Sobre tierra, Federer piensa en verde
El suizo reaparece en Par¨ªs de modo resolutivo (6-2, 6-4 y 6-3 a Istomin) y tras a?o y medio de ausencia en los grandes, sin expectativas en el Bois de Boulogne, enfoca la hierba de Wimbledon sin disimulo
La edad, el tiempo, conducen a situaciones implanteables hasta hace no mucho. Por ejemplo, a que Roger Federer, un ganador de pura raza que debate ten¨ªsticamente por ser el mejor de la historia de su deporte con otros dos gigantes, reconozca abiertamente que ha venido a Par¨ªs, uno de los cuatro templos sacros de la raqueta, simplemente a rodarse. Indicio de una nueva ¨¦poca, qui¨¦n sabe si un punto de inflexi¨®n definitivo. ¡°Solo soy realista. S¨¦ que no voy a ganar [Roland Garros] y q...
La edad, el tiempo, conducen a situaciones implanteables hasta hace no mucho. Por ejemplo, a que Roger Federer, un ganador de pura raza que debate ten¨ªsticamente por ser el mejor de la historia de su deporte con otros dos gigantes, reconozca abiertamente que ha venido a Par¨ªs, uno de los cuatro templos sacros de la raqueta, simplemente a rodarse. Indicio de una nueva ¨¦poca, qui¨¦n sabe si un punto de inflexi¨®n definitivo. ¡°Solo soy realista. S¨¦ que no voy a ganar [Roland Garros] y quien pueda pensarlo, est¨¢ equivocado¡±, advert¨ªa el campe¨®n de 20 grandes, el mito, a las puertas de su retorno al grande franc¨¦s, convertido ahora en un campo de ensayos para eliminar el ¨®xido y recobrar el pulso competitivo de cara a su verdadero objetivo, el de resucitar deportivamente en Wimbledon.
¡°Por supuesto que pueden suceder cosas m¨¢s locas, pero no creo que en los ¨²ltimos 50 a?os alguien que hubiera estado un a?o y medio fuera de la pista, viniera aqu¨ª con 40 y se luciera. S¨¦ cu¨¢les son mis limitaciones en este momento¡±, preven¨ªa el suizo en un discurso tan realista como novedoso, porque a sus hordas de fieles todav¨ªa les cuesta asumir que ¨¦l, Federer, el genio, asuma de antemano que sus opciones son pr¨¢cticamente nulas en un gran torneo. ¡°Han pasado muchas cosas desde que estoy fuera. Ser¨¢ para m¨ª un desaf¨ªo adicional, m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa recuperar el nivel, pero desde el principio sab¨ªa que no ser¨ªa f¨¢cil, independientemente de que hubiera estado lesionado un a?o o tres meses¡±, completaba el de Basilea, que pese a la gigantesca dimensi¨®n del reto lo acepta: su historia, dice, a¨²n no se ha acabado.
No se rinde Federer (6-2, 6-4 y 6-3 a Denis Istomin este lunes). Pese a que el pr¨®ximo 8 de agosto alcanzar¨¢ la cuarentena, dice sentirse a¨²n con fuerzas y ganas para seguir litigando. En cualquier caso, desde que se sometiera a una primera artroscopia en la rodilla derecha en febrero del a?o pasado ¨Cen junio fue necesaria una segunda, por un retroceso en la recuperaci¨®n¨C, muchas cosas han cambiado: a la nueva generaci¨®n le ha salido los colmillos, Nadal y Djokovic se han embolsado otro grande cada uno ¨Ciguales a 20 con el espa?ol, dos por encima del n¨²mero uno¨C y su carrocer¨ªa, casi impecable hasta hace un lustro, comienza a acumular ara?azos. Ya le ocurri¨® en 2016, entonces detenido por su rodilla izquierda; volvi¨®, resucit¨® y se reenganch¨®, pero las circunstancias son ahora bien diferentes.
Federer barajaba regresar a la actividad a comienzos de a?o, pero reconsider¨® la decisi¨®n: la articulaci¨®n no terminaba de responder y posterg¨® su vuelta hasta el 10 de marzo, 405 d¨ªas despu¨¦s de haber disputado su ¨²ltimo partido. Y ah¨ª, m¨¢s dudas. M¨¢s preocupaci¨®n. Venci¨® a Daniel Evans en la reaparici¨®n de Doha, cedi¨® al d¨ªa siguiente contra Nikoloz Basilashvili y a continuaci¨®n renunci¨® a jugar en Dub¨¢i porque el cuerpo no le segu¨ªa lo suficiente: ¡°He decidido que lo mejor es seguir entren¨¢ndome¡±. Movi¨® pieza y renunci¨® a las citas m¨¢s relevantes de la gira sobre tierra para regresar en Ginebra, donde perdi¨® contra Pablo And¨²jar antes de aterrizar en Par¨ªs, donde triunf¨® en 2009 y las cifras disipan una sensaci¨®n enga?osa: en el Bois de Boulogne, solo Nadal (100) y Djokovic (74) han ganado m¨¢s veces que ¨¦l (71).
En la ¨²ltima ocasi¨®n que desfil¨® por la pasarela arcillosa de Par¨ªs, hace dos a?os, el suizo ¨C80 grandes ya en las piernas¨C alcanz¨® las semifinales y claudic¨® ante el mallorqu¨ªn, despu¨¦s de un trazado primaveral m¨¢s que notable. Hoy, sin embargo, concibe el major parisino como una mera lanzadera para acumular kilometraje e ir calibrado sus golpes de cara a Wimbledon, objetivo primordial a partir del 28 de junio, y la puesta en escena fue sencillamente abrumadora. Como en los viejos tiempos: en solo 1h 23m ¨Cel triunfo m¨¢s abreviado de esta edici¨®n, junto al de Karen Khachanov ante Jiri Vesely, mismo cron¨®metro¨C, Federer ape¨® a Istomin y volvi¨® a celebrar una victoria en un Grand Slam, 487 d¨ªas despu¨¦s de la que lograse el a?o pasado en los cuartos del Open de Australia, ante Tennys Sandgren.
Con 48 ganadores y cediendo ¨²nicamente nueve puntos con el primer servicio, el de Basilea accedi¨® a la segunda ronda, cit¨¢ndose con Marin Cilic o Arthur Rinderknech. ¡°Es un placer estar de vuelta. Me ha costado un poco, pero aqu¨ª estoy otra vez¡±, expres¨® con una sonrisa de oreja a oreja, con el mono de trabajo en Par¨ªs y Londres en la mente.
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