?Qu¨¦ pasa con los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio? La comunidad cient¨ªfica critica las medidas previstas

No solo algunos grandes medios informativos, como el Asahi Shimbun, o gran parte de la sociedad japonesa son cr¨ªticos con la celebraci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio o piden, incluso, su cancelaci¨®n. A menos de dos meses de su inauguraci¨®n (23 de julio), tambi¨¦n la comunidad cient¨ªfica mundial ha comenzado a mostrar su preocupaci¨®n por su celebraci¨®n mientras la pandemia de covid sigue activa, y en algunas partes del mundo agravada con la aparici¨®n de nuevas variantes de coronavirus.

En un art¨ªculo publicado en el muy respetado New England Journal of Medicine (NEJM), varios expertos en salud p¨²blica y en enfermedades infecciosas critican por ineficaces las medidas previstas para asegurar unos Juegos con el menor riesgo, postulan que la opci¨®n m¨¢s segura ser¨ªa su cancelaci¨®n, pero dado que esto no parece posible, admiten, urgen a la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) a intervenir, como ya hizo antes de R¨ªo 16 cuando el peligro era el mosquito Zika, y al Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI) a establecer nuevas gu¨ªas de conducta para las cerca de 60.000 personas de m¨¢s de 200 pa¨ªses que se congregar¨¢n durante casi 20 d¨ªas en la capital japonesa.

Cuando en marzo de 2020 se decidi¨® retrasar un a?o los Juegos de Tokio, asumiendo que en el verano de 2021 la pandemia estar¨ªa controlada, en Jap¨®n hab¨ªa 865 casos activos de covid 19, y 385.000 en todo el mundo, recuerda el NEJM. ¡°Mientras, ahora, 14 meses m¨¢s tarde hay en Jap¨®n m¨¢s de 70.000 casos activos y 19 millones en el mundo¡±. Adem¨¢s, puntualiza, en Jap¨®n solo est¨¢ vacunada un 5% de su poblaci¨®n, el ¨ªndice m¨¢s bajo de toda la OCDE. En Tokio se concentrar¨¢n este verano, procedentes de m¨¢s de 200 pa¨ªses, 11.000 deportistas, 4.000 miembros de personal de apoyo (entrenadores, t¨¦cnicos, fisios), 23.000 federativos, 17.000 trabajadores de cadenas de televisi¨®n y 6.000 periodistas. A todos ellos, a los que se recuerda que acuden bajo su propia responsabilidad, solo se les exigir¨¢ un n¨²mero indeterminado de PCRs, toma de temperatura y uso de m¨¢scaras que no ser¨¢n suministradas bajo un control de calidad por los organizadores. Se recomienda, pero no se considera obligatoria, la vacunaci¨®n. Aunque varios fabricantes han ofrecido sus vacunas a todos los deportistas, se calcula que los procedentes de unos 100 pa¨ªses no las recibir¨¢n, ni tampoco los adolescentes ni aquellos deportistas que rechacen pon¨¦rsela. El riesgo es doble: los visitantes pueden llevar a Jap¨®n el virus o pueden contraerlo durante los Juegos y llev¨¢rselo de vuelta a sus pa¨ªses.

Y para ellos, explican en el art¨ªculo, cuya primera firmante es Annie Sparrow, de la facultad de medicina Icah, del hospital Monte Sina¨ª de Nueva York, el COI ha editado unas gu¨ªas que no tienen en cuenta la experiencia de los organizadores de otras competiciones deportivas, como la NFL o la NBA, ni se apoyan en evidencias cient¨ªficas.

Frente a la obligaci¨®n de habitaciones individuales para los deportistas, que son sometidos a una PCR diaria y disponen de tecnolog¨ªa wearable (elementos electr¨®nicos y chips que se pueden vestir como accesorios o etiquetas, tatuarse en la piel o incluso implantarse) para rastrear los contactos en caso de positivo de las ligas profesionales norteamericanas, los protocolos de los Juegos Ol¨ªmpicos prev¨¦n que haya tres deportistas por habitaci¨®n, no se ha establecido cada cu¨¢nto tiempo se har¨¢ PCR y el rastreo se har¨¢ mediante la instalaci¨®n de una App en los tel¨¦fonos m¨®viles, que ser¨¢ obligatorio llevar en cada momento. Y la obligaci¨®n de tomar la temperatura constantemente o de controlar los s¨ªntomas se considera ineficaz dado el gran n¨²mero de enfermos asintom¨¢ticos que se da. Y, recuerdan los autores, los protocolos ol¨ªmpicos no contemplan para nada a los miles de voluntarios japoneses y de trabajadores de servicios ¨Cconductores de autobuses, empleados de restaurantes, de hoteles¡­- que estar¨¢n en contacto directo con los deportistas y los acreditados ol¨ªmpicos.

Habr¨ªa sido importante, propone el NEJM, que el COI hubiera prestado m¨¢s atenci¨®n a la forma en que se propaga el virus ¨Cpor el aire¡ª y fijado diferentes niveles de riesgo seg¨²n el deporte que se practicara ¨Cal aire libre sin contacto, como tiro con arco, vela o atletismo, ser¨ªan de nivel bajo; al aire libre con contacto, como f¨²tbol o rugby, y bajo techo sin contacto, como b¨¢dminton o gimnasia, de riesgo moderado, o bajo techo con contacto, como baloncesto o balonmano, de alto riesgo¡ªo el control de la ventilaci¨®n de los autobuses o comedores.

La cancelaci¨®n de los Juegos, entienden los cient¨ªficos, supondr¨ªa la ruina econ¨®mica para el COI, y para Jap¨®n, la p¨¦rdida de una ocasi¨®n de mostrarse ante el mundo como s¨ªmbolo del fin del miedo y el comienzo de la esperanza. Adem¨¢s, sentimentalmente, los Juegos servir¨ªan como elemento de conexi¨®n mundial en unos tiempos de desconexi¨®n y aislamiento, de motivaci¨®n y de movilizaci¨®n. Que haya Juegos, pues, concluyen, pero no as¨ª.

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