El Elche aguanta 72 minutos el asedio de la Real Sociedad
El equipo visitante juega con uno menos desde el minuto 11 por la expulsi¨®n de Guti
Si para el Elche cualquier partido es un ejercicio de supervivencia, una escena de James Bond peleando en lo alto de un telef¨¦rico, el de Anoeta lo fue todav¨ªa m¨¢s desde el minuto 11, cuando una jugada en apariencia fortuita se resolvi¨® con la expulsi¨®n de Ra¨²l Guti, que acab¨® pisando el tobillo de Gorosabel, y en la que el jugador de la Real tuvo suerte de que sus ligamentos aguantaran al l¨ªmite de la rotura. Se qued¨® con uno menos el equipo de Fran Escrib¨¢, y, desde ese momento, la pelea en el telef¨¦rico se convirti¨® en el m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa: en inferioridad num¨¦rica y con las manos atadas.
La Real, que ya hab¨ªa salido convencida de que deb¨ªa asediar al Elche cuando las alineaciones estaban intactas y que hab¨ªa gozado de una primera oportunidad en una carrera de Oyarzabal al que los defensas ilicitanos le hicieron pasillo de honor, redobl¨® su ofensiva, abri¨® el juego a las bandas y encajon¨® a su rival en el interior del ¨¢rea.
Pero por esas cosas que pasan en el f¨²tbol, a la Real se le hizo bola la primera parte. La pelota circulaba con fluidez hasta el borde del ¨¢rea, pero el juego se gripaba en el rect¨¢ngulo decisivo, tal vez por el bosque de piernas en los 665 metros cuadrados de jard¨ªn, casi tantas como las que se pueden contar en un asado en la mansi¨®n de Messi.
Por un cuarto de muslo de David Silva desperdici¨® la Real su oportunidad de adelantarse en el marcador, porque el bal¨®n que remat¨® Monreal despu¨¦s de un rebote acab¨® en la red, pero las l¨ªneas que el VAR escribe rectas con renglones torcidos captaron lo que el ojo humano no puede ver, el fuera de juego del canario.
El cerco pas¨® de pantalla a un nivel superior y empez¨® a recordar a los grandes asedios de la historia: Numancia, Masad¨¢, Troya, Constantinopla, Monte Cassino. Todos ellos mezclados, pero con balas de fogueo y flechas con ventosa en vez de punta, como de juguete.
A bal¨®n parado
La Real tuvo mucha presencia en el ¨¢rea del Elche, pero escasa efectividad y poco remate, incluso en algunos minutos perdi¨® la paciencia el equipo de Imanol, y como si jugara a la desesperada, aunque no lo necesitara, se puso a bombardear la porter¨ªa de Gazzaniga con disparos lejanos que volaban por encima del larguero.
La segunda parte fue parecida, con una Real sin pericia en el uso del sacacorchos, y un Elche poniendo parches al salvavidas, que perd¨ªa aire con el paso de los minutos. No pod¨ªa el equipo donostiarra llegar en combinaciones, y tuvo que ser en una acci¨®n a bal¨®n parado como consigui¨® deshacer el entuerto. Sac¨® Januzaj desde la izquierda y remat¨® Aritz -a m¨ª el pelot¨®n que los arrollo- llegando con fuerza desde atr¨¢s.
Hab¨ªa aguantado el Elche lo que pudo, 72 minutos, pero no le dio para m¨¢s. Quiso volcarse sobre el ¨¢rea de la Real, pero no le lleg¨® con su juego. El segundo gol de la Real, que marc¨® Oyarzabal desde el borde del ¨¢rea con su zurda exquisita, fue una an¨¦cdota, y lo que suele pasar cuando la manta que contaba Tim, el t¨¦cnico brasile?o que dirigi¨® a Per¨², se quedaba corta por los dos lados.
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