Un revulsivo hacia la igualdad

El deporte es un escaparate de valores. Una convivencia en respeto es un ejemplo para los m¨¢s j¨®venes, un triunfo forjado desde el esfuerzo limpio marca un camino a la pr¨®xima generaci¨®n y un trato de igualdad entre hombres y mujeres es una semilla de progreso a ojos de todos. La competici¨®n profesional, dado su impacto a nivel mundial, tiene una responsabilidad de primer orden. Y cada avance debemos valorarlo como un tesoro.

Los ¨®rganos rectores del tenis anunciaban estos d¨ªas la creaci¨®n de la United Cup. Ser¨¢ la competici¨®n por equipos que abra la temporada a partir de 2023 y lo har¨¢ reuniendo a jugadores y jugadoras bajo el abrigo de un mismo torneo. Es un evento mixto, donde hombres y mujeres formar¨¢n parte del mismo grupo defendiendo los colores de su pa¨ªs, como m¨¢s reciente ejemplo del trabajo conjunto que ATP y WTA desean fortalecer en estos ¨²ltimos a?os.

Aunque su nacimiento sea la consecuencia de una negociaci¨®n entre instituciones ¡ªla Copa Davis organizada por la Federaci¨®n Internacional (ITF) pasa a formar parte del calendario ATP Tour, haciendo que desaparezca una ATP Cup que estaba en conflicto con la primera¡ª, el resultado es una sinergia de igualdad entre g¨¦neros. Un deporte que ha hecho esfuerzos por equiparar el circuito femenino con el masculino vuelve a ser protagonista con una iniciativa noble en este sentido.

El tenis ha sido durante a?o un ejemplo de vanguardia en el trato hacia el deporte femenino, equiparando las ganancias en algunos de los mayores torneos del a?o, gozando de una cobertura televisiva creciente y haciendo competir a deportistas de ambos g¨¦neros en las mismas instalaciones, algo sin reflejo en ninguna otra disciplina. Ha situado a sus principales figuras entre las atletas m¨¢s valoradas deportiva y comercialmente a nivel mundial. Colocar el foco en ambos vestuarios al inicio del a?o, con tantas miradas a?orando el deporte, parece otro paso en la buena direcci¨®n.

La temporada de tenis est¨¢ a punto de terminar. En plena disputa de las WTA Finals, donde concurren las ocho mejores jugadoras y parejas del a?o, y la definici¨®n de la Billie Jean King Cup en el horizonte, donde Espa?a competir¨¢ liderada por Paula Badosa, el vestuario femenino camina con un soplo de reconocimiento. Quiz¨¢ la United Cup no sea el evento de mayor prestigio, es posible que no re¨²na a toda la plana mayor del circuito, pero coloca a las jugadoras en el lugar que les corresponde.

Los m¨¢s aficionados recordar¨¢n la ya extinta Hopman Cup, un evento mixto celebrado hasta la temporada 2018 al inicio del curso. La United Cup se dota incluso de mayor vigor, pasando de tres a cinco partidos por eliminatoria, incluyendo dos partidos femeninos y un dobles mixto. Con 12 equipos participantes y tres sedes de competici¨®n, su llegada promete ser un revulsivo de ilusi¨®n en el inicio de la temporada.

En un momento hist¨®rico de complicado relevo, con la marcha de la ¨²ltima gran leyenda ¡ªSerena Williams¡ª y una n¨²mero uno en el trono ¡ªAshleigh Barty ¡ª, el circuito femenino se beneficiar¨¢ de una exposici¨®n mayor, de esa plataforma que potencie al buen grupo de figuras que marcan el talento actual en el vestuario.

La creaci¨®n de este evento refleja un compromiso entre ambos g¨¦neros para elevar nuestro deporte y as¨ª seguir dando ejemplo a otros deportes y al resto de la sociedad. La uni¨®n de ambos g¨¦neros es algo especial; eventos como este ayudar¨¢n a que hombres y mujeres trabajen conjuntamente en busca de un mismo objetivo. Un ejemplo para todos.

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