acab¨® la final con una roja hist¨®rica, la primera de su carrera como azulgrana en un duelo oficial (s¨ª vio la roja dos veces con Argentina). Eclipsado por rivales como Williams, el argentino fue la imagen de la impotencia en el tramo final de la pr¨®rroga. Su manotazo a Villalibre lo llev¨® a los vestuarios en una imagen in¨¦dita tras 753 partidos como barcelonista.
No hubo espectadores en la final de la Supercopa sevillana para asistir a una nueva final de Messi, aunque algunos privilegiados s¨ª se hicieron notar en alguna parte rec¨®ndita de la grada. La megafon¨ªa se alzaba sobre la soledad del remozado coliseo hispalense, de 60.000 espectadores y con las pistas de atletismo ahora tapadas. Los tiempos del nuevo f¨²tbol, con un Athletic con pantal¨®n blanco disputando la final de la Supercopa con la final de la Copa de 2020 pendiente de jugar ante la Real. Y todav¨ªa ambos equipos podr¨ªan encontrarse en la final de la Copa de 2021.
Las buenas sensaciones en la musculatura de Messi comenzaron a reflejarse por la ma?ana en el Benito Villamar¨ªn. En el mismo escenario donde perdi¨® su ¨²ltimo t¨ªtulo en disputa, la Copa del Rey ante el Valencia de Marcelino, Messi dijo s¨ª. Nadie se atrevi¨® a decirle al capit¨¢n que igual no estaba en condiciones de jugar. El argentino encabez¨® la salida del Barcelona, el primero en pisar el c¨¦sped de La Cartuja detr¨¢s del tr¨ªo arbitral. La primera aparici¨®n de Leo lleg¨® a los 24 minutos, cuando sufri¨® una falta de Muniain. El propio Messi la puso en juego y Ara¨²jo estuvo cerca de rematar.
Golazo de Williams
Ocho minutos despu¨¦s, fue Vencedor el que pis¨® a la estrella del Barcelona, que dio la impresi¨®n de no jugar suelto, escogiendo los momentos para desequilibrar con su calidad. Por ejemplo, a los 37 minutos, cuando su pierna izquierda demostr¨® estar en un estado ¨®ptimo. El disparo, potente y desde lejos del ¨¢rea, sali¨® fuera por muy poco. El segundo momento escogido por Messi fue la jugada del primer gol del Barcelona. Una jugada que se ha repetido hasta la saciedad en las ¨²ltimas temporadas para que esta vez marcara Griezmann.
Mientras Messi se sobrepon¨ªa a sus molestias, el Athletic se sobrepon¨ªa a los golpes gracias a su esp¨ªritu indomable. Tambi¨¦n, por supuesto, gracias a la aparici¨®n de futbolistas como Williams. El delantero mostr¨® un talento desconocido con un pase medido a la espalda de Alba que aprovech¨® De Marcos para hacer el empate. Fue la primera gran aportaci¨®n de Williams en un partido donde fue un aut¨¦ntico suplicio para los centrales del Barcelona. Lenglet sufri¨® una barbaridad ante el atacante, un prodigio de regularidad con su Athletic, donde acumula una alineaci¨®n tras otra. Son 175 las presencias ligueras consecutivas de un futbolista que se atrevi¨® a eclipsar a Messi con un golazo digno del argentino. En el minuto 94 del choque, a sus 26 a?os, Williams lanz¨® un disparo impresionante que se col¨® por la escuadra de la meta de Ter Stegen. El vizca¨ªno le dio la tercera Supercopa de su historia al Athletic mientras Messi se desped¨ªa de su final n¨²mero 36 con la primera expulsi¨®n de su carrera como barcelonista.
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