Atlanta hace historia y conquista su primera Serie Mundial en 26 a?os
Los Bravos se imponen a Houston 7-0 en el sexto juego y consiguen el t¨ªtulo anhelado desde 1995 con el cubano Soler como mejor jugador
Jorge Soler supo el destino de la pelota en cuanto la conect¨®. Tras el batazo de jonr¨®n, el pelotero cubano de los Bravos de Atlanta se par¨® unos segundos sobre el plato de home y se golpe¨® tres veces en el pecho antes de iniciar la vuelta al diamante. Fue en la tercera entrada del sexto juego de la Serie Mundial, el momento justo en que el equipo comenz¨® a acariciar la anhelada cuarta victoria contra Houston, que ha dado al equipo su primer t¨ªtulo en 26 a?os. El instante tambi¨¦n en que el venezolano Luis Garc¨ªa, p¨ªcher de los Astros, supo que su trabajo hab¨ªa terminado. Esta es la segunda derrota en cinco a?os para Houston en una final de b¨¦isbol despu¨¦s de lograr el t¨ªtulo en 2017.
La frustraci¨®n de Dusty Baker, el entrenador de Houston, fue notoria desde que Soler sac¨® la pelota del estadio Minute Maid con una bomba de 135 metros que impuls¨® tres carreras. Las c¨¢maras captaron el grito de maldici¨®n oculto por la mascarilla de un m¨¢nager obsesionado con los protocolos del coronavirus. Baker sali¨® al montecito a relevar a Garc¨ªa momentos despu¨¦s del jonr¨®n, que lleg¨® en un duelo de ocho lanzamientos entre p¨ªcher y bateador. Este fue el tercer jonr¨®n de Soler contra los Astros, un hito que lo coloca en una selecta lista con Babe Ruth y Lou Gehrig. Con seis carreras impulsadas y un s¨®lido porcentaje de bateo de .300 en la final contra Houston, Soler se ha convertido esta noche en el jugador m¨¢s valioso. Es el segundo cubano que obtiene este reconocimiento despu¨¦s de Liv¨¢n Hern¨¢ndez con los Marlins de Florida, en 1997.
La rotaci¨®n de los lanzadores fue una de las principales preocupaciones de los Astros de cara al sexto partido, donde deb¨ªan defenderse a cara de perro de la desventaja acarreada desde los juegos celebrados en Atlanta. Se baraj¨® la posibilidad de arrancar con Jos¨¦ Urquidy de tirador, pero el mexicano sirvi¨® de relevista en el juego del domingo ganado por los Astros. La decisi¨®n final fue arrancar con el novato de 24 a?os, quien no hab¨ªa tenido el suficiente descanso en el brazo derecho pues lanz¨® (y perdi¨®) el tercer juego de la serie, celebrado el viernes.
El cuadrangular en la tercera entrada solo fue el pre¨¢mbulo de otra demostraci¨®n de la poderosa ofensiva de los Bravos, el equipo que derrot¨® en la final de la conferencia nacional, tambi¨¦n en seis juegos, a los Dodgers que ganaron 106 partidos este a?o. La noche de este martes Dansby Swanson, shortstop de los Bravos, bot¨® la pelota del campo en la quinta entrada en un lanzamiento a 150 kil¨®metros por hora del dominicano Cristian Javier, que entraba alto a la zona de strike. El jonr¨®n de Swanson empuj¨® dos carreras para ampliar una ventaja de 5-0 que a?ad¨ªa m¨¢s presi¨®n a la artiller¨ªa tejana.
Freddie Freeman, de 32 a?os, una de las estrellas de Atlanta, tambi¨¦n sum¨® su parte en la hist¨®rica noche. Lo hizo con un jonr¨®n en solitario en la parte alta de la s¨¦ptima. Era tambi¨¦n la s¨¦ptima carrera, un n¨²mero de buena suerte para un jugador conocido en la liga por su buena estrella. Freeman, quien lleva 12 a?os vistiendo el uniforme de los Bravos, tuvo una productiva noche al bate, con un doble adem¨¢s del cuadrangular, su quinto en la postemporada. Con su actuaci¨®n de esta noche ha dejado claro el por qu¨¦ logr¨® el premio al m¨¢s valioso en la conferencia nacional en 2020. En la temporada regular conect¨® 31 cuadrangulares, extendiendo una envidiable marca: ocho de sus doce a?os ha bateado 20 jonrones o m¨¢s.
Los mejores bateadores de los Astros fueron anulados en una noche donde Max Fried abri¨® el juego para Atlanta. El zurdo encontr¨® dificultades al arranque del partido. Sin embargo, logr¨® imponerse a lo largo de seis entradas en las que solo permiti¨® cuatro hits, ponch¨® a seis bateadores y no permiti¨® carrera. El de esta noche ha sido un final amargo para los grandes bateadores de Houston como Jos¨¦ Altuve, Carlos Correa, Yuli Gurriel y Michael Brantley, quienes fueron los verdugos de los Red Sox de Boston en la final de la conferencia americana.
Atlanta, entrenado por Brian Snitker, ha conseguido este oto?o una anhelada victoria so?ada desde 1995. A inicios de aquella d¨¦cada, el legendario m¨¢nager Bobby Cox tom¨® las riendas tras la peor temporada de la franquicia y lo convirti¨® en uno de los mejores equipos de la liga. Despu¨¦s de m¨¢s de 10 a?os sin ganar un t¨ªtulo de divisi¨®n, los Bravos llegaron entonces a las Series Mundiales de 1991 y 1992 gracias a p¨ªcheres de ¨¦poca: Tom Glavine, Steve Avery, John Smoltz y Greg Maddux. El esperado trofeo lleg¨® al fin frente a los Indios de Cleveland. Despu¨¦s perder¨ªan otras dos finales. La historia de la escuadra inici¨® en Boston a finales del siglo XIX, pero este es apenas el segundo t¨ªtulo nacional para la ciudad de Atlanta despu¨¦s del logrado por los hombres de Cox. Antes, el equipo hab¨ªa ganado otra serie cuando jugaba en Milwaukee.
Algo del ADN de aquel equipo est¨¢ en los Bravos que se han coronado esta noche. Snitker, quien lleva un sexenio al frente, ha sido comparado con Cox por su apuesta en jugadores de la cantera y figuras como Freeman, quien jug¨® las series de postemporada de los Bravos en 2010, 2012 y 2013. Este a?o se convirti¨® en todo un reto para la organizaci¨®n. Atlanta sufri¨® un verano calamitoso con un hilo de lesiones que apartaron del juego a jugadores de gran talento, como el jardinero Ronald Acu?a. Al cierre de la liga solo sumaban 88 victorias, el menor n¨²mero entre la decena de escuadras clasificada a los playoffs. Pero nada de eso ha importado esta noche gracias a una novena de jugadores que han logrado una nueva victoria y, de paso, una comparaci¨®n con los mejores a?os del pasado.
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