Muguruza y la magia que se hace de rogar

Desde hace un tiempo, exactamente desde que logr¨® a finales de 2021 un hito ¨²nico al convertirse en la primera mujer espa?ola en ganar la Copa de Maestras, Garbi?e Muguruza transita por el circuito de puntillas, como aquella que desea abandonar la habitaci¨®n con la voluntad de no ser vista. Es decir, Garbi?e no es Garbi?e, o al menos no del todo, no aquella jugadora que iba pisando fuerte por todos lados y todav¨ªa m¨¢s en los grandes escenarios, donde se crec¨ªa y ca¨ªa como una bomba de racimo. Primero la final de Wimbledon (2015), despu¨¦s el cielo de Roland Garros (2016), luego el de Londres (2017) y hace un par de inviernos, cuando no entraba en las quinielas pese a haberse clasificado para el Masters, la gloria encontrada en Guadalajara (M¨¦xico). All¨ª, de repente, ?boom!, otra vez.

¡°No he sido la jugadora m¨¢s estable ni tampoco quiero serlo. Eso me ha demostrado que tengo una magia; no quiero depender de ella, pero a veces suele salir y tengo el talento para hacerlo posible¡±, dec¨ªa hace medio a?o en Wimbledon, despu¨¦s del ¨²ltimo extrav¨ªo. Aquel d¨ªa trataba de consolarse despu¨¦s de haber cedido un 6-0 contra la 88? del mundo, en 18 minutos. Se a?ad¨ªa el borr¨®n al deficiente rendimiento del resto de la temporada y que perdura hasta hoy, porque la tercera ronda lograda en el ¨²ltimo US Open sabe a demasiado poco para una tenista de su categor¨ªa. Se busca a s¨ª misma Muguruza, de nuevo confiada en que un momento u otro, esa magia reaparecer¨¢.

¡°Ir de favorita a veces no ayuda, por la presi¨®n. Ahora no lo soy, pero creo que tengo opciones de avanzar. Estoy muy animada para que esta temporada vaya mejor que la anterior. Creo que soy buena en volver de repente y dar la sorpresa¡±, dice en Melbourne, donde la pr¨®xima madrugada (1.00, Eurosport) debutar¨¢ contra la belga Elise Mertens, la 32? en el ranking.

Objetivamente, nadie espera un bombazo o un gran arrebato de Muguruza en este Open, y menos a¨²n despu¨¦s de las dos derrotas firmadas en la antesala del torneo, contra Bianca Andreescu y Belinda Bencic en el doble ensayo de Adelaida. Pero, objetivamente tambi¨¦n, pocos se atrever¨ªan a descartarla por completo. No era sencillo divisarla en la final de hace tres a?os, pero sac¨® la varita y ah¨ª estuvo, cerca, muy cerca de lograr su tercer grande, hasta que se bloque¨® durante el desenlace y se qued¨® a un tris de hollar tambi¨¦n la cima australiana. Triunf¨® la estadounidense Sofia Kenin, que lleg¨® a ser n¨²mero cuatro y hoy es la 203?. S¨ª, tenis.

Pocas horas en pista

¡°La competici¨®n no est¨¢ acabando de encajar, me han faltado partidos, pero me veo bien. Por experiencia puede pasar que haga un buen torneo¡±, insiste la espa?ola, que pudo completar una pretemporada productiva en el Club Puente Romano de Marbella y luego, en la toma de contacto con la competici¨®n, cedi¨® en los dos compromisos y por eso llega al estreno con ¡°sensaciones agridulces¡±. Buena base, pero falta el chispazo competitivo. ¡°Es cierto que he tenido un mont¨®n de tiempo para prepararme y entrenar, pero no he acumulado horas en pista, aunque aqu¨ª he jugado muchos a?os [11 participaciones] y s¨¦ que todo puede pasar¡±, agrega.

El mapa te¨®rico del cuadro indica que en el caso de progresar, Muguruza (29 a?os) tendr¨ªa que sortear un verdadero campo de minas: Sabalenka, Bencic, Ons Jabeur, Caroline Garcia, Iga Swiatek¡­ Pero ahora mismo, la realidad la obliga a competir desde un perfil bajo y a pensar exclusivamente en lo inmediato, nada m¨¢s all¨¢. Es la 73? del mundo ¨Cel puesto m¨¢s bajo desde mayo de 2013¨C, enlaza cuatro tropiezos en la transici¨®n de un curso a otro, su balance desde el ¨¦xito de Guadalajara es negativo ¨C12 triunfos, 19 derrotas¨C y no gana un partido desde que superara la primera ronda de Tokio en septiembre.

¡±Ser¨¢ una temporada dura porque parto de m¨¢s abajo, as¨ª que debo jugar partidos y coger confianza. A veces, ir desde esa posici¨®n puede favorecerte porque vas m¨¢s en la sombra. Vamos a ver, qui¨¦n sabe¡­¡±, resuelve Garbi?e, frotando una y otra vez la l¨¢mpara para que regrese esa magia que se resiste.

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