El PSG no tiene l¨ªmites

Messi, Neymar, Mbapp¨¦, Sergio Ramos, Di Mar¨ªa, Verratti... En el PSG caben todos. Las estrellas entran, pero dif¨ªcilmente salen. La econom¨ªa de este club Estado, conectado a la m¨¢quina de millones de Qatar, soporta lo que le echen.

Mientras Espa?a ha consumido medio verano debatiendo sobre los l¨ªmites salariales de LaLiga y la influencia de esta norma en las posibilidades de renovaci¨®n de La Pulga por un Barcelona en una situaci¨®n econ¨®mica cr¨ªtica, la sensaci¨®n con la entidad francesa que dirige desde hace una d¨¦cada el catar¨ª Nasser Al-Khela?fi es que circula por una carretera m¨¢s ancha.

En Europa, la UEFA le ha abierto varios expedientes por una hipot¨¦tica vulneraci¨®n de las reglas de fair play financiero, pero de todos ha salido indemne. Su decisi¨®n pol¨ªtica de autoexcluirse del bloque de clubes fundadores de la Superliga apunta a un ¨¢nimo de la instituci¨®n gala de no soliviantar al m¨¢ximo organismo del f¨²tbol continental y evitar as¨ª posibles actitudes especialmente estrictas en la valoraci¨®n de sus cuentas.

Mientras, en los rectores de la liga francesa se extiende la laxitud a la hora de poner la lupa sobre los balances financieros. A finales de 2018, el torneo aprob¨® el ratio de l¨ªmite salarial y de solvencia, sin embargo, ninguno de los dos ha llegado a entrar en vigor. Primero por el periodo de transici¨®n que se dieron y luego porque la pandemia extendi¨® la moratoria.

El l¨ªmite salarial (LaLiga lo aplica desde 2013), si se lleva a efecto tal como se acord¨®, fijar¨ªa que este gasto no deber¨ªa exceder el 70% de los ingresos de un club. Respecto al ratio de solvencia, los niveles de capital de las entidades nunca podr¨ªan ser menores que sus pasivos elegibles, entre ellos su deuda financiera, pero no la generada por fichajes o inversiones en infraestructuras. De todo ello se encarga la Direcci¨®n Nacional de Control de Gesti¨®n (DNCG), dependiente de la liga francesa (Ligue 1), aunque sus m¨¢rgenes de actuaci¨®n son escasos. ¡°Hemos respetado las reglas desde el primer d¨ªa. Antes de hacer cualquier cosa, nos reunimos con nuestros equipos jur¨ªdicos y financieros. Si hemos fichado a Leo es porque podemos¡±, defendi¨® este mi¨¦rcoles Al-Khela?fi en la presentaci¨®n de Messi, que cobrar¨¢ 36,5 millones netos por cada una de las dos campa?as (m¨¢s otra opcional).

El enfado de Tebas

No estaba tan seguro de ello en 2017 Javier Tebas, que reaccion¨® con mucho enfado cuando en un mismo verano el PSG pagaba al Bar?a los 222 millones de la cl¨¢usula de Neymar y se llevaba a pr¨¦stamo del M¨®naco a Mbapp¨¦ con la obligaci¨®n de abonar 180 millones al a?o siguiente. ¡°LaLiga denunciar¨¢ al PSG. Lo haremos porque viola el fair play financiero de la UEFA y las normas de competencia de la Uni¨®n Europea¡±, se quej¨® entonces el presidente de LaLiga. Pero no pas¨® nada.

Nadie lo adivin¨®, pero en ese momento al poderoso torneo espa?ol, que ven¨ªa de un largo periodo de dominio, le estaba empezando a morder seriamente los pantalones una entidad que apenas hab¨ªa nacido en 1970. Hoy ese conjunto luce en su estadio a la pareja Neymar-Messi, al gran deseado del Madrid (Mbapp¨¦), al excapit¨¢n blanco (Ramos) y al medio que tanto ansi¨® el Barcelona (Verratti), entre otros muchos. Desde la llegada de Qatar a sus oficinas, ha invertido en fichajes casi 1.400 millones y en los ¨²ltimos cinco a?os, seg¨²n la revista Forbes, es el club deportivo que m¨¢s ha crecido: un 207%. Con un valor de 2.500 millones, ocupa el puesto 49 de la lista.

Dinero, estrellas... En estos momentos, sobre la cabeza del PSG no existe ninguna amenaza p¨²blica por haber infringido las normas. El ¨²ltimo gran nubarr¨®n se alej¨® en 2019, cuando sobre ¨¦l recayeron indicios de dopaje financiero por justificar ingresos de patrocinio, en el periodo 2015-17, a trav¨¦s de Qatar Turismo que pudieron haber vulnerado las leyes de la UE. Sin embargo, despu¨¦s de un largo recorrido judicial, el Tribunal de Arbitraje Deportivo dictamin¨® que la reapertura del caso se hab¨ªa realizado fuera de plazo. Un mero defecto de forma ech¨® el cerrojo definitivo al asunto. El City, otro de los considerados clubes Estado, tambi¨¦n ha estado bajo el foco de la UEFA, pero, como el PSG, siempre ha salido bien parado.

La acumulaci¨®n sin l¨ªmite de estrellas en la entidad francesa tambi¨¦n genera p¨¦rdidas: 250 millones el a?o pasado y 125 el anterior. Tampoco al conjunto de los equipos de la Ligue 1, golpeados por la covid, les va mejor: 2.600 millones en n¨²meros rojos en los dos ¨²ltimos ejercicios, seg¨²n la DNCG. El agujero, sin embargo, no deja grandes consecuencias hasta la fecha con este marco regulatorio. La llegada de iconos mundiales espolea un campeonato considerado menor hasta ahora en el escenario europeo mientras el PSG sigue so?ando con su santo grial, la Champions, el ¨²nico l¨ªmite que a¨²n no ha alcanzado.

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