Rafa Cabrera gana el Open de Rahm

En el Open de Jon Rahm gan¨® Rafa Cabrera Bello. No hubo triplete para el n¨²mero uno del mundo, que peg¨® un bajonazo el s¨¢bado y en la ¨²ltima jornada no pudo remar m¨¢s que para ser 17?, a seis golpes del vencedor. Pero s¨ª se vivi¨® un estupendo final en el que Rafa Cabrera y Adri Arnaus se jugaron la copa en un desempate en el hoyo 18 despu¨¦s de terminar empatados con -19. Justo antes hab¨ªa tenido Arnaus la gloria en sus manos, un putt para ser campe¨®n y lograr su primer laurel en el circuito europeo en 72 citas y a los 26 a?os (el catal¨¢n es solo 24 d¨ªas mayor que Rahm). Pero la presi¨®n pesa toneladas ante 12.000 espectadores y su golpeo se march¨® desviado. El fallo resucit¨® a Cabrera, mucho m¨¢s curtido, con ganas de reivindicarse a los 37 a?os despu¨¦s de perder hace poco la tarjeta del circuito estadounidense.

Cabrera parec¨ªa sentenciado cuando su bola vol¨® fuera de la calle en la salida de ese ¨²ltimo hoyo, adelantada 26 metros respecto a las rondas anteriores. Pero ah¨ª apareci¨® toda la fortaleza mental de un golfista que ha hecho carrera a base de pico y pala. Primero para inventarse una espectacular huida entre los ¨¢rboles despu¨¦s de poder dropar, luego para salir del b¨²nker y enterrar los fantasmas del primer hoyo del d¨ªa, cuando hab¨ªa perdido su renta con un doble bogey precisamente por un mal golpeo en la arena. Cabrera salv¨® el par, Arnaus fall¨® y ambos se abrazaron antes del cara a cara.

En esas situaciones es cuando la cabeza decide antes que las manos. Arnaus lleg¨® pensando que hab¨ªa acariciado la copa y se le hab¨ªa esfumado. Cabrera, que ten¨ªa una segunda oportunidad que no imaginaba. No hubo m¨¢s que decir y el canario firm¨® el birdie a la primera ocasi¨®n para ser campe¨®n de Espa?a absoluto despu¨¦s de haberlo sido en todas las categor¨ªas anteriores. Arnaus se curti¨® con una derrota que le doli¨® especialmente por haber tenido dos golpes de ventaja y por haber firmado golpes de triunfador, como un drive de 372 yardas en el par cinco del hoyo siete.

Cuando faltaban cinco hoyos por jugarse, el tablero volv¨ªa a se?alar tablas y comenz¨® una guerra psicol¨®gica. Arnaus estamp¨® el eagle en el 14, el segundo de la ronda, pero Cabrera enlazaba tres birdies entre el 13 y el 15. Hasta ese desenlace loco del 18 y el desempate en el mismo hoyo ante una grada repleta y entregada al duelo entre los dos espa?oles.

42.371. Es la cifra de espectadores que ha reunido el Open durante los cuatro d¨ªas (entradas entre 15 y 30 euros). El registro supera los 30.000 aficionados que presenciaron en vivo la edici¨®n de 2019 tambi¨¦n en el Club de Campo. El estir¨®n tiene un nombre: Jon Rahm. El n¨²mero uno del mundo ha sido un im¨¢n que no ha escatimado ninguna atenci¨®n. ¡°Voy a firmar a todos los ni?os, no importa lo que tarde¡±, explic¨® a la organizaci¨®n cuando acab¨® de jugar y a sus pies se abri¨® un largu¨ªsimo pasillo de seguidores, sobre todo los m¨¢s peque?os. Y ah¨ª estuvo Rahm, m¨¢s de una hora y media, con aut¨®grafos y fotograf¨ªas, no como otras estrellas que regatean a su hinchada.

¡°Rahm ha sido una ola imparable¡±, explica Javier Burgos, director comercial del Open de Espa?a. ¡°Ha tra¨ªdo a mucha gente al golf. Quer¨ªamos quitarle esa etiqueta de elitista y eso se puede conseguir gracias a figuras como ¨¦l. Hay mucha gente que no hab¨ªa venido nunca a un torneo del golf, y que no lo sigue habitualmente, pero quer¨ªa ver al n¨²mero uno del mundo. La gente entraba y preguntaba por Rahm, en qu¨¦ hoyo estaba, a qu¨¦ hora jugaba¡±.

El tir¨®n ha sido presencial y televisivo: el torneo se ha retransmitido por un canal p¨²blico (Teledeporte), con audiencias de hasta 900.000 espectadores, adem¨¢s del habitual privado (Movistar Golf). Los 1,5 millones de euros en premios que ha repartido se han cubierto gracias a seis patrocinadores principales (Acciona, BMW, Ayuntamiento de Madrid, Mahou, Rolex y AC hoteles) y varios m¨¢s secundarios. ¡°Tratamos de huir de la personalizaci¨®n del torneo, pero un campeonato con el n¨²mero uno del mundo ha sido mucho m¨¢s f¨¢cil de vender¡±, a?ade Burgos.

¡°Jon un h¨¦roe nacional¡±, le define Gerard Tsobanian, presidente y director general de Madrid Trophy Promotion, la empresa organizadora del Open de Espa?a de golf y que el pr¨®ximo a?o cumplir¨¢ 20 ediciones del Madrid Open de tenis; ¡°podemos compararlo con el inter¨¦s que genera Rafa Nadal. Hay similitudes de efecto. Jon tiene esa presencia y ese carisma igual que Nadal. Firma aut¨®grafos, se hace fotos durante horas, es muy cercano. La gente se identifica con un h¨¦roe, una figura. Eso pasa con Nadal y con Rahm. Es una persona normal, no tiene actitud de estrella, y eso ayuda a que la gente se identifique con un campe¨®n¡±.

En 1995, Seve gan¨® su ¨²ltimo t¨ªtulo en el circuito europeo. Fue el Open de Espa?a, y fue en el Club de Campo. Ignacio Garrido y Pep¨ªn Rivero fueron segundos, a dos golpes del genio. Este a?o, ambos como entrenadores (de Arnaus y de ?lvaro Quir¨®s, respectivamente), han sentido en la piel la pasi¨®n por Rahm. ¡°El ambiente con Seve era impresionante¡±, recordaba este domingo Garrido, ¡°y con Jon igual. Son dos ¨ªdolos a la misma altura. Es cierto que a Jon le falta todav¨ªa para conseguir lo que hizo Seve, pero talento y carisma tiene para llegar donde estuvo Ballesteros¡±.

Si ese efecto Rahm contribuye a un aumento de la pr¨¢ctica del golf en Espa?a es algo que a¨²n debe consolidarse. Despu¨¦s de nueve a?os seguidos de descenso en el n¨²mero de licencias, en los dos ¨²ltimos cursos las fichas federativas han repuntado ligeramente: hoy son 271.788, lejos del pico en Espa?a, registrado en 2010 con 338.588. Fue entonces cuando Jon Rahm so?aba con ser n¨²mero uno del mundo. Hoy es el mejor, capaz de hacer suyo todo un torneo.

Clasificaci¨®n final del Open de Espa?a.

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