Ana Peleteiro cambia feliz oro por plata

Jorge Ure?a y Ana Peleteiro, oro en los Europeos de Atletismo de Glasgow hace dos a?os, salieron de plata de Torun (Polonia), lo que, dado el terremoto que han sufrido las costumbres, las rutinas y la humanidad en el a?o largo de la pandemia, est¨¢ mejor que bien. Su rutina de trabajo, sus dudas, su soledad, han sido diferentes, pero eso no ha alterado su ADN de campeones, de competidores natos. Como Ure?a, que, saliendo de una lesi¨®n reciente, solo cedi¨® ante el intocable Kevin Mayer en heptatl¨®n; como Peleteiro, que dos a?os m¨¢s tarde planta cara a todas y compite como nunca en triple salto.

Con el oro de Husillos en 400m la v¨ªspera, y con los bronces de Jes¨²s G¨®mez en el 1.500 el viernes y el de Adel Mechaal en los 3.000m del domingo ¡ªjunto a Mohamed Katir actu¨® de escolta en la marcha triunfal de la coronaci¨®n doble del soberbio Jakob Ingebrigtsen¡ª, el atletismo espa?ol se va de Torun con cinco medallas (d¨¦cima en el medallero liderado por Pa¨ªses Bajos). Hay que sumar, adem¨¢s, los cuartos puestos importantes de los reci¨¦n llegados Katir (3.000m) y Asier Mart¨ªnez (60m vallas) y de la perseverante Marta P¨¦rez en 1.500m; el quinto de Esther Guerrero en los 1.500m y los s¨¦ptimos de Bel¨¦n Toimil ¡ªr¨¦cord de Espa?a en lanzamiento de peso¡ª, y F¨¢tima Diame en longitud, y el octavo de Luc¨ªa Rodr¨ªguez en 3.000m. Con los ocho finalistas, Espa?a asciende al quinto puesto en el r¨¢nking y descubre a una nueva generaci¨®n de atletas, sobre todo las mujeres del medio fondo, que compiten como los juveniles, al asalto siempre, sin miedo a fallar.

La gallega Ana Peleteiro se considera africana de sangre, sin m¨¢s, pero seguramente sabe que su alma es cubana. Por lo menos, compite como una cubana, como su entrenador Iv¨¢n Pedroso, que era especialista en dar siempre la estocada en el sexto salto, el ¨²ltimo, cuando los rivales (Yago Lamela, entonces) ya empezaban a pensar en su bot¨ªn. As¨ª compiti¨® Peleteiro en el triple salto en Torun. Quedaba un intento y su mejor marca hasta el momento, 14,34m, solo le permit¨ªa ser cuarta. El oro estaba en los 14,53m con los que Patricia Mamona acababa de batir el r¨¦cord de Portugal. La plata, un cent¨ªmetro m¨¢s abajo, en los 14,52m de la alemana Neele Eckhardt.

Peleteiro no est¨¢ en una forma tan brillante como hace dos a?os, cuando salt¨® 14,73m en Glasgow, pero est¨¢ mejor que esos 14,34m. De eso est¨¢ seguro Pedroso, que piensa que algo se le est¨¢ escapando. Y solo en el quinto salto, explica por tel¨¦fono desde Torun el cubano, se da cuenta, se da un golpe en la frente por tonto y le vocea a la atleta: ¡°Lo hemos estado haciendo mal, tienes que meter el pie de otra manera, as¨ª, dale intensidad y vamos pall¨¢¡±. Donde no llega la forma llegan la t¨¦cnica y llega el coraje, y llega Peleteiro, que en su ¨²ltimo salto llega a 14,52m, dos cent¨ªmetros corta para el oro pero suficientes para la plata, pues su segundo salto es m¨¢s largo que el segundo de la alemana a la que empata. ¡°No me voy como si hubiera perdido¡±, dijo la gallega. ¡°Luch¨¦ hasta el final y consegu¨ª la mejor marca del a?o pese a haber estado lesionada bastante tiempo. Demostr¨¦ que soy muy buena competidora, y, encima, mi entrenador est¨¢ muy contento conmigo. El verano ser¨¢ mejor, seguro¡±, celebr¨®.

¡°Lo importante, y por eso estamos supercontentos, es que lo sac¨®¡±, dice Pedroso. ¡°Y yo siempre confi¨¦ en que lo sacar¨ªa¡±.

El cortejo espa?ol del rey Jakob

Unos ¨²ltimos 1.000m en 2m 21,51s le bastaron a Jakob Ingebrigtsen para ganar los 3.000m (7m 48,20s), su cuarta carrera en cuatro d¨ªas, su segunda final, su segundo oro, y cumplir con su objetivo de Torun de salir como el m¨¢s premiado de todos. En la carrera, como en los 1.500m, los atletas espa?oles no pudieron sino ser sus guardias de corps, una escolta que persigui¨® por la pista al noruego de 20 a?os con la esperanza de poderle superar en los ¨²ltimos metros. M¨¢s valiente en los 3.000m fue el debutante Katir, que se peg¨® como una lapa cuando cambi¨® el noruego y no pudo evitar despegarse, ya agotado, con el ¨²ltimo cambio del jovencito. Su agotamiento lo aprovecharon dos veteranos expertos, el belga Isaac Kimeli, un realista que sali¨® solo pensando en ser segundo (¡±y en la carrera iba rezando para que, por favor, el noruego bajara el ritmo, y segundo acab¨®, y el catal¨¢n residente en Estambul Adel Mechaal (donde recibe los entrenamientos que le programa Antonio Serrano), quien con los pies en la tierra ahorr¨® todas sus fuerzas para superar a Katir en la ¨²ltima recta y conseguir, as¨ª, su segunda medalla en un Europeo indoor, un bronce tras el oro de 2017.

?Agradeci¨® Ingebrigtsen su trabajo a sus escoltas? M¨¢s bien no. La misma iron¨ªa que us¨® su hermano Henrik en las redes para llamar cobarde al polaco Marcin Lewandowski (el del oro de ida y vuelta con la descalificaci¨®n-recalificaci¨®n del joven noruego) por borrarse de los 3.000m a los que se hab¨ªa apuntado (¡°?asustado de @jakobing?¡±) la utiliz¨® Jakob en la zona mixta cuando coment¨®, ¡°me ha sorprendido que mis rivales me dejaran ir a mi aire, sin interrumpirme¡±, recordando que su descalificaci¨®n frustrada de los 1.500m se debi¨® a que ¨¦l intent¨® apartar a un rival que iba delante y le cerraba el paso. ¡°Ma?ana mismo volver¨¦ a los entrenamientos¡±, anunci¨®. ¡°Creo que puedo ser a¨²n mejor. Siempre quiero ser el mejor y el m¨¢s r¨¢pido, y en Tokio aspiro a ganar los 1.500m¡±.