Gonzalo P¨¦rez de Vargas (Toledo, 31 a?os) dice que surgi¨® de la nada. Ni ten¨ªa antecedentes familiares en el deporte, ni creci¨® en un lugar de gran tradici¨®n al balonmano ¡ªm¨¢s bien al contrario¡ª, ni recuerda la huella de ninguna persona cuyas ense?anzas le marcaran en sus primeras estiradas bajo palos. Todo se debi¨®, seg¨²n sus palabras, a una coincidencia y a una facilidad innata. ¡°He sido muy autodidacta. No sabr¨ªa decir si es talento, pero todo me sal¨ªa de una forma natural¡±, resume. ¡°Con cinco a?os, el padre de un compa?ero de clase, antiguo jugador de Segunda, quer¨ªa que sus hijos practica...

Gonzalo P¨¦rez de Vargas (Toledo, 31 a?os) dice que surgi¨® de la nada. Ni ten¨ªa antecedentes familiares en el deporte, ni creci¨® en un lugar de gran tradici¨®n al balonmano ¡ªm¨¢s bien al contrario¡ª, ni recuerda la huella de ninguna persona cuyas ense?anzas le marcaran en sus primeras estiradas bajo palos. Todo se debi¨®, seg¨²n sus palabras, a una coincidencia y a una facilidad innata. ¡°He sido muy autodidacta. No sabr¨ªa decir si es talento, pero todo me sal¨ªa de una forma natural¡±, resume. ¡°Con cinco a?os, el padre de un compa?ero de clase, antiguo jugador de Segunda, quer¨ªa que sus hijos practicaran balonmano y, como en Toledo no hab¨ªa nada a nivel formativo, mont¨® un equipo y el resto nos apuntamos. Estar siempre con amigos, empezar a viajar y pertenecer a un grupo hizo que muy pronto fuese una prioridad para m¨ª. Y siempre como portero¡±, relata este guardameta de 1,90 de altura, captado a los 16 a?os por el Barcelona, y que desde el principio destac¨®, seg¨²n todos los que le han tratado, por su car¨¢cter serio y cerebral. As¨ª sigue siendo, puntualiza ¨¦l.

A P¨¦rez de Vargas y a toda la selecci¨®n les espera este viernes en las semifinales del Europeo (18.00, Tdp; Francia-Suecia a las 20.30) el peor cliente, Dinamarca, que les ha dejado sin dos finales en un a?o: la del Mundial (33-35) y la ol¨ªmpica (23-27). ¡°La sensaci¨®n es clara: son favoritos. A nosotros nos va bien el papel de underdogs [en ingl¨¦s, el que lleva las de perder]. Para ganarles tienes que hacer el mejor partido, pero bueno, sin realizar nuestro mejor balonmano estuvimos cerca de vencerles las dos ¨²ltimas veces. Les tenemos ganas¡±, apuntaba este jueves despu¨¦s de comer, recostado sobre la cama del hotel en conversaci¨®n telem¨¢tica y justo cuando la federaci¨®n ali?aba el duelo con un llamativo fotomontaje de inspiraci¨®n laportista.

El presidente del Barcelona, cuando era candidato hace un a?o, colg¨® un cartel enorme frente al Bernab¨¦u con la leyenda ¡°Ganas de volver a veros¡±, el mismo mensaje e id¨¦ntica composici¨®n que utilizaron los rectores espa?oles en la previa del choque de Budapest, con subt¨ªtulos en dan¨¦s: ¡°Jeg har lyst til at se je rigen¡±. El clima cogi¨® temperatura tambi¨¦n por unas declaraciones sibilinas de Jordi Ribera: ¡°Parece que Dinamarca nos elige, nos ver¨¢n como un equipo m¨¢s c¨®modo¡±, desliz¨® el t¨¦cnico sobre la derrota de su rival en semifinales contra Francia (29-30) tras desperdiciar una renta de cinco tantos.

Que los n¨®rdicos repitan en la lucha por las medallas no ha arruinado a ninguna casa de apuestas. Era lo que se esperaba de los Mikkel Hansen, Mathias Gidsel, Holm, Landin y compa?¨ªa. Con una Espa?a tan renovada y con hasta cinco debutantes en un gran torneo hab¨ªa m¨¢s dudas. ¡°Los rivales te lo dicen: ¡®No s¨¦ c¨®mo lo hac¨¦is, pero siempre est¨¢is ah¨ª¡¯. No somos los m¨¢s fuertes ni los m¨¢s altos ni los que tenemos los mejores lanzadores, pero el sentido de grupo nos hace especiales y es lo m¨¢s complicado de copiar para los contrarios. Lo m¨¢s importante es que somos amigos. Aunque ya est¨¢ cogido el nombre por la selecci¨®n de baloncesto, somos una familia, un equipo molesto, muy dif¨ªcil de batir. En estos campeonatos, con tan poco tiempo de preparaci¨®n, el factor humano influye much¨ªsimo, y ah¨ª no podemos fallar. A veces igual no te apetece hacer cosas con el resto de los compa?eros, pero es necesario ese extra¡±, explica.

No somos los m¨¢s fuertes ni los m¨¢s altos ni los que tenemos los mejores lanzadores, pero el sentido de grupo nos hace especiales

M¨¢s all¨¢ de las atm¨®sferas colectivas, luego est¨¢n las peculiaridades de cada puesto y en ese terreno, advierte el toledano, ninguna es tan distinta como la suya. ¡°Para opinar sobre la porter¨ªa, lo has tenido que vivir. Si no has estado bajo palos, es muy dif¨ªcil dar consejos y no te los vamos a comprar. Entre nosotros nos damos informaci¨®n que muy poca gente nos puede aportar. Desde fuera todo se ve m¨¢s f¨¢cil. ¡¤Este jugador tira por aqu¨ª, por all¨¢, pero si no has estado all¨ª, no has experimentado lo que se vive¡±, subraya el barcelonista, que dice que huye de la sobreinformaci¨®n a la hora de preparar un partido, incluso en una cita tan importante como la de Dinamarca. El meta espa?ol, explica, almacena datos en su cabeza de forma rutinaria a lo largo del a?o porque luego, llegada la hora, acaba actuando de forma natural.

¡°Nosotros no nos podemos esconder. Un extremo no tiene un buen d¨ªa y renuncia a lanzar. Los guardametas siempre estamos participando y, si no apareces, se te se?ala. Mentalmente, necesitas ser m¨¢s fuerte que un compa?ero de pista¡±, reivindica. Una prueba de ello fue el ¨²ltimo encuentro, contra Polonia, en el que ¨¦l y su amigo Rodrigo Corrales no pararon una durante 29 minutos y 20 segundos de la segunda parte. Hasta que el gallego rechaz¨® dos balones decisivos. ¡°Estamos m¨¢s acostumbrados a brillar que a tener lagunas, pero en esos d¨ªas el equipo da un paso adelante¡±, valora P¨¦rez de Vargas, que esa tarde fue superado en los siete lanzamientos que recibi¨® (en todo el Europeo acumula un 31% de eficacia: 43 intervenciones en 138 tiros).

Hasta el a?o pasado no logr¨¦ la tranquilidad de saber que soy capaz de rendir en momentos clave

El toledano, que termin¨® su formaci¨®n en el Granollers y Toulouse antes de instalarse definitivamente en el Palau Blaugrana en 2014, debut¨® con los Hispanos en 2012, acumula 147 partidos y diez grandes campeonatos internacionales. Sin embargo, confiesa que hasta el a?o pasado no alcanz¨® una seguridad plena en s¨ª mismo. ¡°Consegu¨ª la tranquilidad de saber que soy capaz de rendir en momentos importantes, que era una de las cosas que pod¨ªa achacarme. Lo hab¨ªa hecho con la selecci¨®n en el Europeo 2020, pero me faltaba en la Champions con el Bar?a, donde hab¨ªamos sufrido derrotas dolorosas¡±, admite. Y el t¨ªtulo de la pasada temporada le dio el impulso definitivo. Ahora busca repetir las mismas sensaciones con una Espa?a que ha llegado a semifinales en 11 de los ¨²ltimos 15 torneos. El factor diferencial del grupo, seg¨²n su portero.

¡°Corrales es como un hermano¡±

A la porter¨ªa de Espa?a le ponen el cerrojo dos amigos de juventud. El toledano Gonzalo P¨¦rez de Vargas y el gallego Rodrigo Corrales ¡ªjugador del Veszpr¨¦m h¨²ngaro¡ª coincidieron pronto en el Bar?a y, desde entonces, su relaci¨®n ha ido m¨¢s all¨¢ que bajo palos. ¡°Nos conocimos en 2002, en un torneo en Granollers. Luego estuvimos en las selecciones promesas y cadetes. ?l lleg¨® a Barcelona con 15 y yo, con 16. Desde entonces tenemos una gran relaci¨®n, hemos sido compa?eros de piso, en la selecci¨®n desde 2016 y hemos viajado con nuestras parejas. Para m¨ª es como un hermano¡±, comenta P¨¦rez de Vargas. Cuando de adolescentes no com¨ªan en La Masia, el cocinillas era el toledano, aunque ahora la porter¨ªa se la guisan casi al alim¨®n. Este es su s¨¦ptimo gran torneo juntos. P¨¦rez de Vargas siempre tuvo fama de chico maduro y cerebral. Corrales era el dicharachero y despistado. ¡°Rodri ha mejorado, ya no es tan despistado. Todo el mundo tiene la sensaci¨®n de que habla mucho, pero luego en petit comit¨¦ es m¨¢s tranquilo¡±, matiza su amigo.

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